Buenas o malas noticias, según lo queramos ver: el Samsung Galaxy S7 no supondrá una revolución en diseño, se parecerá mucho a lo que ya tenemos con el Samsung Galaxy S6.
El Samsung Galaxy S7 es uno de los dispositivos más deseados de cara al 2016: los buques insignia de Samsung siempre desatan pasiones entre el público, y Samsung sabe esto. Ya lo aprovechó con el lanzamiento de los Samsung Galaxy S6 y S6 Edge, los cuales nos dieron una sorpresa bastante agradable en el campo del diseño, pero estas sorpresas en diseño podrían no ser tan grandes en el futuro Samsung Galaxy S7.
Mejoras bajo la pantalla, el objetivo en el Samsung Galaxy S7
Según podemos leer en SamMobile, Samsung quiere poner todos sus esfuerzos en mejorar el motor debajo de los Samsung Galaxy, y las mejoras en diseño van a ser algo secundario en la presentación. Por ejemplo, nos vamos a encontrar mejor rendimiento o calidad de imagen, incluso funciones nuevas dentro de TouchWiz, pero el Samsung Galaxy S7 va a contar con un diseño parecido al del Samsung Galaxy S6.
Tiene sentido pensar que Samsung va a mantener ese diseño exitoso del Samsung Galaxy S6, y que va a centrarse en mejorar el resto de aspectos que no son tan visibles pero condicionan igual. Buenas noticias si tenemos en cuenta que el diseño del Galaxy S6 es de lo mejor que nos hemos encontrado en 2015, y que lo importante ahora mismo es mejorar el resto de cosas.
La continuidad es importante, marcas como HTC y Sony pueden asegurarlo de primera mano: los diseños de sus smartphones son continuistas, suponen una seña de diferenciación por sí mismos, y a Samsung le interesa adquirir ese detalle.
Los Samsung Galaxy siempre han cambiado mucho de diseño -aunque hayan tenido iconos en común, como el botón central-, y les viene bien establecer un diseño base para adquirir una seña diferenciadora. Y mientras, siempre viene bien adoptar mejoras como las memorias RAM LPDDR4, o cámaras con mejor calidad de imagen.