Durante muchos años hemos visto cómo la forma de los smartphones se ha ido consolidando hacia una idea que inauguro el iPhone. Un elemento de cristal, con una pantalla como protagonista absoluto y sin elementos que la ensombrezcan, como una bisagra o un teclado físico.
Algunas firmas han intentado ir más allá, como Samsung con los Galaxy Note, pero no ha sido hasta 2019 que firmas como la propia Samsung han decidido que el futuro de los teléfonos serían los plegables.
OPPO presenta un móvil demasiado perfecto
Además de Samsung, otras firmas han lazando prototipos, como el es caso de OPPO y su OPPO X 2021, un teléfono enrrollable que estamos deseando que sea anunciado.
Ahora le toca el turno a un nuevo móvil que llegan en fase de diseño, no de prototipo, y eso es lo que menos nos ha gustado. La idea de OPPO es ofrecer un terminal que, plegado, no ocupa mucho más que una tarjeta de crédito.
Para ello usaría un sistema de bisagras que haría posible usarlo con una pantalla de 1.5 pulgadas, con una de 3.15 pulgadas o con una de 7 pulgadas. Eso sí, en todo momento hablamos de diagonales en pantallas con un ratio excepcionalmente alargado, como se ve en las fotografías.
Por otro lado, la parte trasera incluiría cuatro cámaras, aunque no hay ni protuberancias y sistemas complejos de bisagras, algo que ya sabemos que es muy relevante en los móviles plegables.
Además, los bordes de la pantalla, el lápiz integrado, el sistema mecánico que parece alimentar el movimiento de la misma… todo es demasiado vago para tomarlo como algo más que una idea bonita.
También queda a duda de, si técnicamente pudiera ser llevado a a vida real, qué autonomía tendría ya que el grosor que ofrece no parece que deje mucho espacio para la batería.