Ayer resonaron bien fuerte los tambores de guerra desde Google I/O con la alianza de Samsung y Google en firme con Wear OS, y a la que se une en parte también Fitbit.
La resonancia de esos tambores ha llegado también a todos aquellos usuarios que se sienten muy a gusto con sus Fitbit u otros con los wearables de Samsung. Sobre todo por el temor a la gran G de que intente acaparar que éstas se centren más en Wear OS.
Un Wear OS para todos
Wear OS no ha ido nunca por el camino que esperó Google y ha conllevado que incluso ésta adquiriera Fitbit hace casi dos años para que Samsung se dejara llevar por su propio Tizen OS que ha ido mejorando estos años.
En este tiempo, tanto Samsung como Fitbit han sido capaces de situar a sus wearables en una gran posición y los usuarios que disfrutan de sus experiencias no quieren ni por asomo que sean tocadas por Google.
En cambio, Google ha intuido que es el momento para una alianza a dos, casi de tres, para presumiblemente hacer llevar a Wear OS a una gran multitud de relojes inteligentes que veremos en los próximos años. A primeras esta sería la intención, como lo fue con la gama de entrada y baja de numerosos fabricantes chinos.
Lo mejor de Tizen y lo mejor de Fitbit
Ayer Google dejó bien claro que hay tres aspectos de Wear OS que quiere mejorar: autonomía, rendimiento y una interfaz mejorada para las apps.
Para ello toma primero a Samsung, que incluso publicará una herramienta para diseñar esferas de reloj, que se ha convertido en una experta con el lanzamiento de relojes como el Samsung Gear S3 de muy buenas prestaciones.
Y en segundo término a Fitbit, sabedora de que, para que Wear OS sea tomado en cuenta, necesitará de sus habilidades para el registro de la actividad física con ese Fitbit OS que sigue encantando a propios y extraños.
Unas apps de Google rediseñadas para Wear OS
Por la parte que le toca a la gran G, rediseñará Google Pay y Google Maps, dos aplicaciones esenciales para dar otros aires a Wear OS.
Si caemos en la cuenta de que Google Maps tendrá una mejorada Inteligencia Artificial con la posibilidad de hacer búsquedas para rutas que nos enseñen paisajes bonitos, sería todo un acierto incluir estas mejoras en la IA en una interfaz diseñada de forma específica para Wear OS.
Otro de los anuncios de ayer fue YouTube Music que hará acto de presencia en Wear OS para finales de año. Cabe recordar que unas apps diseñadas de forma especial para este tipo de dispositivos es esencial para procurar una gran experiencia de uso.
Un futuro posible
Un Wear OS más estable, que rinda mejor, que ofrezca una mejor autonomía y que genera una experiencia óptima con apps como Google Pay o Google Maps, puede ser todo un caramelo para que los fabricantes, que han armado a la gama baja de Android con una extensa oferta de móviles, se tiren a la piscina con sus propios relojes.
Sin un anuncio por parte de Samsung de que sus relojes inteligentes actuales se vayan a actualizar a Wear OS, aunque sí que llegará un próximo Gear con este sistema operativo, y algunos Fitbit que se sumarán a este nuevo tren de Google, todo parece indicar que los realme, POCO y demás se sumarían a la fiesta.
Una gran oleada de wearables baratos con una gran experiencia de usuario sería lo que quizás quiera Google para los próximos años y así fuerce a Apple a lanzar un Apple Watch más barato como sucedió finalmente con sus iPhone.