Los hermanos Dardenne abrirán el festival en Madrid con Le gamin au vélo.
Postapocalipsis now. Los festivales de cine menguan por día. Algunos desaparecen, otros se rinden a lo comercial, otros bajan el nivel. Pero los hay que nacen defendiendo una idiosincrasia ajena a cualquier crack y que optan por adentrarse en los rincones menos lucrativos del séptimo arte, por mostrar aquellas películas que, aunque gozaron de las mayores loas en el circuito de certámenes, no llegaron a estrenarse en salas. Ese es el cometido de 4+1, cuya segunda edición se ha presentado este lunes y que se celebrará del 26 al 30 de octubre. Organizada por la fundación Mapfre de manera simultánea en Argentina, Brasil, Colombia, España y México, la cita se dedica a recuperar ese tipo de cine autor reciente, celebrado pero poco visto. Como señala Gonzalo de Pedro, uno de los cuatro programadores junto a Carlos Reviriego, Alejandro G. Calvo y Garbiñe Ortega, éxitos como el de El árbol de la vida, de Malick, demuestran que si este tipo de cine tuviera su hueco, accedería a él un público que va más allá del cinéfilo empedernido.La propuesta quiere, además, "celebrar la fuerza del cine como elemento compartido de enriquecimiento cultural" y reivindicar el "papel esencial de los festivales para sostener e impulsar la cinematografía artística". En este sentido, el equipo ha buscado, prosigue De Pedro, conciliar una programación que tenga "sentido en sí misma". Esto es, que sostenga un discurso sobre lo que está pasando dentro del cine contemporáneo, que exhiba películas que expliquen por qué derroteros camina. Por ejemplo, la selección de la presente edición incluye tres documentales, un peso que connota el auge de este género, que gana posiciones dentro del panorama internacional. Otras líneas del programa apuntan al "cine de autor que dialoga con los géneros" o al interés por ampliar la geografía, huyendo de la habitual tendencia localista de los festivales, destaca el programador.
Con una sede central cada año (la primera fue Buenos Aires; la presente, Ciudad de México) y tras los más de 8.000 espectadores que lo siguieron en 2010, el festival también tiene entre sus peculiaridades la de entregar un único galardón, el Premio el Público 4+1 a la Mejor Película, que se concede por votación de los espectadores de los cinco países participantes. En 2010, la película ganadora fue Les Plages d'Agnès, de la directora Agnès Varda. En cuanto a la programación, se vertebra en torno a cuatro conjuntos de proyecciones: la Sección Oficial, Sesiones Especiales (inauguraciones), Fuera de Concurso y la de la Invitada de Honor, centrada este año Naomi Kawase, de la que se proyectarán sus títulos más representativos.
La Oficial recoge películas exhibidas en los principales festivales internacionales buscando esa representatividad de los movimientos que se producen año tras año en el cine, esos que viven marginados de las salas comerciales pero que, paradójicamente, son los que acaban marcando la pauta. Entre los nombres a concurso de esta segunda edición figuran los consolidados Takeshi Kitano, Otar Ioselliani y Nicolás Philibert y emergentes como Kelly Reichardt, Andrés Duque, Nikola Lezaic y Marian Crisan, así como cintas que han sido proyectadas en los festivales de Cannes, Venecia, Berlín, Toronto, Locarno y Rotterdam, entre otros.
Fuera de Concurso se proyectarán dos largometrajes: Familystrip, de Luis Miñarro, y Asalto al cine, dirigido por Iria Gómez Concheiro, mientras que en las Sesiones Especiales (Inauguraciones), gracias al acuerdo alcanzado con The Film Foundation, se mostrarán cuatro títulos esenciales en la construcción de la cinematografía contemporánea (Senso, Paths of Glory, The Red Shoes y Pandora and the Flying Dutchmann), en copias restauradas por esta fundación estadounidense. En Madrid, se inaugurará el Festival con el preestreno de Le gamín au vélo (Jean-Perre y Luc Dardenne), Gran Premio del Jurado en el último Festival de Cannes.