Si le preguntamos a la gente joven dónde conoce a otras personas es muy probable que responda que en Internet, a través de alguna aplicación.
Las hay enfocadas a conocer gente para sexo, tener una relación estable o simplemente compartir aficiones comunes. La más popular es posiblemente Tinder, con un enfoque muy concreto.
Ahora lega Azar, que como su nombre indica nos conecta con personas de todo el mundo. Y sí, se parece a Tinder, pero también a Snapchat, y a Chatroullet, y a Instagram, y os contamos por qué.
Manejo sencillo que recuerda a Tinder y Chatroulette
El funcionamiento de la aplicación es tan sencillo como deslizar en la parte central de derecha a izquierda. Así iremos pasando de usuario en usuario aunque como novedad diremos que en vez de una foto de perfil veremos su cámara frontal activada y es que en este sentido se parece al servicio Chatroulette, que ponía en contacto a personas que usaban webcams en sus ordenadores.
En la zona superior tenemos los accesos al perfil, al chat, con traducción en 19 idiomas o a los últimos contactos que hemos realizado.
Filtros como en Instagram y stickers que recuerdan a Snapchat
Cuando aparecemos en pantalla la zona inferior nos permite personalizar nuestra apariencia en vídeo, con filtros como los de Instagram o VSCO, stickers como los de Snapchat.
Hay que pagar si queremos ciertas opciones
La aplicación se ha descargado varias decenas de millones de veces por lo que no es un problema encontrar a alguien al otro lado.
Aunque podemos filtrar por localización para buscar gente que esté más cerca de nosotros el hacer lo mismo con el género implicará el uso de unas gemas que cuestan dinero. También el buscar gente en ciertos países es algo que tiene coste.
Los micropagos son algo agresivos
Los micropagos están pensados para hacer pasar por los mismos aquellos que quieren usar esta aplicación con perfiles del sexo opuesto por lo que parece.
Si estamos aburridos y queremos charlar un poco o hacer el tonto con la webcam puede resultar curioso pero si buscamos algo más serio quizás sea algo frustrante.