El mercado de la telefonía móvil se alimenta de diversas tecnologías que nos permiten tener una mayor variedad de características en los terminales disponibles. Existen distintos tipos de procesadores, distintos tipos de cámara, y por supuesto, distintos tipos de pantalla.
Si hablamos de pantalla, existen dos claros favoritos en las tecnologías que las componen, LCD con tecnología IPS y AMOLED. Cada una tiene sus propias características, y aunque en los últimos años las IPS han sido las que han dominado el mercado, cada vez más fabricantes están planteándose el cambio a AMOLED. ¿Por qué sucede esto? ¿Están perdiendo las pantallas IPS LCD terreno frente a las AMOLED?
El ejemplo más reciente de este cambio de tendencia lo encontramos en OnePlus. El OnePlus 2 presumía de un panel IPS LCD, mientras que el nuevo OnePlus 3 apuesta por la tecnología de Optic AMOLED. Y en la competencia el asunto no es muy diferente: Galaxy S7, Super AMOLED; Moto Z, AMOLED; Redmi Pro, OLED… se salvan modelos como el LG G5 o el Sony Xperia X Performance, ambos con paneles IPS LCD.
La calidad de las pantallas AMOLED ha evolucionado con el tiempo
El primer motivo por el que algunos fabricantes se han pasado del IPS al AMOLED es la calidad de imagen de la pantalla. Hace unos cuantos años, la calidad de los paneles AMOLED dejaba bastante que desear, con niveles de brillo no muy altos y colores que además de no ser muy reales, se degradaban con el tiempo (las pantallas azuladas o verdosas de los primeros Galaxy S, por ejemplo). Además, por el tipo de subpixeles que utilizaban en sus matrices pentile, ofrecían menor definición que sus rivales en paneles de similar resolución.
Con el paso del tiempos esto ha cambiado bastante. Las resoluciones que hemos alcanzado hacen que no importe que cada píxel tenga menos subpíxeles, las pantallas no se degradan (o al menos no se degradan con tanta facilidad) y los colores blancos (principal punto negativo de las AMOLED) han llegado a un nivel de calidad aceptable, por no hablar de que los niveles de brillo ya no se encuentran tan por debajo de la competencia.
Samsung lleva ya varios años llevandose el premio a mejor pantalla del año en sus Galaxy S y Note según DisplayMate, y eso acaba siendo un reclamo para que el resto de fabricantes aspiren a lo mismo. Al fin y al cabo, los fabricantes más importantes marcan el ritmo de trabajo de muchas compañías más pequeñas.
Los colores intensos conquistan al mercado
Las pantallas AMOLED producen colores intensos, hasta tal punto que a muchas personas les parecen saturados. Que las pantallas no ofrezcan colores reales puede parecer un problema, pero al público general no parece importarle. La realidad, nos guste o no, es que a cada vez más personas les gustan las pantallas AMOLED, y los fabricantes que son conscientes de ello buscan ofrecérselo al público a pesar incluso de la crítica que puedan despertar entre los medios especializados.
Nuevas características en las que AMOLED sale ganando
Una de las principales características estrella de las pantallas de naturaleza OLED (en las que se incluyen las AMOLED) es que es capaz de iluminar de forma individual cada píxel. Si a eso le sumamos que consigue el color negro simplemente apagando el píxel, lo que tenemos como consecuencia son unos colores negros de gran calidad.
Este tipo de tecnología ha permitido que -por ejemplo- los relojes inteligentes dispongan de modos de bajo consumo o incluso que algunas tecnologías lo aprovechen para tener innovadoras pantallas de bloqueo como el Active Display de Motorola, Ambient Display de Android o los modos Always On. También podemos ver cómo fabricantes de la talla de Samsung les han dado otro tipo de uso con los modos de ahorro de energía, aprovechando las características del panel para convertir la pantalla en blanco y negro.
La realidad virtual de alta gama
La realidad virtual cada vez está más cerca de llegar al público general. Las HTC Vive y Oculus Rift son ya un producto más del mercado, y muchos fabricantes quieren apuntarse a esta fiesta. Actualmente todos estos dispositivos de realidad virtual de gama alta utilizan paneles AMOLED (en el caso de las Vive un panel con resolución de 2.160 x 1.200 píxeles, por ejemplo), lo que revela que este tipo de paneles ofrecen una calidad de imagen que es mejor para esta tecnología (seguramente teniendo relación con los colores negros más puros).
Y ya con la llegada de Daydream para Android, todo quedaría a favor de las pantallas AMOLED. Daydream es la plataforma de realidad virtual de alto rendimiento para Android. En la actualidad parece que pocos teléfonos del mercado son compatibles con Daydream, y viendo que el Nexus 6P (pantalla AMOLED) es provisionalmente el único móvil compatible con la plataforma, no resulta descabellado pensar que en este proyecto Google solamente admitirá en el futuro móviles que incorporen un panel de estas características.
Cada vez es más barato producir pantallas AMOLED
Pero quizás el factor más determinante para que todo el mundo quiera ahora a las AMOLED no tenga que ver tanto por la calidad o sus funcionalidades, ya que por muy buenas que sean, si el coste de producción resulta demasiado elevado tal vez no compensen lo suficiente. Durante años esa ha sido la principal causa por la que solo Samsung (principal fabricante de este tipo de paneles) apostase por ellos.
Pero el pasado mes de marzo algo cambió, y es que por primera vez en la historia, las pantallas AMOLED se convirtieron en más baratas de producir que los paneles LCD, un hecho que ha terminado de despertar todas las dudas sobre el futuro de los paneles IPS en el mercado de la telefonía móvil. Y vosotros, ¿qué opináis sobre el duelo entre IPS LCD – AMOLED?