Miguel Falomir, director del Museo del Prado
El hasta ahora adjunto de Conservación e Investigación del Museo toma posesión el próximo martes 21
16 marzo, 2017 23:00Miguel Falomir. Foto: Jerónimo Álvarez
Desde que el pasado 30 de noviembre Miguel Zugaza anunciase su decisión de abandonar el Museo del Prado, después de quince años como director (llegó al cargo el 23 de enero de 2002), el nombre de Miguel Falomir (Valencia, 1966) empezó a sonar como firme candidato. Ya en la rueda de prensa ofrecida por Zugaza al día siguiente, él mismo afirmaba que sería un buen director, que conocía el museo como nadie. Sin concurso a la vista, a pesar del debate generado en una parte del sector que abogaba por democratizar la elección, el director adjunto de Conservación e Investigación era el candidato lógico.Tras un baile de nombres que ha durado ciertamente muy poco tiempo (se habló también de Gabriele Finaldi, a pesar de que, recién aterrizado en la National Gallery de Londres, era improbable su vuelta), la comisión que se creó para tal fin pronto anunció que Falomir era su candidato (no barajaron ningún otro). Como era previsible, el Patronato del museo que preside José Pedro Pérez-Llorca lo aprobaba ayer mismo, y hoy, el Consejo de Ministros, ha ratificado un nombramiento sin sorpresas. Un hombre de la casa comprometido con la institución y con la línea mantenida en los últimos años, Falomir garantiza la continuidad y, a la vez, ofrece un plus de investigador dado su perfil dentro de la pinacoteca.
Y es que la carrera de Miguel Falomir está ligada al Prado desde hace 20 años. En 1989 se licencia en Historia del Arte por la Universidad de Valencia, y desde 1990 hasta 1993 es becario FPI del Ministerio de Educación y Ciencia en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas. En 1993 se doctora en Historia del Arte por la Universidad de Valencia y entre 1994 y 1995 disfruta de una beca Fulbright en el Institute of Fine Arts de la Universidad de Nueva York. Es, además, profesor titular en el Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Valencia.
En 1997, Falomir es nombrado Jefe del Departamento de Pintura Italiana y Francesa (hasta 1700) del Museo del Prado. Entre 2008 y 2010 ha sido Andrew Mellon Professor en el Center for Advanced Study in the Visual Arts de la National Gallery of Art de Washington. Es miembro del Comitato Scientifico de la Fondazione Tiziano en Pieve di Cadore (Italia) y ha sido profesor invitado en las universidades de Údine en Italia y UCLA en Estados Unidos.
En el museo ha sido comisario de muchas de las exposiciones importantes entre las que destacan Una obra maestra restaurada. El Lavatorio de Jacopo Tintoretto (2000); Los Bassano en la España del siglo de oro (2001); La restauración de El emperador Carlos V, a caballo, en Mühlberg de Tiziano (2001); de las importantes muestras de Tiziano (2003) y Tintoretto (2007) y El retrato del Renacimiento (2008), El último Rafael (2012), Las Furias : alegoría política y desafío artístico (2014) y Tiziano: Dánae, Venus y Adonis. Las primeras poesías. Ahora trabaja en el catálogo razonado de Tiziano en el Prado.
Tras la marcha de Gabriele Finaldi, hace apenas dos años, Falomir pasa a ocupar el puesto de director adjunto de Conservación e Investigación vacante por la marcha del londinense, para convertirse en el número dos del museo y mano derecha de Zugaza. Y, tan solo 24 meses más tarde, después del anuncio de éste de abandonar la institución, los acontecimientos le han llevado hasta el despacho de director.
Llamado a liderar el nuevo plan de actuación del museo, el mismo que aborde la celebración del bicentenario en 2019, Miguel Falomir tendrá que lidiar también con el proyecto de la última y definitiva ampliación del Prado con el Salón de Reinos. Una obra con la que se ganarán casi 2.600 metros cuadrados de espacio expositivo, lo que supone un aumento del 16 %, y 5.700 metros cuadrados útiles. Rehabilitación que culmina asimismo el proceso de modernización de la pinacoteca.
El Museo del Prado, su colección y exposiciones, ya ocupa un merecido lugar de honor entre las grandes pinacotecas internacionales y el trabajo de Falomir deberá ser mantenerlo y colocarlo también en el centro de las investigaciones de los grandes maestros en todo el mundo.
@PaulaAchiaga