Google ha conseguido lo que hasta ahora sólo Microsoft tenía: crear un sistema operativo que cientos de empresas usaran y triunfar sin crear hardware propio. Sí, ambas disponen de una línea de hardware de moderado éxito, pero al lado del triunfo de sus sistemas operativos eran poca cosa.
Lo que Redmond consiguió ha sido replicado por la empresa de Palo Alto con una fuerza incluso mayor. Los móviles inteligentes han logrado ser incluso más relevantes que los ordenadores.
Pese a que Android se ha tenido que pelear con los sistemas operativos de Microsoft, Nokia o Blackberry, está claro que ha conseguido ganar y actualmente sólo iOS es un rival digno, aunque las cuotas de mercado sean muy dispares.
Sin embargo, esto ha restado también oportunidades a los usuarios, que se han visto obligados a usar una de esas dos opciones. Pero parece que habrá una tercera, aunque sea por obligación.
Huawei no quiere volver a depender de Google
En unas declaraciones entre periodistas el Country Manager de Huawei en Austria, Fred Wangfei, habría afirmado que Huawei no volverá a usar los Google Play Services aunque el gobierno estadounidense se lo permita. Por otro lado, su homólogo holandés ha dicho lo contrario, que Google es un socio valioso y que podrían colaborar en un futuro si es posible. En el momento de redactar este artículo nos pusimos en contacto con Huawei España para saber si había alguna respuesta oficial y horas después la empresa ha emitido un comunicado muy breve:
Un ecosistema abierto con Android sigue siendo nuestra primera opción, pero si no podemos continuar usándolo, tenemos la capacidad de desarrollar el nuestro.
Más allá de que esas declaraciones impliquen una negativa tajante, lo que parece claro es que la empresa es consciente de que hasta ahora ha dependido mucho de Google. Tanto como el resto de fabricantes que usan Android. Y no quiere que eso vuelva a repetirse.
Incluso si la administración Trump quitara a Huawei de la Entity List, o si diera permiso a Google para colaborar con Huawei, nada nos garantiza que en unos meses o años no vuelva a pasar lo mismo.
No sabemos si la división móvil de Huawei podría subsistir fuera de China sin Google, ni si volvería con ellos si el gobierno lo permitiera, pero sería interesante ver un futuro en el que no fuera así.
Tres sistemas operativos móviles, en vez de dos
Como comenta Alex Barredo en Twitter, podríamos estar a medio plazo ante una realidad que no vemos desde hace mucho: tres sistemas operativos disponibles para los usuarios en las tiendas:
- Apple: iOS con la AppStore.
- Huawei: Android AOSP con la App Gallery y los HMS (Huawei Mobile Services).
- Resto de marcas: Android de Google con la Pay Store y los GPS (Google Play Services).
Este movimiento permitiría crear un tercer ecosistema que no estuviera en manos de Estados Unidos. Por si no nos hemos parado a pensarlo, tanto Android como iOS son sistemas americanos, y Asia y Europa no tienen nada que decir.
De hecho, Huawei habría invitado a Europa a crear un nuevo ecosistema alternativo a Google que pudiera ser usado por sus consumidores sin tener que depender de las empresas estadounidenses. Podría parecer una locura, pero hemos visto eso en el pasado con Symbian, Maemo y Meego.
Crisis significa oportunidad, ¿no?
Se dice que en chino la palabra usada para transmitir el concepto de una crisis es la misma que la que se usa para transmitir el concepto de oportunidad.
China, pero también Europa, tienen ahora mismo la posibilidad de crear un entorno en el que se forme un ecosistema para los móviles (pero también para el IOT y otras tecnologías) que sirva de réplica a lo que se hace en Estados Unidos.
Obviamente no es una solución dejar de depender de Estados Unidos para hacerlo de China, pero sin obviar los riesgos, podría ser la última oportunidad que tenga Europa para tener relevancia en una guerra que claramente protagonizan China y Estados Unidos.
Huawei tiene ahora mismo la oportunidad de crear un sistema operativo basado en Android sin depender de Google. Pero la calve está en que invite a otras firmas a ser parte de él. Huawei debería invitar a marcas como Sony, LG, Xiaomi, OPPO y empresas de otro tipo a crear un ecosistema más parecido al que había en Symbian que el que hay en Android.
Incluso apoyarse en un competidor directo como Samsung sería una buena idea para ellos. Se trataría de quitarle a Google el poder que tiene para repartirlo entre los fabricantes, como era antes de que Android existiera, pero sin perder lo que hemos ganado mientras: una compatibilidad increíble entre diferentes marcas.
Estas marcas valorarían el poder dejar de depender de Google si pudieran apoyarse en una asociación en la que estén de igual a igual con otras marcas. Obviamente, si Huawei va a ejercer el papel de juez y parte no hay incentivo para que esto pase, y es ahí donde la firma china no debe errar.
Es algo realmente complejo para Huawei
Pero no nos dejemos llevar por las ideas. Crear algo así, de ser posible, será muy complejo. Ya lo intentó Microsoft y fracasó, y gigantes como Amazon y Facebook no han tenido mejor fortuna. Huawei es el único fabricante (quizás junto con Samsung), de liderar un movimiento semejante.
Actualmente empezamos a ver cómo eso podría cambiar, con empresas europeas que empiezan a despuntar, y redes sociales chinas como Tik Tok que son ya fenómenos mundiales, no solo asiáticos.
La hegemonía de Estados Unidos está en disputa, por eso Donald Trump ha empezado su guerra comercial, pero aún no está quién ha ganado, si es que ha ganado alguien.