Sega ya ha visto de forma clara que su futuro pasa por los móviles y no deja de lanzar propuesta usando sus icónicos personajes. Y si hay uno importante es sin duda Sonic, el carismático erizo azul que tantas alegrías nos dio el siglo pasado.
Ya se puede descargar del Google Play Store la última aventura de este corredor en forma, cómo no, de endless runner, auqnue quizás no se el término más adecuado ya que cada una de las fases tiene una línea de meta.
Jugando contra otras personas
Una de las características del juego es que vamos a competir contra personas reales lo que hará que por un lado tengamos la sensación de rivalidad más a flor de piel peor por otro vamos a tener que esperar a que el resto de jugadores se conecten. No es una espera larga pero sí que es algo extraño.
A medida que vayamos avanzando consiguiente puntos podremos escalar en la tabla clasificatoria que podemos consultar dentro del propio juego.
Deslizando en todas las direcciones
El juego tiene un manejo muy sencillo y es que podemos saltar si deslizamos el dedo hacia arriba, podremos derrapar agachándonos si lo hacemos hacia abajo o podremos sortear obstáculos si lo hacemos hacia los lados.
El problema, o quizás el interés, es que el ritmo es frenético y no es raro que nos choquemos varias veces en una misma carrera.
Potenciadores, cofres y anillos
A medida que corremos podremos recoger los característicos anillos dorados del juego, que perderemos si chocamos contra algo o si un enemigo nos lanza una bola de fuego. Sí, es posible usar algunos potenciadores contra los rivales del mismo modo que ellos podrán usarlos contra nosotros.
En función de la posición que obtengamos en la línea de meta conseguiremos cofres, que nos darán acceso a más personajes, a estrellas rojas con las que realizar mejoras a los mismos y más elementos del juego.
Gratis pero con compras y publicidad
Hace unos años la forma de monetización de los juegos y aplicaciones, apero sobre todo de los juegos, pasaba por la elección de una de las tres opciones disponibles.
Podíamos tener un juego de pago, en el que hacíamos un desembolso para jugar; podíamos elegir un juego gratis pero con micropagos; y por último podíamos elegir un juego gratuito con publicidad.
Actualmente esto se ha pervertido y tenemos situaciones como la que vivimos en este juego done hay micropagos pero también mucha publicidad. Esto corta de dos maneras diferentes el uso y disfrute del mismo y es posible que a muchos les eche para atrás.