Image: Carmen Maura: Sólo he sufrido en un plató de cine con Pedro Almodóvar

Image: Carmen Maura: "Sólo he sufrido en un plató de cine con Pedro Almodóvar"

Cine

Carmen Maura: "Sólo he sufrido en un plató de cine con Pedro Almodóvar"

La actriz madrileña recibe de manos de Álex de la Iglesia la Medalla de Oro de la Academia de Cine

21 octubre, 2009 02:00

Carmen Maura. Foto: Mondelo / EFE

Alberto Ojeda
Carmen Maura ha recibido la Medalla de Oro de la Academia de Cine de manos de Álex de la Iglesia, actual director de la institución. El galardón destaca su dilatada trayectoria, iniciada hace cuatro décadas, y reconoce su gran aportación a la cinematografía española, en la que figura un abultado ramillete de títulos emblemáticos, sellados todos con su impronta personal, de actriz "sencillamente sobrenatural", según palabras del director de La Comunidad.

Durante el acto de entrega ha quedado patente la complicidad entre ambos. Álex de la Iglesia no ha escatimado elogios hacia Maura. El director ha confesado que, en cierto modo, es una intérprete peligrosa, por su capacidad para "conseguir que sólo ella exista en la pantalla, y que todo a su alrededor desparezca". Todo director, en su opinión, debe estar atento cuando maneja un material tan atractivo, para encauzar la energía brutal de esta actriz de acuerdo sus intenciones.

Las alabanzas no han quedado ahí. De la Iglesia ha ido todavía un poco más lejos. Ha llegado a decir que en los labios de Maura "los diálogos suenan como una melodía celestial". Algo que no sólo obedece a su talento innato, sino "a un trabajo persistente, de muchas horas, a su gran experiencia y a su inteligencia".

Pero, entre tanto piropo, Carmen Maura ha escogido uno, que le confesó hace ya tiempo el director bilbaíno, y que es uno de los "más originales que me han hecho en la vida": "Eres como un hipermercado, de ti puede cogerse justo lo que necesitas en cada momento", llegó a decirle Álex de la Iglesia.

Carmen Maura ha estado bastante deslenguada durante el acto. A estas alturas de su carrera se siente segura para decir algunas cosas que a otros les cuesta expresar con claridad: "Es una de las ventajas de ser mayor". Una de las sentencias más sustanciosas que ha dejado caer en la sede de la Academia de Cine es que el "único momento en que ha "sufrido en un plató de cine ha sido rodando Mujeres al borde de un ataque de nervios con Pedro Almodóvar". "Y punto", añadió acto seguido, para cortar el aluvión de preguntas que tal revelación podía haber abierto. Así que ahí quedó eso, entre la bruma del misterio.

Luego la actriz también le ha querido quitar importancia al premio. O mejor dicho: le ha querido quitar importancia a sus méritos. Le ha bastado una sencilla frase: "Siempre me ha resultado muy fácil ser actriz". Y se acordó de todos aquellos que, aun reuniendo talento de sobra para ganar goyas y otro tipo de estatuillas, no han tenido la suerte que ella. "En el cine depende mucho de las oportunidades que te den".

También ha aludido su reciente rodaje bajo las órdenes de Coppola, y no precisamente para ensalzar su figura. La actriz madrileña ha comentado que los días filmando con él célebre director norteamericano le recordaron "a los cortos que hacía al comienzo de mi carrera" y que, aunque a ella y a las otras protagonistas las trataron muy bien, tuvo conocimiento de las condiciones precarias en las que trabajaba el resto del equipo.

De este premio le alegra sobre todo "la repercusión que tiene". Algo que comprobó el otro día en el polígono Cobo Calleja, el epicentro capitalino del comercio chino. Allí, al entrar en una de las naves, escuchó a una pareja de chinos hablar, en su idioma ininteligible. Claro, no se enteraba de nada, pero en un instante dos palabras pronunciadas por la mujer asiática le dejaron perpleja. Fueron: "Medalla de Oro".