Ya lo decía el filósofo francés Gilles Lipovetsky, “vivimos en una sociedad cada vez más individualizada”. De ahí la importancia de encontrar nuevas formas de apertura, de sociabilizar y volver a tomar la calle como punto de reivindicación, juego, reflexión, confluencia e, incluso, experimentación. Bajo esta premisa se desarrolla la 14.ª edición del Festival Internacional de Imagen Getxophoto que, como otros años, pretende activar el pensamiento crítico del público acercando a la localidad vizcaína varias propuestas de creadores nacionales e internacionales.
“Escogí el título A la Calle como homenaje al propio certamen. Desde su inicio ha querido recuperar espacios urbanos para usos culturales y apostar por la exploración de formatos poco convencionales. Además, a diferencia de los museos que trabajan a otra velocidad, el objetivo de cualquier festival pasa por reflejar lo que está sucediendo en el momento", explica Jon Uriarte, nuevo comisario de Getxophoto, a El Cultural.
"Manifestaciones contra el cambio climático, reivindicaciones feministas, protestas antirracistas… el uso del espacio público es una cuestión acuciante. Con la irrupción de la crisis sanitaria a mediados de marzo, las calles se quedaron vacías, las pantallas repletas y el nombre de la muestra adquirió un significado totalmente distinto”, abunda Uriarte. Así, del 3 al 27 de septiembre el certamen buceará en disciplinas como la fotografía, el cine, la realidad virtual o el arte digital, presentando un programa de actividades diseñadas para todo tipo de públicos.
Proyectos como Reducción de Felipe Beltrán Romero (un alegato antirracista que pone el foco en la violencia policial contra los inmigrantes en España) convivirán con Tokyo Compression de Michael Wolf (una mirada a escenas cotidianas que, desde el punto de vista actual, nos pueden parecer aterradoras) o 3409 Worker del colectivo Estampa (una propuesta que desentraña la forma en la que las máquinas miran, analizan e identifican a los transeúntes). “La crisis sanitaria nos ha servido para comprobar que la fotografía es más importante que nunca. No solo actúa como una práctica artística, sino como herramienta de entretenimiento o mecanismo de vigilancia”, continúa el comisario.
Además de dar uso a escenarios físicos como la fachada de la oficina de Correos, el centro de Algorta o el eje que va desde la playa de Ereaga al Puerto Viejo, el festival amplía su alcance a Internet: podcasts, filtros de Instagram, playlists o herramientas de diseño también tendrán cabida en el programa.“ Mi área de investigación y trabajo siempre ha estado ligada al ámbito online. Tenemos que entender lo digital como un concepto de circulación y descarga. La fotografía ha dejado de basarse en el original, su preservación se encuentra en la multiplicidad, en la copia”, asegura el comisario.
La edición más participativa
Gracias a iniciativas como Pantalla Compartida Getxophoto invita a la población local a interactuar con el festival. El público podrá enviar capturas de pantalla de las video llamadas que realizaron durante el confinamiento, siendo escogidas una treintena de ellas para ocupar las ventanas del departamento de comunicación del Ayuntamiento.
Por tercer año consecutivo el certamen ha organizado un Open Call internacional recibiendo más de 300 proyectos procedentes de 43 países diferentes. El jurado formado por Emma Lewis (TATE Modern), Sarah Leen (The National Geographic Magazine), Mirjam Kooiman (FOAM) y Jon Uriarte (The Photographers’ Gallery) ha seleccionado How was your dream? de Thaddé Comar, HOAX de Agnieszka Sejud, Americans Parade de George Georgiou y, el ya citado, Reducción de Felipe Beltrán Romero como trabajos ganadores.
Talleres infantiles, laboratorios, talks, paseos nocturnos y diferentes recorridos tanto por el centro de la ciudad como por la playa, completan la programación del festival vasco.