El RED Hydrogen One lleva más de un año dando que hablar, como uno de los móviles más potencialmente revolucionarios de la historia. Sin embargo, ahora que se ha hecho realidad las primeras impresiones son decepcionantes como mínimo; ¿estamos ante un desastre de 1.300 dólares, o ante un incomprendido?

Puede que no te suene el nombre de RED, y es perfectamente comprensible; no ha aparecido de la nada, sino que proviene del sector de cámaras de cine profesionales. Pero RED es algo más que un simple fabricante que quería expandirse a otros sectores; estamos ante una auténtica leyenda del cine, de la que no has oído hablar, pero que de una manera o de otra ha estado presente en muchas de las películas que has disfrutado en los últimos años.

RED, una leyenda del cine

Pese a esta categoría de «leyenda», Red Digital Cinema es una compañía muy joven. Fue fundada en 1999, pero en realidad no fue hasta siete años después que presentaron su primer producto, la RED One; y no fue hasta un año después, en 2007, que fue lanzada al mercado.

Ocho años en los que el fundador, Jim Jannard, en colaboración con algunas de las figuras más importantes del sector como Jarred Land o Frederic Lumiere ideó el futuro de las cámaras. Un futuro en el que los cineastas pudiesen adoptar un proceso completamente digital en la filmación de películas; un futuro en el que la resolución 4K se convertiría en el estándar, después de demasiado tiempo anclados en los 2K. En definitiva, un futuro moderno que los fabricantes de entonces no podían, o no querían, alcanzar. Y menos aún, al precio correcto.

Pero mereció la pena. La RED One es mucho más que una simple cámara digital. La palabra «revolución» se quedó corta para definir lo que un simple producto provocó en la industria cinematográfica.

Tanto para blockbusters como para cine independiente

Con nombres de la talla de Peter Jackson, que abrazaron el nuevo proceso de trabajo completamente digital y la calidad de imagen mejorada, la RED One se convirtió en la referencia de la noche a la mañana. Los grandes «blockbusters» de Hollywood aprovecharon a conciencia la calidad de la imagen; pero hasta las pequeñas producciones se beneficiaron de esta tecnología.

Y es que la otra gran ventaja de la RED One era el precio: aproximadamente una cuarta parte de lo que costaba una cámara tradicional de film. Gracias a esto, más pequeños productores y cineastas independientes pudieron dar el salto a los 4K y a la producción completamente digital. Era algo tan obvio que ni siquiera había que pensárselo; aunque por supuesto, no faltaron los puristas del film. Pero no fueron suficientes para mantener a toda una industria; en 2011, los grandes fabricantes anunciaron que daban el salto a las cámaras digitales. En apenas cuatro años, RED había cambiado completamente la industria.

Cómo es el RED Hydrogen One

Así las cosas, cuando RED anunció que se metía en el sector de los smartphones, las expectativas se dispararon; y los primeros datos apuntaban a un impacto como el que sufrió el sector del cine.

RED se ha convertido en sinónimo de cámara, así que sorprendió incluyendo cuatro cámaras en la trasera del dispositivo. Pero tal vez más importante, RED quería poner patas arriba el sector con una pantalla holográfica, que permitía mostrar imágenes tridimensionales. Lamentablemente, los constantes retrasos en la producción han hecho que nos olvidemos de este móvil. Hasta ahora.

El RED Hydrogen One está llegando a los primeros periodistas en EEUU, donde será lanzado por las grandes operadoras del país, Verizon y AT&T, por un precio que ronda los 1.300 dólares. Sí, eso es mucho dinero por un móvil, pero a poco que sea tan importante para la industria como lo fueron las cámaras, merecerá la pena, ¿verdad?

Pero no parece ser así. Las primeras impresiones publicadas no son nada buenas, sin importar el medio o el periodista que lo haya probado. ¿Estamos ante un fracaso?

Un móvil decepcionante para lo que cuesta

El mayor problema, en el que la mayoría de personas que lo han probado está de acuerdo, es que el RED Hydrogen One es demasiado caro para lo que ofrece. Es cierto que cada vez vemos más móviles que cuestan más de 1.000 dólares; pero no con este hardware.

Que RED haya optado por un Snapdragon 835 en vez de por su sucesor es todo un indicativo de las decisiones tomadas. No es que sea un mal procesador, pero ya no es lo mejor que puedes llevar en tu móvil; peor aún, un software mal optimizado, como apuntan en DroidLife, provoca retrasos y saltos notables.

La pantalla holográfica también ha recibido críticas. Al usar tecnología LCD, los colores y el contraste no son tan atractivos como en alternativas OLED, según Gizmodo. Sí, gracias a la tecnología holográfica es posible ver un efecto curioso en las fotos; pero es un efecto que sólo se verá en otras pantallas holográficas, el resto del mundo sólo verá imágenes en 2D normales y corrientes.

Pero tal vez lo más chocante es que las cámaras no están a la altura. Finalmente el Hydrogen One sólo tiene dos cámaras y no cuatro, de 12 Mpx cada una. Y la calidad deja mucho que desear. De nuevo, el único interés es hacer fotos holográficas; pero eso sólo funciona si ponemos el móvil en horizontal si queremos usar las cámaras traseras, y en vertical si queremos usar las cámaras delanteras. Eso es porque RED sólo ha conseguido que su tecnología funcione si las cámaras están una al lado de la otra en horizontal.

¿Realmente importa?

Claro, que la verdadera pregunta, y la razón por la que no podemos llamar «fracaso» al Hydrogen One, es si todo eso importa.

Desde el principio fue evidente que RED está intentando algo nuevo. Algo que no encajaba con lo que estaba haciendo el resto de la industria; pero el Hydrogen One no parece que vaya a provocar la misma reacción que la RED One provocó en el cine.

Pero al igual que aquella cámara, el Hydrogen One nos plantea una manera diferente de hacer las cosas; es más una demostración de lo que es posible que un producto echo y derecho. La compatibilidad con módulos de cámara, que permiten grabar vídeo a 8K; no es la primera vez que vemos un móvil con pines expuestos para conectar módulos (los Moto Mods de Motorola nos saludan).

La diferencia es que RED quiere que estos módulos nos permitan usar el móvil de manera profesional, como por ejemplo, para grabar una película sin necesidad de comprar una cámara completa. Si funciona, puede ser una gran ayuda para el cine independiente.

El Hydrogen One se venderá en EEUU por ahora, pero seamos sinceros, no será un superventas. Pero sí que puede ser el inicio de algo diferente. Un producto que influya al mercado, y el principio de algo más. O puede que este sea el primer y último móvil de RED.