La batería de un smartphone es uno de los mayores puntos flacos que nos podemos encontrar en la actualidad. No solo tenemos cada día componentes que consumen mayores recursos, sino que a causa de la experiencia de usuario que otorgan, acabamos usando los smartphones cada vez más.
No obstante, a pesar de nuestras exigencias, la batería es el único componente que no progresa a la misma escala en nuestro smartphone, y a pesar de que los fabricantes traten de reducir los consumos y aumentar la capacidad, sigue sin parecernos suficiente.
La carga rápida, el nuevo aliado de moda
Tenemos que hacernos a la idea, las baterías aún están muy lejos dar un salto evolutivo que nos permita pasar días alejados del enchufe. Los fabricantes de teléfonos y periféricos son conscientes de nuestras exigencias, y por ello tratan de responderlas con productos como los powerbanks.
En las últimas generaciones de smartphones estamos observando una tendencia común, y es que los mismos fabricantes están incluyendo sistemas de carga rápida en sus móviles. Mediante este sistema, los cargadores son capaces de suministrar una gran cantidad de energía en menos tiempo, permitiéndonos cargar aproximadamente la mitad de la batería en apenas 30-45 minutos en el enchufe.
¿Perjudica la carga rápida a nuestra batería?
Con la popularización de estos sistemas de carga, son muchas las personas que tienen dudas acerca de la fiabilidad de estos sistemas, y no es para menos. Sin tener mucha idea sobre electricidad o baterías, la lógica nos induce a pensar que si suministramos una mayor corriente a una batería, lo más seguro es que se acabe dañando. Este argumento tiene bastante sentido, aunque la realidad es que no son tan perjudiciales como creemos.
Qualcomm es uno de los mayores fabricantes de procesadores móviles que nos podemos encontrar en la actualidad, y seguramente el primero en abrazar el uso de sistemas de carga rápida en los smartphones. Según podemos comprobar en la información del fabricante, la carga rápida no daña la batería más que la carga clásica que conocemos.
Esto se debe a que los sistemas de carga rápida se han diseñado específicamente para operar en un rango de tensión y corriente en el que las baterías no resulten dañadas. Los fabricantes de teléfonos integran en sus dispositivos unas baterías con una determinada capacidad, y los fabricantes de procesadores se encargan de diseñar tecnologías que sean capaz de utilizar la mayor cantidad de corriente disponible que siga los estándares de rendimiento y seguridad.
De este modo, para poder aprovechar la carga rápida de nuestro teléfono no solo es necesario que nuestro cargador soporte esta característica, sino que además será el procesador quien gestione la carga que toma de este, convirtiéndolo en el responsable directo de que nuestra batería se cargue de forma óptima, impidiendo que perjudique la carga rápida a nuestra batería.
¿Qué pasa si conecto un teléfono sin carga rápida a un cargador de carga rápida?
Otra duda que nos viene a la mente en muchas ocasiones sobre la carga rápida está relacionada con su cargador. Al ser necesario disponer de un cargador especial para la carga rápida, esto nos induce a pensar de que el cargador es el único responsable de esta tecnología, y de que si conectamos nuestro teléfono de carga rápida a este, acabará dando una mayor corriente que acabaría reduciendo su vida útil.
Como comentamos con anterioridad, en el caso de los smartphones, es el propio procesador el responsable de decidir cuanta corriente debe tomar para realizar la carga sin dañar el dispositivo. De este modo, todo teléfono tiene un rango de voltajes y corriente permitida que acaba tomando del procesador. Los cargadores especiales para carga rápida, simplemente son capaces de proporcionar una mayor corriente, por lo que nuestro smartphone nunca tomará más corriente de la que puede y necesita. Esto hace que sea seguro cargar un teléfono sin carga rápida en un cargador preparado para esta.
¿Es seguro utilizar la carga rápida por las noches?
Con la carga rápida, es posible que tengamos completamente cargado nuestro teléfono en muy poco tiempo, lo que hace que no sea tan necesario dejar conectado el teléfono durante toda la noche. No obstante, es posible que lleguemos a nuestra casa al final de la jornada casi sin batería, de forma que no podamos evitar tener que dejar conectado nuestro móvil toda la noche al cargador. ¿Es seguro cargarlo durante toda la noche?
Cabe resaltar, que las tecnologías utilizadas en la carga tradicional y la carga rápida siguen exactamente las mismas bases tecnológicas, por lo que en este sentido, el cargador rápido sigue las mismas normas que cualquier otro cargador. Nuestro teléfono se irá cargando hasta llegar al máximo, y cuando llegue, dejará de cargar. Al igual que la carga rápida, el teléfono no sufrirá ningún daño, la diferencia es que dejará de cargar antes.
Con esto desvelamos los mitos acerca de la carga rápida que conocemos. ¿Tienes alguna duda más acerca de la seguridad de la carga rápida? No dudes en preguntarnos en los comentarios.