La mayoría de fabricantes de móviles Android tiene una gran cantidad de productos en su catálogo. Marcas como Huawei o Samsung lanzan decenas de móviles cada año. Sin embargo, otras como OnePlus se centran en unos pocos terminales y, aunque los últimos años ha aumentado el número de los mismos, hablamos de una cifra mucho menor que la de sus rivales.
Solo hubo una excepción a esta norma ya que junto con el lanzamiento del OnePlus 2 la compañía ofreció una nueva gama de productos de gama media, inaugurada por el OnePlus X, que no tuvo continuidad.
Hoy la empresa ha anunciado el primero de la que será, al menos teóricamente, su nueva línea de móviles de gama media. Nosotros hemos pasado unos días con el OnePlus Nord y os traemos unas primeras impresiones.
Los tres ejes principales del OnePlus Nord
Al contrario de lo que está haciendo la empresa en la gama alta, cuando quieres diseñar un buen móvil de gama media necesitas que su precio esté contenido y eso pasa por realizar algunos sacrificios.
Pese a eso, OnePlus tenía claro que todo lo relativo a la velocidad y a la fluidez iba a mantenerse en este modelo y es que esa es su imagen de marca y el motivo por el que muchos usuarios compran sus productos.
La fluidez no era negociable
Dicho eso, en los días en los que hemos estado probando este modelo hemos echado en falta algunas cosas propias de la gama alta como la carga inalámbrica o el doble altavoz, pero no es esto un inconveniente a la hora de recomendar este modelo ya que tenemos que tener muy claro que, aunque a veces no lo parezca, es un gama media.
Una cámara a la altura de lo esperado
El primero de los apartados en el que se ha centrado la compañía es en el fotográfico. Para llevar una buena calidad a este móvil han implementado un sistema muy similar al que usa el OnePlus 8. De hecho, la cámara principal de 48 Mpx es la misma que la del modelo ya lanzado, lo que nos da una idea de la calidad que podemos esperar tanto con buena luz como de noche.
Además, se convierte en uno de los pocos móviles por debajo de 500 € en implementar un sistema de estabilización óptica de imagen en su sensor principal. Es algo que se rumorea que hará Samsung con sus Galaxy A próximamente pero, hoy por hoy, el Nord destaca en esto.
Se han mantenido tanto el sensor macro como el gran angular, aunque este último ha reducido su resolución de 16 Mpx a 8 Mpx. Este es uno de los principales problemas que podemos tener en la gama media, un gran angular que nos ofrece toda la nitidez que nos gustaría. Se aprecia especialmente de noche.
De forma sorprendente hemos visto que se ha incluido un cuarto sensor, pero no es un telefoto sino un sensor de medición de profundidad para el modo retrato. La empresa nos ha explicado que ni en este modelo ni en el OnePlus 8 se incluye un zoom óptico porque el coste de ese elemento es elevado y muchos de sus usuarios ni siquiera lo valoran a la hora de elegir móvil.
También vemos mejoras en la parte frontal, con un doble sensor. Tenemos una cámara principal mejorada, con 32 Mpx, y un gran angular de 8 Mpx que nos ayuda mucho a la hora de hacer fotos de grupo.
Ojalá este último hubiera tenido más resolución pero es cierto que, en la parte frontal, esto no es común.
Pese a todo, detrás nos hubiéramos confirmado con un sensor convencional como el que tiene y un mejor gran angular, aunque sólo tuviéramos dos cámaras en la zona trasera.
La fluidez era obligatoria
El segundo de los grandes pilares en los que se basa este modelo es la velocidad. OnePlus es una de las marcas que mejor optimiza sus teléfonos y gracias a la interfaz Oxygen nos ofrece a la vez versatilidad y fluidez.
La elección del procesador ha sido especialmente relevante para la compañía, como algunos de sus directivos han explicado ya. En nuestras primeras pruebas hemos visto que el rendimiento era más que decente para ser un móvil de gama media y hemos podido utilizarlo para juegos y aplicaciones sin ningún tipo de lag o cuelgue.
Aquí también se agradece la cantidad de memoria que se ha implementado. Hay dos modelos, uno con 8 GB de RAM y 16 GB de almacenamiento interno y otro, que es el que nosotros hemos probado, con 12 GB de RAM y 256 GB de memoria interna.
Pese a ser un móvil de gama media, ninguna de las dos variantes viene con una ranura para poder expandir el almacenamiento con una tarjeta micro SD. El motivo de esta decisión es que los usuarios no siempre se esfuerzan por buscar una tarjeta con una alta velocidad de lectura y escritura y de no hacerlo se lastraría la experiencia con el móvil.
Aquí también hay que destacar la presencia de la tasa de refresco de 90 Hz en la pantalla, que utiliza tecnología OLED. Es raro ver un móvil en esta franja de precio que incluya esta prestación pero OnePlus tenía claro que era una de esas cosas que ayudaban a dar la impresión de velocidad que buscaban.
Un acabado de gama alta
El último de los aspectos claves del OnePlus Nord es el acabado y la calidad de materiales. Tenemos un móvil con un peso ligeramente superior al OnePlus 8, con un marco metálico construido con la aleación de magnesio y otros metales y una parte trasera y delantera de cristal protegida por Gorilla Glass 5.
La sensación que da en la mano no difiere mucho del resto de móviles de esta compañía, y la verdad es que eso se agradece puesto que algunos rivales con terminales con un precio similar a éste aún utilizan variantes del policarbonato o plástico en determinadas partes de la construcción de sus móviles.
En el apartado estético llama a la atención que la compañía haya movido su bloque de cámaras trasero a la parte izquierda en vez de dejarlo en la parte central. Hasta donde hemos podido saber, el motivo por el que se hacía esto hasta ahora era la colocación de los componentes internos y en este modelo no ha habido esa exigencia.
El OnePlus Nord es un móvil fácil de recomendar
Todas estas prestaciones han sido estudiadas y elegidas a conciencia pero no hubiera sido suficiente si el terminal fallara en otros aspectos. Lo mejor que podemos decir del OnePlus Nord es que no lo hace.
Tenemos una batería con una autonomía más que decente, sobre todo si establecemos la tasa de refresco en 60 Hz. De la interfaz no podemos decir prácticamente nada malo y el diseño, aunque es bastante convencional, nos parece muy positivo, sobre todo en la unidad con color azul.
El broche final lo pone el precio. El modelo con 12 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento interno cuesta 499 €, que es el precio que tienen rivales con menos memoria. La versión con ocho GB de RAM y 128 GB de almacenamiento interno, que nos parece mucho más atractiva, cuesta 399 €, convirtiéndose en un móvil realmente fácil de recomendar.