El ser humano suele tener cierta tendencia a vincularse emocionalmente con elementos o sucesos que en teoría no le son especial o directamente beneficiosos. Cuando lo hacemos con un grupo de personas para protegernos o con una religión para tranquilizarnos vemos que aporta un bien directo, más o menos real.

Sin embargo hay otros elementos más lúdicos, más o menos importantes, como los deportes, donde vemos una simbiosis con un equipo o en la política, donde se ve algo similar.

Esto ha llegado hasta el mundo de la tecnología y no podemos obviar que la que más fans tiene, o la que más tiempo lleva teniéndolos, es Apple. Pero a medida que las redes de comunicación nos permiten agruparnos de forma sencilla, más y más grupos surgen, y también pasa entre los aficionados a la tecnología, y en especial a los que adoramos los teléfonos móviles.

Hace unos días tuve la oportunidad de charlar con Samuel, De XatakaMovil y con Doalvares, de BetaPrivada, sobre diversos temas, delante de un café y uno de los temas que comentamos era el de los fans de cada marca. Hablando de los fanboys y de cómo algunos usuarios de Apple parecían no ser críticos con las cosas malas, muchas o pocas, de la empresa, Doalvares mencionó un término que me maravilló: Miboys, los nuevos fans de Xiaomi.

¿Son los Miboys una copia de los fanboys?

En los últimos años la empresa china ha creado toda una marca y una comunidad en torno a su identidad, desde el Mi bunny, la simpática mascota que vemos en iconos y peluches hasta productos de gran calidad a un precio muy reducido.

Xiaomi o la mejor relación calidad precio

Xiaomi ha lanzado no solo un cada vez más grande catálogo de smartphones o productos relacionados como baterías o auriculares sino también cosas que no tienen nada que ver como maletas, bolsos o alfombrillas para ratones. Pero si hay algo en común, es que son todos baratos para lo que ofrecen.

Esto ha posibilitado que la elección de otras marcas por parte del consumidor sea vista como un error por los fans más acérrimos de la empresa china, que critican que alguien pueda pagar más por un producto bajo su criterio peor que la alternativa de Xiaomi.

Los actuales problemas de Xiaomi

Además como cualquier fan algo extremo no se aceptan bien las críticas que se les hacen, como la dificultad para algunos perfiles de usuario de gestionar las configuraciones de MIUI, el problema añadido de la garantía o de la gestión de aduanas si importamos un terminal de esta marca (al igual que sucede en muchas otras) o simplemente los comentarios sobre nuevos lanzamientos.

El Xiaomi Mi MIX podría, o no, ser un punto de inflexión para la marca

Hace unos días se presentó el Xiaomi Mi MIX, un terminal que fascinó a todo el mundo porque introducía más innovación de la que jamás había metido Xiaomi en un móvil, y además tenía una estética realmente fresca La cuestión es que no era el primero en tenerla, ya que hace dos años Sharp presentó el Sharp Aquos Crystal, un terminal que podríamos poner como el antecesor de este MI MIX.

A lo largo de muchas publicaciones online, redes sociales y vídeos de Youtube los más fans de Xiaomi se han dedicado a criticar e insultar a cualquiera que no osara decir que Xiaomi había dado un golpe encima de la mesa y que estaba por delante de cualquier rival.

Esta necesidad de formar parte de algo tan innatamente humana no es mala per se, pero sí lo es no ser capaz de ver la realidad de una forma más objetiva. Xiaomi ha dado un gran paso adelante, como en su momento lo dio Apple con el iPhone, LG con el sistema modular o Motorola con los móviles de concha. Algunos tuvieron éxito y otros no. Quizás Xiaomi tenga éxito o quizás no, pero si algo es seguro es que tendremos que esperar a verlo.

Pese a todo, me encanta Xiaomi

Lo más curioso es que esto lo escribo desde un sillón al lado del cual hay una batería USB de 10.000 mAh de esta marca, mientras escucho música en los Piston 3 desde el Xiaomi Mi 5s Plus y me planteo si descansar para echar una partida usando el Xiaomi Gamepad en el Xiaomi Mi box 3 que hay junto al televisor.

Y pese a todo eso, no soy un Miboy.