Llevamos muchos que los smartphones dominan el mercado de la tecnología, también en el ámbito de las cámaras digitales. La fotografía ha evolucionado gracias a ellos tras desterrar definitivamente a las cámaras compactas, aquellos dispositivos digitales que no forman parte del ámbito más profesiones. Aunque eso sí, seguimos arrastrando algunos elementos que ya están más que superados.
¿Cuál es la manera más habitual de referirse al sensor de una cámara móvil? Hacer mención a sus megapíxeles y al número de cámaras. Dichos megapíxeles, que en el inicio de las cámaras digitales tenían sentido, ahora se han convertido en un número obsoleto por más que los fabricantes se empeñen en destacarlos, especialmente cuando el número es alto. Pero no hace alusión a la calidad, solo al tamaño de la fotografía que los sensores logran capturar.
Los números lo son todo a la hora de mostrar el potencial de un dispositivo. Nos fijamos en el número del procesador, en cuántos GB de RAM y de almacenamiento lleva el smartphone, el propio nombre del móvil incluye un número que suele ser indicativo de las prestaciones… Y claro, al llegar a la cámara también vemos los números; sin que los más habituales sean indicativos de la calidad final de las fotografías.
Crecer en megapíxeles dejó de tener sentido por más que sí sirva en determinadas fotografías
Si hacemos un repaso por los últimos móviles presentados en 2018 observaremos que la cifra de los megapíxeles, al menos en lo que respecta a la cámara trasera primaria (luego hablaré de la fiebre por el doble sensor), son los 12. Este parece ser el estándar para mantener la relación calidad/tamaño de la fotografía en un buen nivel. Como he dicho antes, los megapíxeles solo hacen alusión al tamaño final de la foto. Y, dado que las imágenes no van a salir de los móviles porque es el sitio habitual para visualizarlas, obtener fotos de gran tamaño carece de sentido.
Obtener fotos de gran tamaño no tiene sentido: las imágenes no suelen salir de las pantallas móviles
Los 12 megapíxeles (o Mpx) son la media de los móviles más importantes. Luego hay marcas que se empeñan en destacar el tamaño de sus fotografías, como es el caso de Huawei con su P20 Pro. El fabricante destaca su triple cámara trasera y el tamaño máximo de las fotografías, 40 Mpx. Esta barbaridad no se consigue por defecto ya que el móvil ajusta las capturas a unos más decentes 10 megapíxeles. Entonces, ¿para qué promocionar que tu móvil genera imágenes tamaño cartel si luego no las hace a dicho tamaño? Porque los Mpx tienen ventajas añadidas:
- Permite aplicar zoom a la imagen. Dado que el sensor captura un área enorme, es capaz de fotografiar una zona más pequeña sin que el tamaño sea reducido. Sería una especie de zoom digital sin perder nitidez (en realidad es un recorte).
- Puedes destacar una zona de la foto ya hecha sin perder calidad. Imagina que quieres compartir una imagen pero solo necesitas parte de ella. Si le aplicas un recorte a una foto de 40 Mpx la imagen compartida seguirá manteniendo nitidez y detalle.
La calidad de una fotografía no la aporta su tamaño, sí otros factores que son mucho más determinantes. La apertura del objetivo es importante: cuanta más luz entre en el sensor mucho mejor. En este sentido, también influye la calidad de dicho sensor: no es lo mismo uno económico que el último IMX de Sony. El procesador dedicado al tratamiento de la imagen y el sonido (DSP) también es muy importante: cuanto mejor sea el SoC de tu móvil mejor serán sus fotos.
Otro punto destacable es el procesado de las imágenes. De hecho, este punto es uno de los más importantes a la hora de hacer buenas fotos con el smartphone: dos móviles pueden usar el mismo sensor fotográfico, idéntico DSP e, incluso, la misma apertura y sacar fotos con calidades muy distintas. En este sentido, el esfuerzo en software que hacen los fabricantes es lo que finalmente determina la calidad de las imágenes, solo hay que fijarse en los Google Pixel. Y con una cámara trasera simple.
Más cámaras no aseguran mejores fotos
Si la carrera por los megapíxeles ha aflojado, hay otra que se recrudece: aumentar el número de cámaras. Empezamos con una delante y otra detrás, el LG V10 colocó dos delante, se popularizó la doble cámara trasera, móviles como el HTC U12+ colocaron dos delante y dos detrás… Y luego llegó Huawei para montar un triple sensor trasero. Este movimiento parece que creará tendencia: los rumores apuntan a un Samsung Galaxy S10 con triple cámara.
Añadir cámaras no consigue mejores fotos, sí efectos poco habituales: modo retrato, zoom…
¿Multiplicar los sensores consigue mejores fotografías o es un simple argumento de marketing, como multiplicar los megapíxeles hasta el infinito? Está claro que tener doble cámara no garantiza buenas fotos porque ahí están los Google Pixel sacando fotografías increíbles con solo un sensor. Como destacaba en el apartado anterior, el software de procesado es la clave para tener una excelente cámara móvil.
¿Cómo elegir la mejor cámara cuando estés buscando nuevo smartphone? Debes fijarte en lo siguiente:
- Averigua los sensores que monta el móvil y asegúrate de que ofrecen calidad y altas prestaciones.
- Por lo general el precio suele asegurar una buena cámara móvil; sin que esto sea razón para que en la gama media no haya smartphones de gran calidad en fotografía.
- Fíjate en la apertura de los objetivos: cuanto mayor sea más luminosas serán las imágenes (la luz es clave).
- Fíjate en el tamaño de los píxeles. Este es otro detalle que va en consonancia con la apertura: cuanto más grande sea el tamaño de cada píxel más luz capturará el conjunto del sensor.
- Asegúrate de que el móvil incluye un buen modo retrato. No es algo determinante, pero sí se trata de una función que agradecerás.
- El estabilizador de imagen óptico es importante: elimina temblores de las fotos, especialmente de noche.
- Investiga y contrasta varios análisis del móvil para averiguar si monta une buena cámara.
- Debe incluir el guardado en RAW. Gracias a esto podrás editar las fotos tal y como el sensor las capturó.
- El modo manual o pro es imprescindible. Android tiene excelentes aplicaciones móviles de fotografía, la mayor parte de ellas viene de serie en los smartphones. Huawei tiene un modo manual muy bueno, por ejemplo. También LG, Asus…
- La Inteligencia Artificial es un elemento recién llegado a las cámaras que puede mejorar las fotografías. El Google Pixel es una buena muestra.