Una imagen del montaje de Hércules en la 61 edición del festival de Mérida
En esta edición de 2015 ha alcanzado 94.000 espectadores y un superávit de taquilla de 525.000 euros
El Festival de Mérida ha logrado por tanto un superávit de taquilla cercano a los 525.000 euros en su 61 edición, lo que supone un récord absoluto para esta cita que contribuirá a saldar la deuda que arrastraba el festival de años anteriores ya que el 85 por ciento se reintegrará a la Junta de Extremadura.
Así, la recaudación total del Festival de Mérida en esta 61 edición ha alcanzado 1.924.686,30 euros, lo que representa un 7,98 por ciento más que en 2014, según los datos que ha aportado el director del certamen, Jesús Cimarro, en rueda de prensa acompañado por el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, y el alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna.
En su intervención, Jesús Cimarro ha explicado que este año 2015 se ha "conseguido un hito más, los datos hablan por si solos del estado de bonanza del festival, que cada año va a más", por lo que se ha mostrado dispuesto a seguir dirigiendo el certamen en 2016, aunque ha aclarado que es algo que deberá decidir el consejo rector.
A juicio de Cimarro, la "lectura" de estos datos es que se ha "conseguido crear la necesidad de acudir a Mérida en verano para asistir a un espectáculo teatral", una situación a la que "ha contribuido de manera crucial la tan controvertida gala de los Premios Ceres, que aporta aún más vistosidad y difusión nacional al festival".
También ha crecido en 2015 la repercusión que ha tenido el Festival de Mérida en los medios de comunicación, donde de junio a agosto, el certamen "ha generado 7.500 noticias" en papel, radio, televisión y digitales, y cuya valoración económica ha cifrado en más de 37 millones de euros.
"No es casualidad esta evolución que ha tenido el festival", ha destacado Jesús Cimarro, quien ha señalado que en los cuatro años que lleva al frente del certamen, la dirección del certamen "ha aportado 1.628.000 euros para pagar la deuda que existía en el festival". Ha resaltado además que "no sólo se ha conseguido que no se genere deuda en el Festival, sino que sea rentable económica, social y culturalmente".
Cimarro ha recordado que, aunque gestionado por una empresa privada, el Festival de Teatro Clásico de Mérida "es público", por tanto "tiene los objetivos claros de lo que es un festival público, y los recursos que genera tienen que volver a lo público, es decir, a todos los ciudadanos extremeños".
Por su parte, el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha valorado que los resultados de la 61 edición del Festival de Teatro Clásico de Mérida son "una historia de éxito porque las cosas se han hecho bien", por lo que el certamen "ha sido un verdadero éxito". "Lo que funciona, funciona, y esto funciona bien", ha señalado Fernández Vara, quien ha reiterado que este certamen en un "éxito", que ha querido compartir con el gobierno anterior.
Así, del superávit que recibirá la Junta de Extremadura procedente de la taquilla del festival, Fernández Vara ha avanzado que se destinarán 100.000 euros para que los grupos de teatro extremeños puedan salir al exterior.
Otro de los puntos abordados en la rueda de prensa ha sido acerca de la continuidad y el formato de los Premios Ceres en 2016. "Mañana empezamos a hablar", ha aseverado Vara a este respecto, ante lo que ha añadido que "las cosas tienen su ciclo y probablemente hay que hacerlas de otra manera, pero nunca un instrumento como este puede ser objeto de enfrentamiento visceral".
"Nos sentaremos y veremos cuáles son las mejores opciones posible, siempre sobre la base de que el esfuerzo no recaiga sobre los presupuestos públicos", ha aseverado Fernández Vara. Por su parte, Jesús Cimarro ha coincidido también que "hay que sentarse y hablar" sobre este tema, y ha señalado que en la actualidad se "cierra una etapa, que se ha iniciado con un gobierno, que ha continuado en esta edición con otro gobierno, y lógicamente hay que sentarse y hablar con todos los planteamientos".