Una semana con el Xiaomi 13T Pro: una vuelta a las raíces por la puerta grande
Los nuevos Xiaomi 13T y 13T Pro suponen un revulsivo en el mercado español, donde se echaban en falta este tipo de móviles de gama alta.
4 octubre, 2023 01:34Cuando Xiaomi llegó a España en 2017 lo hizo de a mano del Xiaomi Mi A1, un terminal de gama media con Android One que prometía a los compradores una buena experiencia en todos los aspectos sin por ello exigir mucho dinero. Ese móvil, y los que siguieron, consiguieron alzar a la empresa hasta los primeros puestos de ventas, incluso eclipsando por momentos a Samsung.
Desde entonces han pasado muchas cosas, y algunas de ellas han explicado, al menos parcialmente, el incremento de precio de muchos de los móviles de la empresa. Xiaomi y Redmi se han dividido, al menos en el marketing, para desvincular los móviles económicos de los móviles de gama alta. Xiaomi se quedaba con los mejores modelos por prestaciones y Redmi se quedaba con los que mejor relación calidad precio ofrecían.
Esto supuso que muchos de los móviles de la empresa que más se vendían eran terminales Redmi, de unos 300 euros, tanto del año en curso como de generaciones anteriores. El cambio de criterio vivido desde el Xiaomi Mi 6 en adelante dejó claro que la gama alta de Xiaomi no volvería a ser etiquetada de chollo.
Sin embargo, en un momento dado Xiaomi presentó los T Series, que eran móviles de gama alta enfocados a democratizar las prestaciones más avanzadas. Eran menos potentes que los flagships pero también más baratos. Con todo, en los últimos años los precios no eran tampoco muy bajos, y Xiaomi ha tomado nota con los Xiaomi 13T (desde 659,99 euros) y Xiaomi 13T Pro (desde 799,99 euros).
Más elegante que nunca
Durante una semana hemos estado usando el Xiaomi 13T Pro que nos ha cedido la empresa junto con la Xiaomi Smart Band 8, cuya llegada a España también se anunció en el mismo evento. Se trata de una unidad de color verde, que comparte muchos elementos con el Xiaomi 13T, algo que se aprecia claramente en el exterior.
El Xiaomi 13T Pro es claramente un móvil de gama alta, con una apuesta obvia por la eficiencia, sin alardes técnicos que pudieran encarecer el producto. Esto se aprecia en la calidad de construcción y el diseño. Este smartphone tiene una apariencia convencional, pero con un módulo de cámara muy bien diseñado que le aporta cierta sobriedad, sin las estridencias de otros modelos, y en el que destaca el logo de Leica, marca de la que hablaremos luego.
El canto es de metal, y está tintado del mismo color que la parte trasera, lo que le da un aspecto muy homogéneo al móvil. En la parte superior tenemos el emisor de infrarrojos, un micrófono de cancelación de ruido y el altavoz secundario. Este altavoz tiene una perforación diferente al visto en otras ocasiones, y nos da la sensación de ser algo menos potente que el de modelos anteriores.
En el lateral izquierdo no hay botones ni elementos y en el derecho tenemos los dos botones de volumen y el de encendido. En la parte inferior tenemos la ranura para tarjetas SIM, el micrófono para llamadas, el puerto USB-C y el altavoz principal. La parte frontal, dominada por la pantalla, dispone de unos marcos ajustados, ligeramente más gruesos en la parte inferior, pero siempre en los límites de lo esperado en un dispositivo de este tipo.
La ergonomía está conseguida gracias a una curvatura acentuada en los laterales del panel trasero, que extrañamente desaparece de la pantalla. Los Xiaomi 13T Series tienen una pantalla plana, algo que parece que vuelve a ponerse de moda en la gama alta. El peso, de 206 gramos, parece menor de lo que es, habiendo la marca equilibrado bien el mismo para que no resulte molesto.
El último punto de este apartado es una de las prestaciones estrella: la certificación IP-68. Xiaomi ha apostado por ofrecer esto en un terminal de precio medio o medio alto, no sólo en sus terminales más exclusivos. Esto permite el uso del terminal con más tranquilidad.
Estas cifras asustan
Una de las prestaciones más llamativas del Xiaomi 13T Pro, y que no llegan al 13T, es la memoria RAM de hasta 16 GB y la memoria interna de hasta 1 TB. No es este el primer móvil en usar esas cantidades de memoria, pero sí lo es dentro del rango de precios en el que se mueve. La unidad que nos han cedido no era esa, que además sólo se vende en negro, pero aún así cuenta con 12 GB de RAM y 512 GB de almacenamiento. Y las tecnologías son las últimas del mercado, LPDDR5X para la RAM y USF 4.0 para el almacenamiento.
Esto va de la mano con uno de los procesadores más potentes del sector, el MediaTek Dimensity 9200+, un chipset de 4 nm que ofrece una experiencia similar a la que tenemos con los procesadores más potentes de Qualcomm. Este procesador, anunciado en mayo de este mismo año, es la respuesta de la empresa china a los Snapdragon 8 Gen 2.
Como era de suponer, el rendimiento en juegos exigentes y en el uso de la multitarea es muy bueno, no habiendo dado ni siquiera problemas de sobrecalentamiento. Incluso parece que MIUI responde mejor, no sabemos si por el procesador o porque el código se ha refinado, como comentaremos en el apartado de la interfaz del análisis.
Si nos vamos a valorar la conectividad tenemos que apuntar la presencia de 5G, NFC, GPS o la última conectividad inalámbrica disponible, Wifi 7. Entre las ausencias, las esperadas, radio FM, jack de auriculares, tarjeta de expansión de memoria... No obstante, esto es ya algo que nadie debería esperar de un terminal, sobre todo de uno que no es un gama media o de entrada.
Llevando el brillo al máximo
La pantalla del móvil es una de las características más importantes del mismo. No sólo porque es la manera en la que interactuamos con él, sino porque también es la forma en al que extraemos esa información. Xiaomi ha apostado por subir la calidad de la pantalla de sus T Series con un panel que no tiene nada que envidiarle a otros de modelos más caros.
Tiene una diagonal de 6,67 pulgadas con una resolución a medio camino entre el FHD y el 2K, lo que logra una nitidez muy buena sin comprometer demasiado la autonomía. A esto ayuda que el panel es AMOLED, con un gasto energético menor que el de otras tecnologías. La tasa de refresco ha subido a los 144 Hz, dejando atrás ya los 120 Hz que aún mantiene la mayor parte de la industria. La tasa de muestreo táctil es de 480 Hz, el doble que la de ciertos móviles que se han diseñado incluso para jugar.
Una de las cosas que más llama la atención de la hoja de especificaciones de este modelo es el nivel de brillo de la pantalla. La marca presume de integrar 2600 nits de brillo máximo, aunque la realidad es que pocas veces llegaremos a ver eso. El brillo máximo medio es de 1200 nits, que es el que veremos en la mayoría de ocasiones en las que necesitemos una pantalla brillante. Los 2600 nits sólo se alcanzan de forma puntual en algunas zonas cuando se usa el HDR10+ para ver contenido y en situaciones muy particulares.
La protección de la misma viene dada por un cristal Corning Gorilla Glass 5 y bajo el panel tenemos el sensor de huellas. Es de tipo óptico y, sin ofrecer grandes novedades, permite un acceso muy rápido, casi tanto como el que se obtiene con el desbloqueo facial. Además, ese sensor sirve para colocar accesos directos de ciertas aplicaciones e incluso medir nuestra frecuencia cardíaca.
Leica llega a más usuarios
La presentación privada de los Xiaomi 13T Series duró algo más de media hora, y más de la mitad fue sobre el sistema de cámaras de los nuevos móviles. El año pasado Xiaomi presumía de sensor de 200 Mpx, y ahora vemos que ha bajado la resolución hasta 50 Mpx, algo que nos parece genial. El motivo es que las fotos de este móvil son mejores que la de su antecesor.
Al llevar la marca Leica a los T Series Xiaomi busca democratizar el acceso a las cámaras de esta marca, al menos dentro del sector de la telefonía móvil. Hasta ahora sólo se habían visto en los modelos más caros de la compañía, y es una buena noticia que eso haya cambiado. De hecho, se nota mucho la calidad de las nuevas cámaras, pero incluso más el buen hacer de Leica en el tratamiento de color, opciones de software, etc.
La cámara principal, de 50 Mpx, es capaz de realizar tomas bastante rápidas, algo que se agradece cuando se usa un móvil ya que en ocasiones no tenemos tiempo de parar y enfocar. La calidad es muy buena de día y de noche, e incluso la grabación de vídeo está lograda. No es el que mejor resultados da pero en el rango de precios en el que se mueve sí que es una buena opción.
El sensor secundario es un gran angular de 12 Mpx. Esta es la cámara que menos cambia y, aunque funciona bien, se nota que es a la que menos importancia se le ha dado, con una zona de distorsión perimetral algo acentuada y un detalle algo aplanado cuando la luz baja. Con todo, no es un mal sensor, simplemente es el más flojo de los tres traseros.
La sorpresa viene en la tercera cámara, que pasa de ser un sensor macro casi inútil a un sensor de 50 Mpx con zoom óptico de 2 aumentos perfecto para retratos. Este cambio por sí solo justifica la presencia de Leica en la parte trasera, y el software le saca mucho partido.
Delante tenemos un sensor de 20 Mpx que no cuenta con la certificación Leica, pero que cumple su cometido. Nos da unos selfies agradables, con un vídeo bien estabilizado tanto de día como de noche, así como unos colores correctos. Lo único a mejorar es el HDR en algunas escenas algo complicadas.
Autonomía y carga rápida
Una de las principales diferencias entre el Xiaomi 13T y el 13T Pro es la velocidad de carga. Ambos montan una pila de energía de 5000 mAh, de las más grandes de la categoría, pero el modelo Pro cuenta con 120 W de cara rápida, lo que permite llenar la batería del 0 al 100% en poco más de 20 minutos.
En la primera prueba de batería hemos estado usándolo mucho en exteriores. Hemos hecho muchas fotos y vídeos, y hemos jugado. El resultado ha sido de unas 4 horas de pantalla pero con más de 30 horas de autonomía total.
En la segunda prueba de batería hemos estado más tiempo bajo cobertura Wifi, con el brillo de la pantalla más bajo, y hemos superado por poco las 5 horas de pantalla, de nuevo con más de un día de autonomía, en concreto unas 26 horas.
El resto de días hemos podido confirmar que la autonomía de este móvil es muy buena, sin llegar a ser excelente. MIUI sigue ayudando mucho en este aspecto, con el inconveniente de tener que configurar ciertas aplicaciones para que funcionen bien en segundo plano. La única pega en este apartado es, sin duda, la ausencia de carga inalámbrica.
MIUI 14 ha mejorado
En los últimos años, siempre que he analizado un smartphone de Xiaomi, al llegar a la parte del software me he quedado con una sensación algo agridulce. MIUI no llega a ser un problema grave, pero en ocasiones ha empeorado la experiencia del terminal. En este caso no ha sido así, y parece que la compañía ha logrado subsanar algunos inconvenientes de rendimiento, manteniendo intactas las funciones extra de la capa.
Eso sí, seguimos teniendo demasiadas aplicaciones preinstaladas, e incluso una tienda de apps extra, que no debería estar en un terminal de estos precios. Xiaomi debería diferenciar la parte alta de su catálogo y la baja para también tratar el software de manera distinta.
Lo que sí nos ha gustado es la promesa de Xiaomi de actualizar nada menos que durante 4 años sus nuevos móviles. Y hacerlo durante 5 en lo que a parches de seguridad se refiere. Es cierto que la velocidad de las actualizaciones importa tanto o más que la cantidad, pero se agradece el esfuerzo de la empresa de ponerse al día y alcanzar a las marcas que son referencia en el sector, como Samsung.
¿Me lo compro?
Sí. Esa es la respuesta corta. Si alguien busca un móvil de gama media alta, con un precio ajustado para los estándares de 2023, quiere una buena cámara, gran pantalla y que no falle en el resto de especificaciones, el Xiaomi 13T Pro es un buen candidato a considerar.
Sólo hay un problema. Xiaomi ha presentado dos móviles a la vez, y el Xiaomi 13T es capaz de hacerle frente al Xiaomi 13T Pro en relación calidad precio. Tiene el mismo diseño, la misma pantalla, las mismas cámaras y la misma batería. Sólo cambia la carga rápida, el procesador y la cantidad de memoria disponible. Son aspectos a considerar, pero muchos verán que, para ellos, el Xiaomi 13T es mejor opción.
Dicho todo eso, si el mayor problema de Xiaomi es que uno de sus terminales es demasiado bueno y es capaz de eclipsar a los demás, es para felicitarlos. Hacía tiempo que un móvil de gama alta de Xiaomi no me parecía tan redondo, dando la sensación de que Xiaomi vuelve a sus raíces por la puerta grande.
Características del Xiaomi 13T Pro
- MediaTek Dimensity 9200+.
- Memoria RAM: 12 / 16 GB.
- Almacenamiento interno: 256 / 512 / 1024 GB.
- Tamaño: 6,67 pulgadas.
- Resolución: FHD+.
- Tecnología: AMOLED.
- Tasa de refresco: 144 Hz.
- Principal: 50 Mpx.
- Gran Angular: 12 Mpx.
- Sensor telefoto: 50 Mpx 2x.
- Otros: LED Flash.
- Resolución: 20 Mpx.
- 5G.
- 4G.
- Bluetooth 5.4.
- WiFi 7.
- Dual SIM.
- Batería: 5.000 mAh.
- Carga rápida: 120 W.
- Puerto USB-C.
- Dolby Atmos.
- Altavoces estéreo.
- IP68.
- Sensor de huellas en pantalla.
- Dimensiones: 162,2 × 75,7 × 8,49 mm (cristal) 8,62 mm (cuero).
- Peso: 206 gr (cristal) / 200 gr (cuero).
- Versión de Android: 13.
- Interfaz del fabricante: MIUI 14.