Cada vez que aparece por sorpresa una versión resistente al agua de algún móvil, el país de destino es siempre el mismo. ¿Dónde va a salir la versión resistente al agua del LG V20? En Japón; ¿qué país ha recibido la versión resistente al agua del Xperia X Compact? Japón; ¿dónde ha salido el único móvil Android One con resistencia al agua? Japón, Japón, Japón…
¿Qué está ocurriendo en el país nipón? Lo más fácil sería pensar que es una cuestión de clima, que en Japón llueve tanto que la resistencia al agua es una característica imprescindible en un dispositivo tan portátil como un teléfono.
La realidad es que, a no ser que vivas en la isla de Yakushima -donde sus habitantes dicen con tono jocoso que llueve 35 días al mes-, Japón no es ni de lejos uno de los lugares más lluviosos del mundo. En términos absolutos, Japón ocuparía la posición 46 de los países que mayor cantidad de lluvia registran a lo largo del año (según datos de 2008), seguido de cerca por Suiza (nº54), Noruega (nº62) o el Reino Unido (nº70).
A excepción de una pequeña isla, en Japón no llueve mucho más de lo que lo hace en Reino Unido, Noruega o Suiza
El problema con el agua en Japón lo tienen en sus propias casas
En Japón, al enemigo lo tienen en casa. Algo tan simple como darse un baño difiere por completo entre el concepto de «bañarse» que tenemos en Europa y el que, allá por Oriente, se inculca a los japoneses desde que son niños. Tan diferente es, que su estudio da para un análisis de 55 páginas en el que se desengranan todos y cada uno de los tipos de baño que existen en Japón.
En Japón, la bañera es un lugar sagrado: tiene que estar separada del aseo, y normalmente es independiente de la ducha
Pero si nos centramos en el concepto de darse un baño propiamente dicho, lo de Japón directamente es de otro mundo. Tal es el respeto que existe por este momento de intimidad, que en muchos casos los japoneses dedican exclusivamente una estancia entera a la bañera; de hecho, normalmente no permiten ni que la ducha comparta el mismo espacio que la bañera. La ducha puede estar en la misma estancia, pero incluso en las casas más pequeñas se da el caso de que la alcachofa de la ducha es independiente de la bañera.
Agua + fuego + sales = la purificación tras un día de trabajo
En Japón a la bañera se entra ya duchado, y la finalidad del baño no es la higiene, sino la relajación
El baño es el momento más importante del día a día de cualquier japonés. Es el momento en que desconectan del estrés de un día de trabajo, y se trata de un ritual de purificación que en muchos casos tiene unas fuertes raíces en el sintoísmo, una religión de origen japonés. De hecho, los japoneses están lejos de bañarse por una simple cuestión de higiene.
Antes de entrar en la bañera, el proceso que sigue cualquier japonés pasa primero por una ducha que sí está estrictamente relacionada con la higiene. Pero en la bañera han de entrar ya duchados, y cuando se meten en el agua lo hacen con la única intención de relajarse. Estos rituales se pueden llevar hasta extremos insospechados, pero dentro del hogar el ritual en cuestión se reduce a una bañera con agua muy caliente y algún tipo de sales de baño.
Pero no todo es meditar: algo más tendrás que hacer en la bañera para entretenerte
Dedicar un día a la meditación está bien, dedicar dos, también… pero, con el mundo multitarea que nos ha tocado vivir, tarde o temprano nos acabaríamos subiendo por las paredes si tuviéramos que pasar todos los días una hora pensando en blanco. A algunos japoneses les ocurre lo mismo, y alrededor de la bañera existe todo un mercado de gadgets relacionados con la tecnología.
Podemos encontrar desde el soporte inflable para móviles que hace feliz a cualquier japonés hasta las típicas fundas transparentes impermeables, pasando por móviles resistentes a baños con jabón y agua caliente. ¡Hasta se comercializan fundas resistentes al agua para leer libros en la bañera!
Por supuesto, el móvil es un compañero muy fiel de cualquier japonés en la bañera. Según un estudio publicado en 2013, entre el 90 y el 95% de los móviles que se venden en Japón tienen resistencia al agua. La cifra probablemente es algo exagerada, pero nos permite hacernos una idea de la magnitud que alcanza el uso del teléfono en la bañera.
«En Japón no puedes vender un móvil si no es resistente al agua», dijo un alto cargo de Panasonic allá por el año 2012
Que un móvil que se vende en Japón se puede utilizar en la bañera es todo un reclamo publicitario para las masas. En 2012, el Daily News anunciaba el lanzamiento del Panasonic Eluga con el titular de «Japón crea un móvil para mujeres a las que les gusta hablar en la ducha«. Era un móvil Android normal y corriente, pero tenía la peculiaridad de que incorporaba certificado IP57, y se podía sumergir hasta a un metro de profundidad durante 30 minutos.
Incluso, si nos remontamos un poco más hacia atrás en el tiempo, allá por el año 2005 fue precisamente la compañía japonesa Casio la que colaboró con LG para dar vida al que se considera como el primer móvil de la historia moderna resistente al agua: el Casio Canu 502S. Era un móvil de tapa, tenía -atentos al dato- una cámara de 1,3 megapíxeles, incorporaba nada menos que un reproductor MP3 y era capaz de resistir hasta 30 minutos debajo del agua. Ideal para darse un baño, vaya.