Cuando salió Google Keep a mi me hizo ilusión tener una buena aplicación de notas de la casa y vinculada a todos mis servicios. La realidad fue que Keep fue realmente una aplicación bastante básica, que aunque buena, tenía ya muchos competidores mucho más completos. Para una aplicación de notas yo no pediría mucha complejidad, pero sí un mínimo de sincronización, tipos de notas y facilidad, en una app completa. 

La aplicación de hoy no es para nada algo de este estilo. De hecho carece de muchas de las funciones más importantes de un gestor de notas, pero tiene algún que otro punto que la hace igualmente atractiva siempre que podamos pasar con algo no tan potente.

Jotter Note Keeping

Esta aplicación es un simple gestor de notas que no destaca por su gran repertorio de características, y que no pretende competir con los gestores más potentes y conocidos como Evernote. En cambio, nada más iniciarla vemos que luce una estupenda interfaz sencilla y muy elegante. Líneas finas, colores sólidos  y sobre todo espacio. Esta interfaz es uno de los 2 puntos fuertes de la aplicación. Al menos yo valoro mucho que una aplicación tenga una presentación así. Por contra, encontrarte con una aplicación que no sabes por donde coger… bueno, induce a desinstalarla al momento.

Para funcionar tenemos un menú fijo en la parte superior, con los botones esenciales en cualquier aplicación. Podemos crear una nota, editar, eliminar, y por último los ajustes. Para empezar evidentemente crearemos una nota, y el proceso es tan simple como que aparece un cuadro de texto blanco para escribir. Escribimos, guardamos, y listo, no hay más vueltas que dar. Para editar la nota que hemos creado tenemos que mantenerla pulsada y veremos que queda marcada.

Si simplemente la pulsamos, entraremos dentro de la propia nota, pero la pantalla que aparece es igual que la inicial, y aquí es donde recae el segundo punto fuerte de Jotter. Podemos crear notas dentro de notas, y de hecho podemos crear infinitos niveles unos dentro de otros. De esta manera podemos usar las notas dentro de otras como simples descripciones, pero también como listas, o como textos, todo depende del caso.

No tengo idea de otro gestor de notas que permita algo así, y lo veo una buena característica. Por último, en los ajustes encontramos poca pero buena cosa. La apicación tiene 2 temas, blanco y oscuro, y posteriormente tiene una paleta de 6 colores vivos, que podremos combinar con los temas al gusto. La aplicación queda muy chula. También podemos ajustar el tamaño de fuente de las notas, y permitir notificaciones.

Precisamente estas notificaciones sirven para las funciones de la versión de pago, donde se añaden cosas bastante esenciales como los recordatorios de las notas, alertas, proteger notas con contraseñas, y un widget que muestra las próximas notas. Es una pena que todas ellas queden para la versión Pro, pero la versión básica sigue funcionando como gestor básico.