Aunque parezca que elegir un buen móvil es una tarea sencilla, cada día millones de personas toman la decisión errónea al comprar su nuevo smartphone. Te contamos por qué ocurre y algunos trucos para aconsejar a aquellos que no sepan qué móvil comprar.
Seguro que más de uno tenéis algún conocido que usa con frecuencia su móvil, pero que sin embargo no tiene demasiada idea. A menos que haya tenido suerte o se haya comprado el móvil más caro del mercado, seguramente tenga un móvil que le da menos de lo que necesita. Y todos sabemos cual es la causa.
Cada vez hay más teléfonos, y eso dificulta la elección
Elegir un móvil es cada día una decisión más difícil. Ya no existen dos o tres fabricantes que se reparten el pastel con un teléfono diferenciado en cada precio. Ahora hay decenas de fabricantes, cada uno con decenas de modelos.
Realmente es un problema a la hora de comprar un móvil, y es que la única forma de acertar en la compra es estando al tanto de la actualidad, algo que solo está en la mano de unos pocos privilegiados tras horas y horas de lectura. ¿Qué ocurre si necesitamos un buen móvil y no estamos al tanto de todo?
Te vas a confundir, y no una vez, sino muchas. No solo existen varias gamas de precios, sino que además en cada gama se acaban mezclando modelos nuevos con terminales de años anteriores. Los nombres en la mayoría de ocasiones no hacen más que llevarnos a la confusión. Que si P9 Lite o P8 Lite de 2017, que si Moto G4 Play o Moto G3. Galaxy A5 de 2016 o Galaxy A3 de 2017. Y así nos podríamos pasar todo el día.
Fichas técnicas incomprensibles o teléfonos que se solapan entre ellos son un problema a la hora de elegir
No solo las operadoras deciden tu nuevo teléfono
Hace un tiempo hablamos del gran poder de decisión que ejercen las operadoras a la hora de adquirir nuestro teléfono. Sus comerciales reciben comisiones extra por vender a los clientes un determinado teléfono. Pues no solo es cosa de las operadoras, sino que también sucede en las grandes superficies, donde los carteles nos dicen que nos olvidemos de todo y elijamos ESE TELÉFONO. Casualmente en la mesa en la que están los modelos de prueba solo un par de terminales están en óptimas condiciones para que cualquiera los pruebe. ¿Te suena?
Las campañas de marketing, los nombres vistosos y los comerciales tienen más peso que las especificaciones
No nos gusta que la decisión de si comprar un teléfono u otro acabe recayendo en la tienda de turno. Y vamos a explicarnos.
Realmente si que es bueno que en cada tienda exista una persona que nos recomiende qué teléfono debemos comprar. Como ya hemos mencionado, existe un océano de alternativas y son pocas las personas que podrán saber con exactitud cual teléfono les conviene más.
El problema radica en que es al final el departamento de marketing quien decide qué es lo que se vende y que es lo que no se vende. No, esa chica tan simpática que te ha recomendado el LG Fino no lo ha hecho porque sea el teléfono que mejor se adapta a tus necesidades, sino su comisión por venta.
¿Entonces es malo el marketing? Tampoco lo creemos. Al final si quieres vender un producto, es necesario que lo conozcan tus clientes. En Internet vemos que la publicidad es ligeramente más transparente. Ya sea por encontrarnos un banner promocionado por en tiendas como Amazon, o incluso en los artículos patrocinados que se pueden leer en la mayoría de blogs.
Los artículos patrocinados venden solo las bondades, pero sabemos explícitamente que es publicidad
La gran mentira de los números
Los test de rendimiento, los gigahercios, los megapíxeles, los 4K, los miliamperios. Cuántas veces nos hemos dejado guiar por todas estas mentiras del mercado, y cuanto daño han hecho.
Muchos usuarios se dejan llevar por los números a la hora de adquirir su nuevo móvil, especialmente en las gamas altas. Si un teléfono barato saca una buena puntuación en Antutu, se convierte automáticamente en una maravilla, y si un teléfono que cueste el doble saca la misma puntuación ya se convierte automáticamente en una estafa. Esto los fabricantes lo saben, trucando sus móviles para conseguir una mejor puntuación.
Miramos la puntuación, vemos que tienen los mismos megapíxeles, la misma resolución, y el modelo barato tiene más mAh de batería ¡Los grandes fabricantes nos engañan! No siempre es así.
Los números son solo una estimación que no siempre refleja la realidad
No hay forma de medir lo que importa
Como ya hemos comentado, no siempre hay que confiar en los test de rendimiento, ni tampoco en los números de la ficha técnica. Los números pueden hacer que nos hagamos a la idea sobre si un móvil es bueno o malo, pero la experiencia final es la que manda, y en ella descubrimos si realmente merece la pena o no adquirir un teléfono.
Sucede con mucha frecuencia que teléfonos con una ficha técnica espectacular acaben provocando una experiencia inferior a la que nos esperábamos, y eso se debe a que el sistema no se encuentra optimizado, mientras que a veces también nos encontramos con sorpresas de teléfonos, que con especificaciones modestas consiguen un buen rendimiento.
Y la optimización del sistema no es el único punto intangible que nos encontramos. El diseño y la calidad de construcción ayudan a que un teléfono se sienta cómodo en la mano. El procesado de imagen influye más en la calidad de las fotos que los megapíxeles y la calidad de un panel nos dice más que su resolución. Es un problema que en un mercado tan saturado, no exista forma de diferenciar los factores más cruciales de un móvil.
La única forma de determinar exactamente si un teléfono es más de lo que dicen sus números es leer varios análisis que lo contrasten
Aprende a aconsejar con estos trucos
Si entiendes algo de tecnología, seguramente algún conocido te haya preguntado sobre qué móvil comprar. En un acto de buena fe, preguntas a tu conocido acerca de su presupuesto. Seguramente en algún momento de la conversación, empiece a sentirse perdido.
O quizás seas tú; querido lector; el que se encuentra en este dilema. No quieres problemas, buscas soluciones, y toda esa parafernalia de los Snapdragon es algo que ni te va ni te viene. ¿Cómo elegir un móvil que vaya a cumplir nuestras exigencias? ¿Cómo ayudar a ese conocido cuyo interés es mínimo?
Estos son los consejos que mejor resultado nos han dado. Basta con coger tres consejos cualquiera de esta lista, que prácticamente cualquier usuario podrá vivir dignamente con su nuevo Android.
- Que tenga 3.000mAh de batería: Si, hemos dicho que los números mienten, pero esta medida suele darnos una garantía.
- Mucha memoria: Conocida como almacenamiento. Nunca menos de 16GB, 32GB.
- Mira las valoraciones de Internet: No hablamos de reviews, sino simplemente de las opiniones. Si un móvil es un superventas y tiene buena valoración, seguramente esté bien.
- Ejerce tu derecho como consumidor: Infórmate sobre los plazos de devolución. No hay nada como probar unos días un teléfono y devolverlo si no te gusta.
- Más grande no es sinónimo de mejor: Especialmente en los precios bajos. Y los números no importan tanto. Los megapíxeles de la cámara tampoco dicen nada.
- Que sea un teléfono nuevo: Incluso si las especificaciones parecen peores. A veces los comerciantes intentan deshacerse de móviles antiguos y nos lo cuelan.
- No aceptes el primer móvil que te ofrezcan: Seguramente tenga trampa.
- Llévate a un conocido que entienda: Será tu abogado tecnológico. Eso sí, ya que se toma la molestia, invítale a merendar.