La polémica de los últimos días en torno a la privacidad y el uso público de los datos compartidos tiene un nombre propio: Strava. La aplicación deportiva activó un servicio en web sumamente curioso: un mapa de calor con las zonas del mundo donde se efectúan las rutas y ejercicios. El riesgo a perder la privacidad llamó la atención casi al instante, sobre todo por un hecho que ha terminado colapsando la actualidad: el «Strava Heatmap» terminó revelando la situación de bases militares secretas.
Somos muchos los que utilizamos la aplicación para registrar nuestros ejercicios sin caer en la cuenta de que «regalamos» datos privados la mar de valiosos. Por defecto compartimos nuestros movimientos con Strava para crear el mapa de calor global; además de para las tablas de posiciones, rutas, segmentos… El mapa se encuentra accesible de manera pública y abierta.
No es que en las rutas se aprecien los datos privados de los usuarios, pero quizá no desees compartirlos para que Strava los utilice de manera pública. ¿Quieres cambiar los registros de tu cuenta? Te enseñamos a hacerlo.
Cómo evitar que Strava utilice nuestros datos para crear el mapa de calor global
Ya decíamos que por defecto compartimos las ubicaciones y registros con Strava. Dichos datos se envían de manera anónima, por lo que en ningún momento aparece el nombre de usuario u otras referencias. Aunque eso sí: trasladadas las rutas a un mapa global, los recorridos resaltan las zonas que supuestamente deberían estar deshabitadas.
Quizá el mapa de calor tampoco te moleste, pero debes tener en cuenta que tus rutas estarán accesibles a otros usuarios de la aplicación si eliges que se publiquen de manera abierta. Esto implica que seguramente dejes información valiosa, como tu domicilio: si siempre partes y llegas al mismo sitio lo más lógico es que vivas ahí.
Para no dejar registros de tus ejercicios lo mejor es que hagas privados tus entrenamientos: de esta manera no se verán de manera pública y solo podrán acceder a ellos los amigos que hayas aceptado en la aplicación.
- Desplaza la pantalla lateral de Strava y entra en «Configuración».
- Desciende hasta «Controles de privacidad».
- Marca la opción de «Privado de forma predeterminada». A partir de ese momento las nuevas actividades no se reflejarñan en el servicio de manera pública.
Las prácticas anteriores sí serán públicas, por lo que deberás entrar en cada una y editarla. Para convertir la actividad privada en una actividad pública necesitas acceder a la versión web: desde la aplicación Android solo puedes esconder los tiempos de las tablas de clasificación.
Lo anterior es para hacer privados todos los entrenamientos con Strava. ¿Que quieres abstenerte de que la empresa utilice tus datos para crear el Heatmap y futuras herramientas? Debes operar de la manera siguiente.
- Accede a la configuración de Strava.
- Entra dentro de los «Controles de privacidad».
- Desciende hasta la opción de «No mostrar en Flybys» y márcala.
Strava permite administrar la privacidad, pero no pone demasiado esfuerzo en recordarlo
No se puede decir que Strava no permita modificar la manera en la que compartimos la información con el servicio y resto de usuarios, pero tampoco es tan sencillo. Las opciones de privacidad están algo escondidas, Strava no avisa de ello al iniciar una nueva cuenta y, encima, para modificar la privacidad de las actividades realizadas necesitamos acceder desde el navegador web. Con la polémica de los últimos días seguro que vemos cambios en la privacidad de Strava.