Café Jazz el Destripador
Luis Artigue
Pez de Plata. Oviedo, 2020. 292 páginas. 21,90 €
Autor de novelas como Club La Sorbona (2013), galardonada con el Premio Miguel Delibes, o Donde siempre es medianoche (2018), Premio Celsius, Luis Artigue (León, 1974) demuestra una vez más su talento y ambición al abordar la vida de Miles Davis en un relato-biopic ilustrado por Ángel de la Calle, y que retrata también a otro genio del jazz a y la autodestrucción como Charlie Bird Parker, que era, escribe, “el riesgo, la locura, el precipicio”. Con él y con Dizzy Gillespie, Davis descubrió la alegría de compartir escenario con genios desesperados como él, de crear magia con cada nota, pero también la desolación y locura de las drogas en un ambiente marcado por la posguerra, la segregación racial y el miedo.
No faltan, claro, los mafiosos, sus chicas, los todopoderosos representantes de las discográficas, el dinero fácil ni la certeza de que, al final, Miles Davis eligió ser grande por encima de ser feliz, ya fuese en Saint Louis o en los tugurios de Harlem en los que triunfó. El otro plano de la historia se desarrolla en paralelo a través de las sesiones de exorcismo a las que se somete el músico para intentar curar su drogadicción y que le llevan al París de Baudelaire. Un París muy distinto del que había disfrutado en 1949, cuando conoció a Sartre, Picasso, Boris Vian y Juliette Gréco, con la que viviría una apasionada historia de amor.