El mundo de la tecnología suele ser continuista ya que se deja guiar por aquellos dispositivos que tienen cierto éxito: si un móvil se vendió bien la marca repetirá en la generación siguiente mejorando lo que ya tenía, Igual ocurre con las tablets; o con los ordenadores, televisiones… En fin, resulta evidente que Xiaomi no va a bajarse del carro de la Mi Band. Para fortuna de sus usuarios ya que la última iteración supone un salto cualitativo que no se nota apenas en el precio.
Llevo una semana con la Xiaomi Mi Smart Band 4 en la muñeca derecha compaginando lecturas y grabación de ejercicio con un Apple Watch 4, que está en la muñeca izquierda. No soy un deportista que necesite medir su progresión de manera muy precisa, de ahí que el Watch 4 me vaya muy bien: guarda todos los registros automáticamente y con suficiente precisión. Salvando las lógicas distancias, la nueva Mi Band tampoco se aleja en exceso.
Con la última pulsera cuantificadora de Xiaomi puedes registrar tus movimientos, ver todas las notificaciones del teléfono con la extensión completa de texto, mide el sueño, el ritmo cardíaco, es válida como despertador, permite gestionar la reproducción de la música en el móvil… Y, encima, da la hora, todo por unos 35 euros. La relación entre las prestaciones y el precio está muy ajustada, como descubrirás a continuación.
Características de la Xiaomi Mi Smart Band 4
Xiaomi ha evolucionado su pulsera de actividad hasta niveles que rozan el de un smartwatch. Llevando ambos dispositivos a la vez, la pulsera y un reloj inteligente, no se notan excesivas diferencias más allá de la superficie de pantalla, instalación de apps o respuesta a las notificaciones desde el reloj (cuando Xiaomi cuele esta opción en la Mi Band será invencible). En el caso de que desees saber si un smartwatch se adapta a tus necesidades la Xiaomi Mi Smart Band 4 es un buen punto de partida.
Con la pantalla a color Xiaomi le otorga a la Mi Smart Band 4 un aspecto más «premium», sobre todo por sus capacidades de personalización. Esto tiene una contrapartida clara: la autonomía se ve reducida. No adelantaré acontecimientos ya que iré desgranando punto por punto cada aspecto de la pulsera; comenzando por sus especificaciones, por supuesto. Debes tener en cuenta que el modelo analizado es el Global sin NFC.
- Pantalla: a color AMOLED de 0,95 pulgadas (240 x 120 px).
- Conexiones: Bluetooth 5.0.
- Vibración: sí.
- Sensores: acelerómetro de 3 ejes, giroscopio de 3 ejes y sensor cardíaco.
- Batería: 135 mAh.
- Duración por carga: hasta 20 días.
- Funciones saludables: registro de pasos, registro de ejercicio, monitorización de sueño, ritmo cardíaco, recuento de calorías…
- Otros: personalización de la esfera, notificaciones del smartphone, enlace con asistente virtual del móvil, resistencia a la inmersión de 5 ATM…
- Ancho de la muñequera: 18 mm.
- Longitud de la correa: ajustable de 155 a 216 mm.
- Peso: 22 g.
Xiaomi no se ha matado con el diseño de la Mi Smart Band 4
Si resulta complicado desarrollar un diseño en smartphones que resulte único imagínate conseguirlo en una pulsera: es aún más difícil. Así que los desarrolladores de la Mi Smart Band 4 optaron por refinar el aspecto de las anteriores pulseras dejando más espacio para la pantalla táctil OLED a color y colocando un botón háptico de control en la parte baja. Es un pequeño círculo blanco que apenas se ve, por lo que no queda más remedio que pulsar «a ciegas». No tiene pérdida, eso sí.
Como la mayoría de pulseras de actividad, especialmente las de Xiaomi, el dispositivo consta de dos partes: la pastilla o la «smartband» en sí y una correa en la que va insertada dicha pastilla. No tiene ningún misterio: la pastilla es alargada, tiene un grosor considerable (sobre todo si se mide en la zona del escáner de pulso), posee los dos pines de carga en un extremo de la base y todo el contorno se ve bordeado por una guía para así encajar mejor en la correa asegurando su posición.
Desenganchar y enganchar ambas partes cuesta un poco, pero también se dificulta la pérdida de la banda
El material es plástico a excepción de la pantalla, que está protegida por cristal templado 2,5D (no es Cornig Gorilla Glass) con un tratamiento anti huellas dactilares. La pantalla es táctil, posee el botón háptico de retroceder en la parte inferior y, si te preocupa que la pantalla se arañe, he de decirte que lo mejor es que le pongas un protector: Mi Xiaomi Smart Band 4 ya está arañada y eso que no le he dado ningún golpe extraño.
Xiaomi ha hecho estanca la pulsera para que también registre los deportes acuáticos. Es resistente al agua hasta 5 ATM, por lo que podrás llevártela a la piscina o bañarte con ella sin problemas. En el agua salada no es recomendable introducir dispositivos electrónicos, al menos si el fabricante no lo especifica claramente: lo mejor es que te la quites antes de ir a la playa.
Uno de los aspectos que más me gustan del diseño de este dispositivo es que no rompe por completo con la generación anterior permitiendo el uso de las pulseras de la Xiaomi Mi Band 3. ¿Que quieres renovar tu wearable? Las correas del modelo anterior le sirven al nuevo. Eso sí, en el paquete sigue viniendo una correa de serie de poliuretano termoplástico; con el cierre algo engorroso habitual: cruzar un extremo de la correa por el pasador para dejarla enganchada con un remache. Si tienes suerte tendrás un agujero de la correa que mantendrá la pastilla con su holgura correcta. Si no la pulsera te quedará muy apretada o demasiado suelta.
La pantalla a color es muy vistosa sin que en sí ofrezca más funcionalidades
Una de las señas de identidad de la Xiaomi Mi Band 4 es su pantalla a color OLED de 0,95 pulgadas con resolución de 120×240 píxeles. Es muy llamativa a la vista, también posee suficiente definición y se aprecia muy detallada. Además, se ha mejorado el brillo en exteriores: puede apreciarse el contenido de la pantalla incluso bajo la luz directa del sol. Eso sí, el brillo hay que ajustarlo manualmente a través de los menús de la pulsera (es algo engorroso para estar haciéndolo constantemente).
Para encender la pantalla basta con girar la muñeca: esta se activa con algo de retraso, pero sin que sea exagerado (ha de configurarse la activación con giro, pero viene por defecto). También el botón háptico, el del pequeño círculo blanco, ejerce función de encendido. Dicho botón, el de retroceso, funciona igual que el de tu móvil: una pulsación y se retrocede al anterior menú. Y si cubres la pantalla con la mano esta se apaga.
La pantalla de la Xiaomi Mi Smart Band 4 se ve muy bien en todas las condiciones
Hablemos de los menús. Dado que la pantalla es táctil, y no depende del botón de retroceso/activación, resulta posible moverse por todas las opciones de la Xiaomi Mi Smart Band 4 a base de deslizar el dedo por la superficie frontal; siempre sin pulsar sin querer el botón de retroceso en los deslizados verticales. La pantalla se enciende siempre en el «Home» del reloj, incluso aunque esté reproduciéndose música en el móvil (esto me molesta especialmente por más que se pueda forzar el reproductor abriendo la app). Para el resto de opciones:
- Deslizado de la pantalla a la izquierda: se abre el QR de AliPay para los pagos móviles. Esto no se puede eliminar, es un gran inconveniente.
- Deslizado de la pantalla a la derecha: se abre el control de reproducción musical. No permanece fijo en pantalla: cuando se apaga y vuelve a encenderse la pantalla aparece de nuevo la Home.
- Deslizado hacia arriba o hacia abajo: se salta al carrusel de aplicaciones. El orden y su aparición puede personalizarse desde la aplicación Xiaomi Mi Fit.
Con el desplazamiento vertical irán apareciendo todas las aplicaciones directas, como el entrenamiento, el tiempo, las notificaciones o el ritmo cardíaco. En el «Más» se sitúan otras opciones fijas, como el temporizador, el cronómetro el control de la música o los ajustes. Y dentro de dichos ajustes puede activarse el modo No molestar, el restablecimiento de la pulsera o, importante, también se encuentra el control de brillo. Por defecto lo he dejado al máximo: se ve bien en exteriores y tampoco deslumbra en exceso en interiores. De noche un poco sí, pero es soportable; existiendo la posibilidad de ajustar el brillo nocturno automáticamente desde la app Mi Fit.
Lo mejor de la pantalla a color son las personalizaciones. Xiaomi incluye un montón de ellas en Mi Fit, son las denominadas «Esferas«. No hay demasiadas, pero sí son de muy buena calidad: quedan genial en la pulsera. Esto es algo que me ha sorprendido mucho ya que resulta posible tener una representación de la hora, y distintas variables de ejercicio, con detalle y hasta belleza. Además, habrá una inmensa cantidad de estas esferas a través de apps distintas a Mi Fit.
Bien para registrar el movimiento diario, poco precisa para medir el ejercicio
No es ninguna sorpresa: ninguna pulsera de actividad está pensada, ni desarrollada, para convertirse en una sustituta de relojes especializados en el registro del ejercicio. Esto implica que la Xiaomi Mi Smart Band 4 funciona genial para quienes busquen fomentar su actividad midiéndola en pos de moverse un poco más cada día. Si buscas un dispositivo que mida tu progresión deportiva de cara a mejorar la forma para una prueba de rendimiento esta pulsera no es para ti.
El recuento de pasos lo considero correcto, también el registro de calorías y el de distancia recorrida. Estos datos mejoran en precisión conforme más información tenga Mi Fit: hay que registrar las variaciones de peso, altura y edad para que sean más acertados. Eso sí, hay que tener en cuenta en cuenta que en los entrenamientos baja mucho de fiabilidad.
La Xiaomi Mi Smart Band 4 no está desarrollada para ser un reloj deportivo: le falta mucha precisión
El ritmo cardíaco se mide de manera correcta en reposo y con bajo movimiento. Conforme suben las pulsaciones debido al ejercicio la lectura tiende a fallar; llegando a arrojar errores de más de 20 pulsaciones por minuto. También la distancia recorrida en entrenamientos como los de cinta flojea: hasta un kilómetro de error cada 4 kilómetros (medido con la máquina de fitness y el Apple Watch 4). Conforme Mi Fit va recabando más datos la precisión mejora, pero siempre se quedará muy por detrás de la que se obtiene con un dispositivo desarrollado específicamente para el ejercicio.
Apenas he probado la Xiaomi Mi Smart Band 4 en natación ya que no es que yo sea buen nadador. Las veces que me he metido en la piscina, y he hecho algún largo, no he encontrado errores reseñables: precisión decente que se acerca al de otros dispositivos de muñeca no específicos para natación.
Dado que lo mejor de la pulsera es el conteo del movimiento constante, la Xiaomi Mi Smart Band 4 no necesita activación alguna para registrar los pasos diarios, la distancia recorrida y ciertos parámetros de salud cardíaca. Nunca hay que confundir este tipo de pulseras con un dispositivo indicado para mejorar la salud ya que sus lecturas se quedan lejos en términos de precisión y de cantidad de valores. Aun así, la Xiaomi Mi Smart Band 4 puede ser un pequeño impulso para que te levantes algo más de la silla. Especialmente si tienes amigos con una Mi Band y los añades a la aplicación.
Registro de sueño automático con una gran cantidad de datos a tu alcance
No es que la pulsera de este análisis sea pequeña, pero tampoco resulta molesta. Ni llevándola mientras se trabaja ni tampoco durante el ejercicio; ocurriendo igual a la hora de dormir: acostarse con la Xiaomi Mi Smart Band 4 es un gesto del que no te das ni cuenta. Siempre es recomendable poner la pulsera en No molestar (dentro del menú «Más»), pero no hay que hacer nada para prepararla de cara a registrar el sueño.
Igual que ocurre con el movimiento, esta smartband registra automáticamente cuándo nos vamos a dormir y cuándo nos levantamos; completando todos los parámetros nocturnos con las fases de sueño profundo, de sueño ligero, cuándo nos dormimos, las veces que nos hemos despertado y, por supuesto, cómo funcionó nuestro corazón a lo largo de la noche. Al día siguiente tendremos los resultados en forma de gráficas para así poner en perspectiva las horas que pasamos recostados en la cama.
¿Duermes bien por las noches? La pulsera puede sacarte de dudas
La Xiaomi Mi Smart Band 4 ofrece todo tipo de gráficas para entender los parámetros de sueño; y dispone de comparativas con otros usuarios que nos indicarán si estamos en la media o debemos mejorar con respecto a los demás. También tendremos un análisis a lo largo del tiempo que reflejará nuestras carencias de descanso y también las bondades. Esto resulta sumamente práctico ya que a menudo no caemos en los malos hábitos hasta que algo nos los muestra de manera clara.
La Xiaomi Mi Smart Band 4 es una gran extensión del móvil
Cuando me preguntan por qué valoro los relojes y bandas inteligentes siempre respondo lo mismo: me permiten comprobar cómo anda el móvil sin tener que utilizar físicamente el teléfono. Dado que siempre estoy pendiente de Telegram y del correo electrónico me encanta saber al instante qué ocurre. Que una pulsera de 35 euros me traslade los mensajes completos a la muñeca me parece espléndido.
Es cierto que la Mi Smart Band 4 no permite responder los mensajes, solo leerlos, pero esto ya supone una gran ventaja: de esta forma discrimino automáticamente qué merece mi atención y qué no. ¿Que hay que responder algo urgente? Agarro el móvil. Si no lo dejo pasar.
Mi Fit, la aplicación que sincroniza la Xiaomi Mi Smart Band 4 con el teléfono, sirve de puente para las notificaciones, también habilita la personalización de las esferas y, por supuesto, la sincronización de datos. Bajo mi punto de vista es bastante completa ya que centraliza la experiencia en un entorno sencillo de utilizar, visual y que saca sumo partido a los dispositivos conectados. Basta hacerse una cuenta de Xiaomi, añadir amigos con los que competir y, gracias a pulseras como la última Mi Band, tendrás un extra de aliciente para hacer ejercicio.
Muy buena batería para ser una pulsera inteligente, pero menor autonomía que otras Mi Band
Como dije dentro del apartado de la pantalla, la Xiaomi Mi Smart Band 4 consume más energía debido a su pantalla OLED a color. Esto hace que resulte más habitual la carga de la pulsera, sobre todo si ya has tenido otras pulseras del mismo fabricante. Eso sí, Xiaomi mantiene una autonomía récord en lo que a «wearables» se refiere: llevo una semana con ella y aún tengo algo menos de la mitad de batería.
Extrapolemos consumos. Activando el análisis cardíaco cada minuto, y con el brillo de la pantalla al máximo, la Mi Smart Band 4 consume algo menos del 10 % de batería diario. A este gasto se le suma el registro del ejercicio ya que casi dada día he hecho algo de entrenamiento (no demasiado, que aprieta el calor). Reduciendo brillo y registro cardíaco puede irse a un 5-7 % diario; lo que habilita la vida con una carga para los 20 días de uso que asegura la marca. Habrá que ver cómo mantiene los registros a lo largo del tiempo ya que, como sabes, las baterías se van degradando con cada carga.
La carga de la pulsera es bastante lenta para ser tan pequeña
Quizá no tenga tanta autonomía como anteriores versiones, pero tampoco lo veo importante: se carga una vez y te aseguras un mínimo de 10 días sin preocupaciones, pocos dispositivos dan esta tranquilidad. Eso sí, la carga es algo lenta: conectada al USB del ordenador me ha tardado más de una hora y media.
Conclusiones: quizá no sea la mejor, pero en conjunto aspira a serlo
Tiene defectos, también muchas bondades; es algo grande para ser una pulsera de actividad sin que resulte incómoda llevarla; su pantalla es una delicia, lástima que consuma algo más de la cuenta; y el precio… Venderse en España oficialmente por 35 euros hace que la Xiaomi Mi Smart Band 4 sea una de esas compras de prueba que al final termina satisfaciendo.
A mí me está gustando especialmente, y eso que en la otra muñeca llevo un Apple Watch 4. Ofrece casi idéntica lectura de notificaciones, también registra el movimiento, no necesita de ninguna aplicación para registrar el sueño, ofrece control de la reproducción y la pantalla es personalizable. Incluso la lectura cardíaca es aceptable en gran parte de las situaciones, todo un logro para un dispositivo electrónico de 35 euros. No hay duda: puestas las prestaciones a la altura del precio, la Xiaomi Mi Smart Band 4 es un accesorio casi imbatible.
Si ya tienes una Mi Band 3 quizá no te rente el cambio ya que no hay exageradas diferencias, todo lo contrario si vienes de una Xiaomi Mi Band 2: apreciarás el salto evolutivo. Y si estás buscando un smartwatch y no quieres arriesgarte con una inversión excesiva también te la recomiendo: con una Xiaomi Mi Smart Band 4 sabrás si las pulseras/relojes inteligentes son para ti. A fin de cuentas ofrece lo que posee la mayoría: notificaciones, registro de actividad, registro de sueño, alarmas, ritmo cardíaco… Y sin que el diseño del dispositivo eche para atrás: el aspecto mantiene el tipo.
¿Estás valorando la compra? Espero haberte aclarado las dudas. Y en el caso de que te hayas decidido puedes adquirirla en España a través de los siguientes comercios, incluida la tienda de Xiaomi.