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La familia Samsung Galaxy A se renueva para afrontar el 2017 dándolo todo y, tras pasar unas semanas con el nuevo Galaxy A5 2017, tiene todas las papeletas para ser un éxito.

Cada año el mundo de la telefonía móvil espera con ansia las novedades de gigantes como Samsung, Apple, LG o Huawei, entre otros. Sus buques insignia marcan el camino y son los smartphones que más portadas acaparan. No es para menos, representan la máxima apuesta de cada una de esas marcas y en ellos está plasmada toda su tecnología.

En el caso de Samsung, todo el mundo está a la espera del Galaxy S8 pero a principios de año, durante el CES 2017 celebrado en Las Vegas, los surcoreanos anunciaron tres nuevos Galaxy – A3,A5 y A7 -, tres nuevas ediciones bajo el mismo nombre pero con el apellido 2017. Tres »gama media» que tienen mucho que decir, empezando por quitarse esa misma etiqueta de gama media. Aquí va el análisis del Samsung Galaxy A5 2017, el modelo intermedio en tamaño.

Análisis en vídeo del Samsung Galaxy A5 2017

Como siempre y para poner en perspectiva qué móvil estamos analizando, aquí van las características técnicas del Samsung Galaxy A5 2017:

• Pantalla de 5,2 pulgadas SuperAMOLED FullHD (1920×1080 píxeles)
• Procesador Samsung Exynos 7880 Octacore a 1.9GHz
• 3GB de memoria RAM LPDDR4
• 32GB de almacenamiento interno + ranura microSD (máximo de 256GB adicionales)
• Cámara frontal y trasera con sensor de 16M P f/1.9
• Batería 3.000 mAh con tecnología de carga rápida Samsung
• Android 6.0 personalizado con Touchwiz (tendrá Android 7 Nougat)
• Dimensiones: 146,1 x 71,4 x 7,9 mm
• 157 gramos de peso
• Conectividad
  • WiFi 802.11 a/b/g/n/ac
  • NFC
  • Bluetooth 4.2
  • Radio FM
  • ANT+
  • USB Tipo C (2.0)

Si el Galaxy A5 2016 ya era un terminal equilibrado, el A5 2017 lo es todavía más. En líneas generales monta un hardware muy competitivo para el mercado al que se enfrenta, tanto que, con la experiencia que ofrece en el día a día, se coloca en esa zona fantasma que separa lo que llamamos gama media con la alta, más cerca de la segunda que de la primera.

Un diseño muy agradable y bien conocido

A simple vista cualquiera podría confundir este Samsung Galaxy A5 2017 con sus hermanos mayores S6 y S7. Tanto las líneas como los materiales utilizados en este modelo le dan un aspecto y una sensación en mano de un móvil de mucho nivel.

Tanto el frontal como la trasera están cubiertos por cristal que en sus bordes se curva progresivamente para conformar una unión perfecta con los marcos de aluminio que rodean todo el Galaxy A5 2017. Esa curvatura, que es más pronunciada en la parte trasera, le otorgan una muy buena comodidad en la mano. De hecho, pese a ser cristal no resbala tanto como se podría pensar, el agarre es muy bueno.

Nuestra unidad es la de color azul grisáceo y las huellas no se notan tanto, pero el A5 2017 también está disponible en dorado, rosa y un negro que, personalmente, me parece precioso.

En el marco inferior encontramos el puerto de carga y transferencia de datos que este año sí es USB Tipo C – gran noticia, para que vaya estandarizándose – y el puerto jack de 3.5 milímetros. Tanto el botón de encendido como los de volumen tiene buen tacto y su posición es correcta a ambos lados de la pantalla.

Por último encontramos las bandejas para la microSIM y la tarjeta de memoria microSD separadas, la primera bajo los botones de volumen y la segunda en el marco superior.

En el frontal encontramos el ya clásico botón físico central de Samsung, que también sirve como lector de huellas – muy rápido y en el que no es necesario pulsar, solo posar el dedo – y ambos lados los dos botones capacitivos de atrás y multitarea. Sobre la pantalla el sensor de luz, el auricular y la cámara frontal de 16MP con apertura f/1.9 de la que hablaré en el apartado correspondiente.

La trasera es bastante sencilla, todo cristal salvo la cámara – 16MP f/1.9 y el flash LED. Un momento, ¿dónde está el altavoz? Samsung ha optado en el Galaxy A5 2017 por una disposición un tanto inusual para el altavoz, no está ni en la trasera ni en el marco inferior, sino que la rejilla está colocada en el marco derecho, justo encima del botón de encendido y lo cierto que tiene bastante sentido en algunas situaciones.

Por norma general los altavoces en la parte trasera quedan ‘taponados’ al mantener el smartphone sobre una superficie, y los que están en el marco inferior pueden ser obstruidos con frecuencia por la palma de la mano al jugar o ver vídeos en horizontal. Así que, a falta de tener altavoces frontales, la posición lateral es bastante acertada. Eso sí, su sonido no es maravilla, es correcto y cumple, pero no se le puede pedir más.

En líneas generales el Samsung Galaxy A5 2017 es muy cómodo en el día a día, su tamaño es contenido con las 5.2 pulgadas de pantalla, aunque sí es cierto que no es el más delgado de los últimos tiempo, pero esos marcos curvados se agradecen y las sensaciones que desprende son de calidad, de un móvil robusto pero al mismo tiempo refinado.

Pantalla SuperAMOLED aderezada por el software

Poco se puede decir a estas alturas de la vistosidad de las pantallas SuperAMOLED de Samsung. En estos nuevos Galaxy A la encontramos en 4,7 pulgadas en el A3, 5,7 pulgadas en el A7 y el tamaño medio de 5,2 pulgadas en este Samsung Galaxy A5 2017. Estamos ante un panel con resolución 1080p que en esta diagonal nos da una densidad de pantalla de 424 píxeles por pulgada y luce genial.

Colores muy vivos, negros infinitos característicos de esta tecnología de pantalla y unos niveles de brillo muy buenos, tanto a máximo nivel como el mínimo. En modo automático y en exteriores me ha sorprendido su luminosidad y visibilidad, mientras que el brillo mínimo también es realmente bajo, algo que se agradece cuando utilizamos el móvil en la cama y/o en entornos oscuros. Para esos momentos también incluye, por cierto, un modo de filtro azul, que torna la temperatura de la pantalla más cálida (se puede activar manual o programar para activar cada día a X hora).

¿El punto negativo de esta pantalla? Que esos colores vibrantes que muestra no son una reproducción fiel de la realidad, por suerte tenemos la opción de cambiar entre distintos modos de pantalla, siendo el «básico» el que muestra un perfil de color más plano y no con tonos tan saturados.

Mención merece la función Always On Display que ya hemos visto en otros teléfonos Samsung y que también está en el Galaxy A5 2017 para ayudar a exprimir el panel SuperAMOLED. En esencia la pantalla del teléfono nunca se apaga por completo, esta función mantiene únicamente unos pocos píxeles encendidos mostrando la hora, la fecha y las notificaciones que van llegando, mientras que el resto de la pantalla permanece completamente apagada.

Podemos personalizar los datos que aparecerán, como por ejemplo añadir un calendario completo o diseños variados. Es importante mencionar que si no estás acostumbrado, ver parte de la pantalla encendida continuamente induce a pensar que se va a comer la batería, pero no es así. El sistema está muy bien optimizado y el impacto de Always On Display en el consumo es ínfimo. Además la información se va moviendo por la pantalla para evitar quemaduras en el panel.

Al final te acostumbras y ayuda a comprobar en un vistazo la hora o las notificaciones sin tener que encender la pantalla. Esto también suple la falta de LED de notificaciones.

Mención aparte merece la incorporación de la resistencia al agua en todos los nuevos integrantes de la familia Galaxy A 2017. Incluyen certificación IP68 así que ya sabemos que podemos estar tranquilos si nos cae líquido o lo usamos bajo la lluvia, pero siempre pensando en lo que significa.

Rendimiento y software

El corazón del Galaxy A5 2017 es un procesador Exynos 7880, uno de los chips fabricados por la propia Samsung y que en esta versión, de 14nm, se mueve a 1.9GHz. Además, le acompañan 3GB de memoria RAM LPDD4. Sobre el papel, el nuevo SoC del A5 destaca por su equilibrio entre rendimiento y eficiencia.

Personalmente no soy fan de los benchmarks y, como solemos decir, al final esos resultado son sólo números de la potencia bruta de los dispositivos que, en teoría, deberían traducirse en un mejor o peor rendimiento real, pero no sería la primera vez que un móvil top en ese tipo de tests, luego no ofrece una experiencia acorde a lo que decían esos números.

En cualquier caso, el rendimiento del Samsung Galaxy A5 2017 es simplemente excelente en todo tipo de tareas. Estas últimas semanas se ha convertido en mi smartphone principal y ha rendido a la altura en todo momento. El uso ha sido el que puede dar cualquier usuario a un teléfono capaz de todo hoy en día: mucha navegación web, redes sociales, edición de imágenes, múltiples vías de comunicación, juegos casuales y también exigentes, trabajo con documentos…

Por norma general el Galaxy A5 ha respondido siempre, sin bloqueos ni lag, las transiciones son fluidas, el acceso a la multitarea (que por cierto tiene modo multiventana para usar dos aplicaciones al mismo tiempo) y las animaciones siempre son fluidas y, en general, la experiencia con él ha sido muy satisfactoria.

Para los que os estáis preguntando qué tal se comporta en juegos o aplicaciones que demanden más capacidad gráfica, cumple a la perfección, ya sea con títulos casuales o con juegos más exigentes como puede ser Asphalt. Sin problemas en ese sentido.

Como ya os podéis imaginar, Samsung también ha aplicado en estos modelos su capa de personalización TouchWiz, pero más allá del apartado estético no resulta pesada ni repercute en el rendimiento. Como siempre, eso significa que de forma predeterminada encontramos algunas funciones y aplicaciones extra que vienen de fábrica.

TouchWiz y sus extras

Por ejemplo, tenemos toda la suite de aplicaciones ofimáticas de Microsoft (Word, Excel, PowerPoint, OneNote, Skype, OneDrive…), Flipboard como muro de noticias en el primer escritorio, la propia tienda de Samsung Apps, S Voice para el control por voz, S Health para monitorizar la actividad diaria, almacenamiento en la nube Samsung Cloud espacio gratis y algunas más, incluyendo también la tienda de Temas de Samsung para personalizar toda la interfaz del teléfono en un toque, desde los iconos al fondo de pantalla.

La mano de Samsung en el sistema no se queda ahí, ya hemos hablado antes de Always on Display o los modos de pantalla, pero buceando por los ajustes encontramos funciones como Smart Stay para que la pantalla se mantenga encendida mientras la miramos, opciones de ajustar la interfaz al uso a una mano, diferentes gestos para hacer acciones como capturas la pantalla o silenciar llamadas, así como el interesante Game Tools que seguro agradecerán los más jugones.

Con esa función activada, cada vez que comencemos a jugar podremos bloquear los botones del móvil para que, en caso de pulsarlos, no ocurra nada, también capturar la partida o bloquear cualquier tipo de notificación mientras estemos jugando.

A nivel de seguridad y privacidad destacaría la «Carpeta segura«, un espacio al que solo podremos acceder pasando la prueba de seguridad (pin, patrón, huella…) y en la que podemos ir metiendo todo el contenido privado que no queremos que nadie pueda ver, ya sean fotografías o aplicaciones concretas.

Seguridad y lector de huellas en el Galaxy A5 2017

Hablando de huellas: el lector frontal en el Samsung Galaxy A5 2017 funciona como se puede esperar de un sensor de este tipo en pleno 2017. Es rápido, preciso y no es necesario pulsar el botón físicamente para activarlo, sino que con solo posar el dedo sobre él, se desbloqueará. Como siempre, podemos usarlo para desbloquear el móvil rápidamente, pero también como método de autentificación ante pagos móviles, ya sea con la aplicación de tu banco gracias al NFC integrado con el propio servicio Samsung Pay.

Dicho esto y como podéis imaginar por todo lo escrito, el A5 2017 ofrece una gran experiencia de uso en el día a día, simplemente funciona y lo hace bien. Eso sí, aquí también se lleva un gran punto negativo: funciona bajo Android 6.0.1.

Es una pena que saliendo al mercado en febrero de 2017 no llegue directamente con Android 7 Nougat. Es obvio que tiene la actualización más que confirmada por parte de la compañía, y en parte podemos entender que quieran dar preferencia a la actualización del S7 y compañía, pero lo dicho, es una pena que haya que esperar hasta que le llegue el turrón.

Cámara del Samsung Galaxy A5 2017: luces y sombras

Pasamos a un apartado clave en cualquier smartphone hoy en día, la cámara. Visto el nivel que han alcanzado las cámaras de los móviles, es normal que muchos usuarios hayan decidido dejar de lado su cámara compacta tradicional. El smartphone ofrece calidad e inmediatez, en cualquier parte. Samsung sabe que una buena cámara en los modelos de gama de entrada y zona media de precio es clave.

Al fin y al cabo se venderán millones de estos Galaxy A en todo el mundo (ya van más de 50 millones de las generaciones anteriores), así que se agradece una buena cámara. Es este modelo la cámara trasera monta un sensor de 16MP con apertura f/1.9 que apunta a ser similar a la del Galaxy S6, pero no igual; no incluye ni estabilizador de imagen integrado, ni el enfoque avanzado.

Con buenas condiciones de luz, la cámara ofrece muy buenos resultados, el nivel de detalle es alto, el procesado es correcto y para nada agresivo y el nivel de ruido es mínimo. Eso sí, falla cuando estamos ante escenas con grandes cambios de iluminación entre zonas, por ejemplo, sacando detalle de los cielos.

En modo automático dichas zonas aparecen prácticamente quemadas en muchas ocasiones, pero se soluciona activando el modo HDR. Ese es otro inconveniente, no dispone de modo HDR automático, así que nos toca hacerlo manualmente cada vez. En baja luz tampoco tiene un mal rendimiento, aunque el resultado varía de una situación a otra.

Mientras que en muchas escenas de noche el sensor aprovecha la apertura f/1.9 para captar gran cantidad de luz, manteniendo un procesado muy correcto con el ruido a raya, en otras ocasiones el procesado es más agresivo y se pierde un poco de detalle y definición. Esto siempre hablando del modo automático, claro, tocando los ajustes en manual podemos conseguir resultados muy buenos incluso en baja luz.

Cámara frontal sin autoenfoque

Sobre el papel la cámara delantera tiene muy buena pinta, monta otro sensor de 16MP con misma apertura f/ 1.9, pero al empezar a usarla me di cuenta de un detalle, en muchísimas situaciones no enfocaba… hasta que entendí que, efectivamente, la cámara frontal del Samsung Galaxy A5 2017 no tiene autofocus y es una auténtica pena.

A la hora de hacerse un selfie hay que prestar atención a la distancia a la que está el móvil. En planos cerrados y cercanos la calidad es muy buena, con un gran detalle, pero la cosa cambia mucho cuando alejamos un poco más el brazo: pierde toda esa definición y prácticamente siempre acabaremos con una foto ligeramente desenfocada.

A nivel de vídeo también encontramos la limitación máxima de resolución a 1080p, cuando ya es norma general encontrar grabación 4K a este nivel de precios. La calidad en FullHD es correcta, con buen nivel detalle y colores naturales, aunque no dispone de sensor de estabilización óptica.

La experiencia con la aplicación de cámara es rápida, incluye acceso rápido entre cámaras con un gesto, filtros en directo con posibilidad descargar más y los clásicos modos para hacer panorámicas, modo noche, cámara rápida, modo dedicado para hacer fotos de comida que ajusta los colores, modo HDR y un modo Pro que nos gustaría que fuese más completo, ya que sólo incluye ajuste de ISO, balance de blancos, nivel de exposición y medición de enfoque. Ni ajuste de enfoque, ni tiempo de exposición, ni disparos RAW.

Batería: un gran punto positivo para el Galaxy A5 2017

Encantado, lo mejor de la batería del Samsung Galaxy A5 2017 es que directamente no te tienes que preocupar por ella. Con 3.000 mAh de capacidad ofrece autonomía más que de sobra para aguantar un día completo y parte del siguiente con un uso bastante frecuente, o un par de días perfectamente sin pasar por el cargador si nuestro uso es más variado.

A no ser que se esté completamente enganchado al móvil, es bastante duro acabar una carga de batería en una única jornada. Aquí tiene un gran papel el procesador Exynos y la gestión de los procesos que hace un muy buen trabajo manteniendo a raya los consumos y avisando al usuario en caso de que alguna aplicación se esté pasando de lista. Sinceramente, muy bien la batería de este nuevo A5.

Además incluye tecnología de carga rápida y un par de modos de energía. En el modo medio limita la velocidad del procesador, se puede ajustar el uso de redes y limitar el brillo máximo, mientras que en el modo extremo se limita todo a unas pocas aplicaciones básicas y la interfaz pasa a negro para exprimir las bondades del AMOLED.

Conclusión y opinión del Samsung Galaxy A5 2017

Este tipo de smartphones son los que hacen crecer a una marca en el mercado. Buen diseño, buenos materiales de construcción y la construcción en sí, características equilibradas, muy buena autonomía, rendimiento sin peros, opciones de conectividad amplias (¡incluso radio FM!) y una cámara a la altura, salvo el inconveniente del autofocus de la frontal.

El Samsung Galaxy A5 2017 me parece un muy buen teléfono, pese a que no llegue con la última versión de Android y tengamos que esperar a la actualización, que la tendrá. ¿La parte negativa? Sin duda su precio de salida.

El precio oficial del A5 2017 son 429€, una cifra demasiado inflada, sobre todo si tenemos en cuenta que por que el buque insignia de Samsung, el Galaxy S7, ya se encuentra fácil por menos de 500€ y alternativas como OnePlus 3T por 439€.

La buena noticia es que todos sabemos que el precio de este Samsung Galaxy A5 2017 va a bajar rápidamente y pronto lo veremos por 300€ o menos, entonces será una opción muy a tener en cuenta vistos sus resultados y, sobre todo, de cara a adquirirlo con operadoras.