Amazon tiene una política de dispositivos físicos bastante peculiar y homogénea. En todos sus productos tiene muchos modelos, que van desde los más básicos a otros más potentes y caros. Pero todos comienzan con un terminal barato, muy barato.

En el caso de las tablets Kindle Fire ese honor recae sobre la Kindle Fire 7, una tablet que hemos estado usando durante unos días y de la que os damos nuestra opinión.

Eso sí, no será un análisis al uso porque partiremos de la base de que quién quiera comprarse esta tablet lo hace porque el precio es rompedor. Y veremos si eso compensa.

Características de la Kindle Fire 7 2019

• Procesador: Quad Core a 1.3 GHz).
• Memoria RAM: 1 GB.
• Almacenamiento.
  • Interno: 16 GB.
  • MicroSD: Sí.
• Pantalla.
  • Tamaño: 7  pulgadas.
  • Resolución: 1014 x 600 px.
  • Ratio de pantalla 16:9.
• Cámara trasera.
  • Resolución: 2 Mpx.
• Cámara delantera.
  • Resolución: 2 Mpx.
• Conectividad:  WiFi Dual Band, bluetooth 4…
• Puertos:
  • Jack 3.5 mm.
  • Conector MicroUSB.
• Dimensiones: 192 x 115 x 9,6 mm
• Peso: 286 g.
• Sistema:
  • Versión de Android: Android 9 Pie.
  • Capa del fabricante: Fire OS

Nos olvidamos del ecosistema de Google

Lo primero que tenemos que tener en cuenta, y la propia Amazon lo indica en la página de compra de este producto, es que no hay apps de Google aquí. Nada de aplicaciones de Gmail, Google Maps o Google Drive.

Esto es una de las cosas que más puede extrañar, dado que la mayoría de usuarios están tan acostumbrado a usar estas aplicaciones que no suelen imaginar que no van a tenerlas.

Podría ser un problema pero la verdad es que, dado el uso de esta tablet, no hemos visto tampoco que sea un drama. Podemos acceder a los servicios mediante Silk, el navegador integrado en el sistema, y usar desde ahí servicios como Youtube.

Algunas aplicaciones se pueden instalar de forma manual pero el enfoque de esta tablet es el de un usuario básico, así que no entraremos en ello.

Abrazando el ecosistema de Amazon

Pero no poder usar apps de Google no implica que no tengamos acceso a un ecosistema. En este caso es el de Amazon el que aparece a lo largo de toda la interfaz.

Aunque es muy posible usar la tablet sin pagar la membresía premiun de la plataforma, el hacerlo nos da ventajas como tener integrado, por defecto, servicios como Amazon Prime Vídeo o Amazon Music (la versión sencilla y gratuita).

Junto a ello tenemos aplicaciones como Kindle o Alexa, apps que normalmente se usan en otros dispositivos pero que aquí como es lógico vienen de serie.

También se integra la compra en la tienda, algo que Amazon potencia, aunque la escasa potencia de la tablet hace que la navegación en la misma sea algo lenta.

Consumiendo contenido, no creando

Una de las novedades de esta versión con respecto a modelos anteriores (y no hay muchos cambios) es que la memoria interna es de 16 GB, ya no hay opción de 8 GB, y se agradece. Tendremos algo más de 9 GB libres para descargar cosas, suficiente para lo que vamos a querer llevar normalmente. Juegos, alguna serie o película, documentos, al no tener apps como WhatsApp que consuman almacenamiento con la caché, no suele haber mucho problema. Pese a eso, si es necesario, podemos poner una microSD.

Como es de esperar, con el hardware que tiene la Fire 7, el rendimiento no es espectacular. Pese a eso nos hemos sorprendido al poder jugar a juegos Asphalt 8 (aunque es una versión diseñada para esta tablet) o a Candy Crush.

Sí que se nota que la velocidad de apertura de apps no es la más elevada y que en ocasiones el sistema parece renquear pero entra dentro de lo esperado.

Una pantalla de 7 pulgadas se hace algo pequeña para ver vídeos pero es cómoda para llevarla de viaje o en transporte público. Lo que sí que echamos en falta es más resolución dado que en este caso no llegamos siquiera a HD y los artefactos en la imagen se aprecian a las primeras de cambio.

Las cámaras son testimoniales, con 2 Mpx cada una y una calidad que es mejorable, pero si las cámaras en una tablet no se usan mucho en una como esta ese uso rondará la nada más absoluta.

Este modelo dispone sólo de un altavoz, que en ocasiones puede resultar algo escaso. Además, al máximo de volumen escuchamos distorsiones por lo que si es necesario es buena idea optar por unos cascos con jack de audio, aprovechando que la Kindle Fire 7 tiene el orificio.

Una interfaz muy diferente

La interfaz de FireOS es algo extraña si estamos acostumbrados a usar Android. Hay una zona de aplicaciones, pero también varios escritorios con sus secciones y elementos diferenciados. Hay uno para las apps, otro para el vídeo, la música…

La propia interfaz se ha diseñado para incentivar el consumo y se nota. No es que sea un problema pero hay que tener cuidado de no comprar por impulso, o por error.

La batería es justa

Una de las pegas reales de la tablet es que su batería es algo escasa. En teoría tenemos para 7 horas de vídeo pero en un uso normal esto baja a las 4 horas más o menos.

El cargador se incluye, con un cable USB, y tardará unas 4 horas en cargar por completo la tablet, algo que hace que queramos dejarla enchufada por las noches si es que la usamos a diario.

Conclusión

¿Merece la pena comprar esta tablet? La primera cuestión que tenemos que plantearnos es si podemos estirar el presupuesto. Si no es así, por 70 euros podemos ver vídeo, usar apps para navegar y juegos y poco más.

La calidad no es la mejor pero el precio no puede ser más bajo. Es buena idea para niños o para usos muy concretos.

¿Es suficiente para un usuario medio? Quizás se quede corta, pero si lo queremos como dispositivo de apoyo, por el precio y la resistencia que inspira es una opción a considerar.