Con El agente topo, Maite Alberdi conquistó los corazones de medio mundo a través de un ingenioso documental que servía tanto de hondo retrato documental del cruel abandono que sufren muchos de nuestros mayores en los últimos años de su vida como de delicioso divertimento que jugaba tanto al thriller de espías como a la comedia. Pero, en la película, ella misma actuaba de demiurga para mover los hilos narrativos, introduciendo a un simpático abuelito en una residencia de ancianos para que investigue unos posibles abusos por parte del personal.
Sin duda, La memoria infinita es un largometraje más convencional –aunque sin voz en off ni bustos parlantes–, pero igual de emotivo. Se trata de mostrar la realidad de una pareja que se debe enfrentar al Alzheimer, y Alberdi no tiene miedo de mostrarlo todo, tanto los momentos en los que la vida y la esperanza, las complicidades y los cuidados, se abren paso, como los episodios de angustia y dolor, necesarios para visibilizar el drama de una dura enfermedad. Pero es la humanidad y el amor de sus protagonistas lo que resplandece, por muy terrible que sea ver como la memoria se desvanece.
Por otro lado, el documental también funciona como un relato de la historia reciente de Chile, perfectamente hilado por la directora a través de videos caseros y del abundante material de archivo existente tanto de Augusto Góngora, uno de los más célebres periodistas de Chile, encargado de revelar el horror perpetrado por la dictadura militar, como de Paulina Urrutia, actriz y ex ministra de Cultura.
Por último, Alberdi, una directora que sabe cómo borrar la distancia entre el espectador y sus personajes, encuentra un final poético y desgarrador, que quedará, al menos, en la memoria del cine.
La memoria infinita
Dirección y guion: Maite Alberdi.
Intérpretes: Paulina Urrutia y Augusto Góngora.
Año: 2023.
Estreno: 12 de enero