Desde que hace ya un tiempo se anunciara que ciertos terminales con Android (especialmente e inicialmente en la gama Nexus), vendrían con un nuevo chip incorporado llamado NFC, muchos fueron los que pronosticaron una pérdida de tiempo, dinero y trabajo para algo que quedaría en un simple extra que nadie usaría, lo que llevaría a su extinción.
Cierto es que a día de hoy, al menos en nuestro país, pocos usos podemos darle, pero no entraremos en decidir de quien es culpa o los motivos, pues se salen de contexto, así que lo que haremos es daros un par de ideas para poder aprovechar ese maravilloso chip que muchos seguro que tenéis (y los que no, no os preocupéis, tarde o temprano os llegará el turno), y darle así algo más de juego a nuestro móvil, que todo sea dicho, las posibilidades son muchísimas, y el límite lo pone nuestra imaginación.
Chip NFC + SmartTag, comodidad ante todo
Bien, tenemos un móvil con NFC; da la casualidad de que tenemos otro colega con otro móvil con otro chip NFC; perfecto. Al juntarlos vibran, hacen ruiditos y podemos pasarnos números de teléfono, archivos y puede que incluso fotos. ¡Que divertido!
Va, ahora enserio, esa es una de las ideas y utilidades que se mostraron en un primer momento, al igual que el pago mediante móvil (muy poco implementado por el momento), pero como os hemos comentado, hay muchísimas más posibilidades, solo que para ello necesitamos de un pequeño «extra»; un SmartTag.
¿Y qué es un SmartTag? Pues es una simple pegatina que lleva un chip para transmitir información a nuestro dispositivo, como las típicas tarjetas del bus o metro que van por proximidad. La ventaja de estas pegatinas es que pueden configurarse a nuestro gusto, pudiendo hacer que cada una de ellas ordene ciertas acciones a nuestro teléfono. Y podemos borrar y «escribir» tantas veces como queramos esos chips.
De estos adhesivos los hay de varios tamaños, formas y colores, según el uso que vayamos a darles; incluso los hay en forma de llavero. Y ahora que tenemos lo necesario para empezar a llenar nuestra casa de pegatinas, veamos algunos usos interesantes.
Lo primero que debemos hacer (una vez nos hemos agenciado de las «pegatas») es descargar alguna aplicación para poder «escribir» en ellas. En Google Play hay varias, como esta, esta o esta. Luego lo que debemos hacer es usar dicha aplicación para configurar qué acción debe realizar cada uno de nuestros SmartTags, en función de donde tengamos pensado usarlo. A saber:
- Tarjeta de visita: De esta forma podemos, por ejemplo, añadir nuestra información de contacto a una pegatina, engancharla en un pequeño atril hecho a medida y colocarlo en nuestra mesa de trabajo (en caso de currar en una oficina o similar). De esta forma nos ahorramos un buen puñado de tarjetas (con el consiguiente ahorro de papel), y cualquier persona que venga a visitarnos, con tan solo acercar su teléfono a nuestro soporte ya obtendrá nuestros datos.
- Modificar nuestra configuración (perfiles): Otra utilidad interesante es la de poder hacer que el simple hecho de acercar nuestro teléfono a un SmartTag, este modifique automáticamente su configuración. Por ejemplo, creamos varias etiquetas con diferentes perfiles (casa, oficina, coche…), y las dejamos colocadas en sus respectivos lugares. Así al entrar en el coche y colocar el teléfono en su lugar, se activa el Bluetooth y arranca el GPS. Al llegar al trabajo y dejar el teléfono sobre la mesa, se activa el wifi para conectarnos a la red de la empresa, se pone en modo silencio/vibración y se desactiva el GPS, y al llegar a casa, se conecta a nuestra wifi, se activa el Bluetooth y se abre la aplicación de música que se conecta a nuestro equipo HiFi para escuchar nuestra banda sonora. De aquí a lo que de nuestra imaginación.
- Enlazar a una página web: Al igual que los códigos QR, que sin darnos cuenta se han adueñado de casi todas las etiquetas comerciales, podemos crear una pegatina que enlace a una página web, por ejemplo de nuestro negocio. O incluso que nos lleve a un archivo PDF donde encontrar información relativa a ella: la carta de comida en caso de un restaurante, catálogo en caso de una tienda, etc.
- Información adicional: Otra vez, como el caso de los QR y, por ejemplo dentro de un museo, podemos añadir una etiqueta junto a cada cuadro, escultura o extintor para que al acercar nuestro teléfono nos muestra la información relativa a éste: quien lo pintó, los motivos, un poco de historia….el año de la próxima revisión, etc.
- Proporcionar un formulario, encuesta, etc: Como en el caso de enlazar a una web, en este caso podemos enlazar a un formulario creado con Google Docs, por ejemplo, para que el cliente que viene a nuestro hotel, restaurante o lo que sea, al marcharse pase su teléfono por nuestro tag y automáticamente le aparezca un formulario para opinar o dejarnos cualquier sugerencia sobre su estancia/comida.
Estos son algunos de los usos que podemos crear mediante estas sencillas pegatinas, pero hay otros más «especializados» que podrían ser igualmente útiles como por ejemplo usar nuestro móvil para acreditarnos en una conferencia o usarlo a modo de tarjeta de acceso, descargar la «hoja de ruta» diaria, usarlo a modo de «tarjeta para fichar» cuando entramos y salimos del trabajo, etc. Como vemos, las posibilidades no son simplemente pasarnos información de un teléfono a otro o realizar pagos, y esta tecnología es mucho más versátil de lo que a primera vista puede parecer.
Y seguro que ahora muchos de vosotros os preguntaréis de donde sacar esas maravillosas y fantabulosas pegatinas, ¿verdad?. Pues en Internet se pueden conseguir en varias tiendas, y realizando una sencilla búsqueda en Google (o cualquier otros buscador), encontraremos infinidad de páginas para adquirirlas.
Ya hemos dicho que hay de diversos tamaños o formas, las hay flexibles o rígidas, las hay lisas o de colores…Pero lo más importante es el precio. Las pegatinas pequeñas (25-35mm) rondan los 0,80€-1,20€, según la página y tipo, las rígidas (generalmente de plastico) pueden costar en torno a 1,5€ cada una, al igual que los llaveros pequeños, y si queremos una pulsera de silicona (que también las hay), rondan los 2,5€ – 3,00€.
Después de estas ideas, seguro que más de uno ya estará buscando donde pillar un par de estas pegatinas, y generalmente se venden en packs de 10-20-50, por lo que si somos un grupo de colegas, nos saldrá mucho más barato que comprarlas individualmente.
Y vosotros, ¿que otras ideas tenéis para sacarle provecho al NFC?