Hay quienes están completamente en contra de las patentes y otros que están a favor. Aquí no vamos a entrar en ese debate. Las patentes son el método usado por las empresas para que algo desarrollado por ellos no pueda ser usado por otras marcas libremente sino que se tenga que pagar un porcentaje por producto vendido a la empresa dueña de la patente.
Google tiene una buena biblioteca de patentes en su haber. Adquiere proyectos con una futura patente entre las manos para apoyarlas y convertirlas en una realidad. Incluso compra empresas por sus patentes, como ocurrió con Motorola. Patentes que intentan luego llevar a cabo y evolucionar. Pero claro, también con una finalidad capitalista: conseguir dinero.
Google contra los ‘Patent Trolls’: segundo asalto
Hay muchas empresas que lo único que hacen es registrar patentes para luego cobrar a otras empresas por su uso. Así se limita el avance de la tecnología ya que el resto de marcas no pueden recurrir a cierta patente porque la empresa dueña ni la cede para su uso a cambio de una suma de dinero. Pero es que tampoco usa la patente para crear productos, todo muy raro. Los llamados «Trolls de las Patentes«. Google, con su enorme colección de patentes, se puede permitir eliminar a estos «trolls» de una manera muy interesante.
Google ha aceptado a 50 startups y desarrolladores para que reciban patentes completamente gratis. De este modo, se ayuda a estas empresas a despegar para que avancen en sus proyectos con una buena patente en sus manos. En concreto, Google ofrecerá de tres a cinco clases de patente con respecto al negocio de la empresa que la va a recibir. La empresa podrá elegir 2 de ellas. Además tendrá acceso a la base de datos de patentes de Google, pero sólo a las compradas a otras empresas.
Google ha dejado muy claro que la licencia de la patente sigue siendo de su propiedad: con este movimiento no están regalando sus patentes, están permitiendo que otras compañías más pequeñas las utilicen. Además, la empresa ha de firmar un ‘acuerdo de permanencia’ de dos años. También recalcan que la empresa no puede usar la patente con fines lucrativos sino a modo de defensa contra los «Patent Trolls». En caso de infringir las normas de Google, habrá un juicio y acciones legales.
Una propuesta muy bondadosa por parte de Google
Gracias a esta propuesta de Google, muchas empresas que no pueden terminar de nacer por culpa de las patentes de otras empresas, pueden formarse y llegar a formar una empresa estable. Un acto muy noble por parte de Google que aunque permitan el uso de sus patentes a otras empresas emprendedoras, la patente sigue siendo suya.
Pero la lucha contra estas empresas que impiden el desarrollo de otras no sólo está aquí, sino también en la posibilidad de vender tus patentes directamente a Google y no a una empresa que tienes fines ‘malvados’.
Vía | TechCrunch