Nokia, sin tapujos. La finlandesa ha oficializado sus planes con una declaración respecto a sus planes para crear y vender de nuevo teléfonos bajo una marca que llegó a ser en su momento líder del mundial de constructores móviles. Ahora, Robert Morlino, portavoz de Nokia Technologíes, ha vuelto ha confirmar la compañía tiene ya una hoja de ruta para regresar al competitivo mercado de los smartphones. Si finalmente nada se tuerce, la factoría del norte de Europa no producirá sus propios terminales sino que los licenciará para que los cree un tercero.
Morlino recuerda que cuando Microsoft fagocitó Nokia, el contrato de compra incluía una renuncia a la «capacidad de fabricación, comercialización y distribución», una infraestructura básica para desarrollar teléfono móviles y venderlos.
Por ello, el único camino que queda para el regreso de Nokia es el de licenciar su marca. Ahora, Nokia busca «un compañero de clase mundial» que debe hacerse cargo de la fabricación, venta y distribución de los terminales Nokia, así como del soporte al cliente.
Regreso de Nokia: no antes del último trimestre de 2016
Pero claro, ¿y qué haría Nokia? ¿Poner la mano para recibir el pago por el uso de tan reconocido nombre en el mundo de la tecnología? La factoría finlandesa se encargaría de «guiar el diseño y la tecnología de la diferenciación de los productos».
Según confirman desde la propia compañía, los teléfonos no llegarán en ningún caso antes del último trimestre de 2016. El plazo no se debe a otra cosa que los plazos marcados en el acuerdo con Microsoft.
Eso sí, la empresa puede empezar a cocinar el diseño de los teléfonos. El sistema de licencias no sería algo nuevo para Nokia. Hay que tener en cuenta que en China ha tenido relativo éxito con la tableta Android N1, que se fabrica y se vende con la ayuda de Foxconn.