Sala Apolo, un 'falso' homenaje

La sala Apolo ha sido durante décadas uno de los puntos neurálgicos de la noche barcelonesa. Del mambo de los años 40 a la electrónica o el indie, muchas generaciones, estilos musicales y maneras de entender el ocio han pasado por ella y ahora, más de 70 años después, un falso documental de Marc Crehuet (director de El rey tuerto) le rinde homenaje en clave de humor. Se estrena estos días en el conocido festival de cine musical In-Edit y se titula Apolo. La juventud baila.

En lugar del clásico documental de testimonios mezclados con material de archivo, la película sigue la línea de lo que hizo recientemente Carlo Padial con Algo muy gordo al contar la historia de la sala de manera secundaria y poniendo el foco en el desastroso proceso de rodaje por parte de un realizador entusiasta y nostálgico de los buenos momentos que pasó en la Apolo en sus años mozos, mientras que lidia con el hecho de sentirse ya mayor para ir a discotecas. De hecho, Padial aparece en la película junto con otros colaboradores, como los periodistas Óscar Broc, Javier Blánquez y Pere Vall, DJ Coco, el dúo humorístico Venga Monjas o el director del Primavera Sound, Alberto Guijarro.

La cinta se estrena este sábado 27 en la edición barcelonesa del In-Edit y a partir del día siguiente podrá verse en la plataforma online del festival, In-Edit TV.

En la programación de esta nueva edición del festival In-Edit hay opciones para todos los gustos: la mayoría son documentales realizados en 2018 sobre artistas musicales (de Elvis a La Habitación Roja, de los Rolling Stones a Rubén Blades) o sobre sellos discográficos (como Trojan y Blue Note, emblemáticos adalides del ska y el jazz respectivamente), aunque también se repondrá la película de culto 24 Hour Party People, de 2002, y Cocksucker Blues, documental que recogió en 1972 la orgiástica gira de los Rolling Stones en Estados Unidos, y que fue vetado por la propia banda durante muchos años. Ahora solo se permiten contadas proyecciones al año, y esta en el In-Edit (el sábado 27), como era previsible, ya ha agotado las entradas.