Rebecca Horn
Arte en el mundo
30 junio, 2005 02:00Gran retrospectiva de la artista alemana con obra de los últimos cuarenta años con el dibujo como eje central en su trayectoria.
Afortunadamente, el CGAC de Santiago ya nos mostró la obra de esta extraordinaria artista alemana en el verano de 2000, una gran exposición que los críticos de El Cultural eligieron como la mejor de aquel año. Ahora la Hayward Gallery londinense, que hasta hace poco ha estado sometido a una profunda rehabilitación, ha organizado una gran retrospectiva junto a otros grandes museos europeos como la K20 Kunstsammlung Nordhrein-Westfalia de Dusseldorf y el Centro Cultural de Belem de Lisboa, en una exposición que cubre los trabajos realizados desde el año 1964, fecha en que realiza sus primeros trabajos. Pero la exposición no es una mera reunión de trabajos de aquí y de allá sino que se centra en la práctica del dibujo como eje central de su quehacer artístico, como motor principal de sus performances y de sus grandes instalaciones.Los primeros trabajos de Rebecca Horn están centrados fundamentalmente en el cuerpo. Tras un año internada en un hospital, la artista realizó dibujos que simbolizaban extensiones de su cuerpo, situaciones en las que la artista combinaba la idea de la imposibilidad del movimiento con la voluntad de abarcar el espacio en su totalidad. Cuando se recuperó, volvió a la escuela de arte y comenzó a trabajar con prótesis y extensiones del cuerpo. Las obras más tempranas de esta exposición son"Black Cockfeathers", de 1971, "Finger Gloves", de 1972 o "Pencil Mask", del mismo año. Son trabajos en los que la artista ejerce su derecho a la comunicación, al contacto con el exterior o al menos con su entorno inmediato.
Más tarde trabajó en la pieza "Unicornio", una obra que se encuentra entre la escultura y la instalación y que sirvió para la performance del mismo nombre. Horn diseño una prótesis para la cabeza (la prótesis, que pertenece a la colección de la Tate, se puede ver en la exposición) de una compañera y ésta paseó por el bosque en un amanecer con el unicornio acoplado a su cabeza. Cuenta la artista cómo algunos cazadores que por ahí merodeaban caían, aterrados, de sus bicicletas a ver a la mujer con la prótesis.
Muchas de estas prótesis y extensiones del cuerpo se pueden ver en esta gran exposición londinense pero también se pueden ver algunas de sus instalaciones monumentales como la reciente "Knuggle Dome for James Joyce" o "The Raven’s Twin", de 1997. Estas grandes piezas viene siempre enfrentadas de sus dibujos preparatorios, algo de gran interés por la propia calidad de los dibujos y porque los dibujos de Rebecca Horn no son aun del todo conocidos. Las instalaciones de la alemana mezclan un interés por la precisión tecnológica con su eterna inclinación por lo poético. Porque toda exposición de Rebecca Horn es una constante evocación. Los visitantes de la exposición de Santiago recordarán la persistente alusión al viaje a través del mar, con pianos cuyas teclas eran ostras, con maletas llenas de mejillones…poesía en estado puro.