Este miércoles, 2 de agosto, comienza el Festival de Cine de Locarno, en Suiza, uno de los más prestigiosos del mundo en el campo del cine de autor y experimental. España estará representada en el Concurso Internacional, la sección competitiva principal, por Laura Ferrés (Barcelona, 1989). La directora catalana, que fue premiada en los Goya y en Cannes por su corto Los desheredados, compite por el Leopardo de Oro con su primer largometraje, La imatge permanent (“La imagen permanente” en catalán), que tendrá su estreno mundial en el festival.
La película es una coproducción franco-española con guion de Ferrés y el reconocido director Carlos Vermut (Mantícora, Quién te cantará, Magical Girl). Interpretada por Rosario Ortega, Saraida Llamas, María Luengo, Claudia Fimia, Mila Collado y Dolores Martínez, La imatge permanent sigue los pasos de Carmen, una directora de casting que tiene la misión de encontrar a una persona “normal” para participar en una campaña política. Durante su búsqueda, conoce a Antonia, una vendedora ambulante, con la que tiene más cosas en común de lo que parece.
Laura Ferrés se graduó en dirección de cine en la ESCAC de en la especialidad de dirección en la Escuela Superior de Cine y Audiovisuales de Cataluña (ESCAC). Además de dirigir, escribe crítica de cine y trabaja como directora de casting.
En la sección paralela Cineastas del Presente competirán otras dos películas españolas: Negu hurbilak (“Invierno cercano” en euskera, tomado de una canción de Mikel Laboa), del colectivo Negu (Ekain Albite, Mikel Ibarguren, Nicolau Mallofré y Adrià Roca); y On the Go (“Sobre la marcha” en inglés), de la venezolana María Gisèle Royo y la española Julia de Castro (artista multidisciplinar que, además de dirigirla, tiene un papel protagonista en la película).
El director artístico del festival, Giona A. Nazzaro, define la película de Royo y De Castro como una “salvaje comedia erótica”. Cuenta la historia de Milagros (Julia de Castro), de 37 años, que estira una juventud sin preocupaciones en sus últimos años de fertilidad mientras que Jonathan, de 24 años, busca consuelo a un abandono en su adicción a Grindr, la red social para ligar enfocada al colectivo LGTB. Milagros huye de su cita de inseminación monoparental. Jonathan provoca un encuentro con un amor de infancia. “La carretera y la amistad alivian la desorientación que provoca la engañosa libertad de principios de siglo XXI. Una delirante road movie llena de música, donde una misteriosa sirena con una corona mágica guiará el viaje”, informa la sinopsis.
Por su parte, Negu hurbilak trata sobre el conflicto vasco y cuenta la historia de una joven (interpretada por la actriz Jone Laspiur) de 25 años que debe dejar atrás su tierra. Sus responsables llevaron a cabo una campaña de búsqueda de financiación en la plataforma de micromecenazgo Goteo, donde explicaron: “Queremos relatar la vivencia de pérdida y dolor de uno de los ámbitos más desconocidos del largo conflicto cuyas consecuencias más dramáticas aún humean de entre sus ruinas: las miles de personas que tuvieron que huir de la persecución política”.
Además, en la sección Open Doors Screenings se presentarán dos coproducciones españolas dirigidas por directores de otras nacionalidades: Tiempos futuros (Perú, Alemania, España, México y Ecuador), dirigida por el peruano Víctor Checa; y El rezador (Ecuador, Colombia y España), dirigida por el ecuatoriano Tito Jara.
Otras películas en el Concurso Internacional
Además de Ferrés y su película La imatge permanent, la otra presencia hispana en el Concurso Internacional será la del argentino Eduardo Williams, que compite con El auge del humano 3, segundo largometraje del director, que ya ganó el Leopardo de Oro en la sección Cineastas del Presente y mención especial a la mejor película en la edición de 2016 del Festival de Locarno con su primer largo, El auge del humano. No se trata de un error: irónicamente, El auge del humano 2 no existe.
Como la primera parte, El auge del humano 3 es una película marcadamente experimental. Rodada casi en su totalidad con una cámara de 360º, muestra a varios grupos de personas que deambulan en un mundo lluvioso, ventoso y oscuro, que son transportados de un continente a otro. Pasan tiempo juntos mientras tratan de escapar de sus trabajos deprimentes y encontrar en qué gastar su tiempo. Definida como “una inquietante fantasía queer surrealista”, es una coproducción de Argentina, Portugal, Países Bajos, Taiván, Brasil, Hong Kong, Sri Lanka y Perú, y muestra personajes de todos estos lugares del mundo.
En el concurso internacional también figuran los franceses Quentin Dupieux, con Yannick, y Sylvain George, con Nuit obscure - Au revoir Ici, n’importe où (“Noche oscura - Adiós aquí, en cualquier lugar”); el rumano Radu Jude, con Nu astepta prea mult de la sfarsitul lumii (“No esperes mucho del fin del mundo”); el iraní Ali Ahmadzadeh, con Mantagheye Bohrani (“Zona crítica”); o el filipino Lav Diaz con Essential Truths of the Lake (“Verdades esenciales del lago”).
También lucharán por el Leopardo de Oro la griega Sofía Exárchou, con Animal; la portuguesa Leonor Teles, con Baan; el suizo de origen portugués Basil Da Cunha, con Manga D’Terra; el estadounidense Bob Byington, con Lousy Carter; los italianos Simone Bozzelli, con Patagonia, y Annarita Zambrano, con Rossosperanza.
Completan la lista de películas a competición The Vanishing Soldier (“El soldado evanescente”), del israelí Dani Rosenberg; Sweet Dreams (“Dulces sueños”), de Ena Sendijarevic, directora bosnia afincada en Ámsterdam; Stepne, de la ucraniana Maryna Vroda; y Nahtamatu Voitlus (“La lucha invisible”), del estonio Rainer Sarnet.
El impacto de la huelga
En las últimas semanas su agenda se ha trastocado, como ha ocurrido en otros festivales europeos (entre ellos, el recién clausurado Atlàntida Film Fest de Mallorca), por la huelga de actores y guionistas en Hollywood.
En este caso, el efecto más notable es la ausencia del actor británico Riz Ahmed. El protagonista de la premiada Sound of Metal ("El sonido del silencio"), en la que interpretaba a un baterista de rock que pierde la audición, que iba a recibir el premio Davide Campari, no viajará a la ciudad suiza, ya que la huelga obliga a los actores sindicados a suspender toda actividad profesional, incluyendo apariciones públicas relacionadas con su trabajo. Aunque Ahmed no estará físicamente en el festival, en él podrá verse su actuación en el cortometraje Dammi, que se estrenará mundialmente en la Piazza Grande, el escenario al aire libre del certamen, con capacidad para 8.000 personas.
“Apoyamos el debate constructivo entre las partes implicadas, y aceptamos con respeto las decisiones de nuestros invitados”, declaró el festival en un comunicado. La huelga, que ha paralizado la industria de Hollywood, fue convocada de manera simultánea por el sindicato de actores (SAG-AFTRA) y el de guionistas (WGA) ante la falta de acuerdo para un nuevo convenio colectivo con la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP). Se trata del primer paro simultáneo de actores y guionistas en las últimas seis décadas, y ha dejado en suspenso la producción, el rodaje y la promoción de películas y series.
Entre las demandas de los actores, destacan la exigencia de una regulación de la inteligencia artificial, mayores remuneraciones cada vez que una plataforma de streaming vende los derechos de una producción a un nuevo mercado y aumentos del salario mínimo.
Locarno se encuentra en el sur de Suiza, en el cantón de habla italiana del Tesino, al sur del país. Su festival de cine se celebra desde 1946 y a lo largo de su historia ha premiado a directores de la talla de Roberto Rossellini, John Ford, Jim Jarmusch y, recientemente, el español Albert Serra.
Por primera vez en su historia, el festival está presidido este año por una mujer, la empresaria y coleccionista de arte Maja Hoffmann. Su director artístico, desde 2020, es el crítico de cine Giona A. Nazzaro, que además es el delegado general de la Semana Internacional de la Crítica de Venecia, miembro del comité de selección del Festival de Rotterdam y miembro del comité de los Premios del Cine Europeo.