Desde el Museo del Louvre de París están considerando trasladar la Mona Lisa a una sala subterránea. El objetivo sería "poner fin a la decepción del público", según dijo el director del museo, Laurence des Cars.
"El centro de mi misión como director es acoger mejor al público. Y siempre es frustrante cuando la experiencia de nuestros visitantes no está a la altura, como es el caso, obviamente, de la Mona Lisa ", dijo des Cars a la emisora nacional France Inter en una entrevista el pasado 26 de abril. "Por eso, en colaboración con el Ministerio de Cultura, estamos pensando en realizar las mejoras necesarias", añadió.
El icónico lienzo de Leonardo da Vinci, uno de los grandes exponentes del Renacimiento, atrae a más de 20.000 espectadores al día durante la temporada alta del museo, el más visitado del mundo, que atrae a unos nueve millones de visitantes al año.
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La obra, valorada en 830 millones de dólares, se encuentra junto a otras pinturas tras un vidrio resistente a las balas en la sala de los Estados. Elegida en 1966 para exponer la obra maestra de Da Vinci, es la más grande del museo y puede acoger a un gran número de visitantes.
El problema es que después de hacer cola durante horas, estos generalmente solo pueden disfrutar de unos pocos segundos ante la pintura. La brevedad de la experiencia le ha valido a la obra el sobrenombre de "la obra maestra más decepcionante del mundo", según un análisis reciente de reseñas en línea.
Cientos de visitantes contemplan la Mona Lisa en el Museo del Louvre (París)
El museo ubicaría la pintura en su propia sala subterránea, donde los visitantes podrían acceder directamente, sin pasar por vitrina de la entrada, mientras que una segunda sala adyacente se utilizaría para exposiciones temporales. Si finalmente se implementa, se estima que el proyecto costaría en torno a 500 millones de euros. Algunos medios franceses sospechan que los recientes recortes presupuestarios anunciados por el gobierno del presidente Emmanuel Macron podrían determinar el desarrollo de la medida.