El artista presenta esta tarde sus últimas piezas en la exposición Locked-in Syndrome, en la galería Ponce+Robles de Madrid.
La obra de Avelino Sala (Gijón, 1972), alegórica y abiertamente crítica, siempre ha estado muy cerca de la actualidad sociopolítica. El artista visual ha interrumpido por unos días su residencia de dos meses en Nueva York, auspiciada por el Programa para la Internacionalización de la Cultura Española (PICE) de Acción Cultural Española, para presentar Locked-in Syndrome en la galería Ponce+Robles de Madrid. El título de la exposición alude al síndrome de enclaustramiento como metáfora de la incapacidad del ciudadano para reaccionar a los continuos cambios sociales, políticos y económicos de nuestra época.Pregunta.- Una de las piezas centrales de la exposición es la Declaración de los Derechos Humanos grabada con la punta de un compás en 40 bolígrafos Bic, como se hacía con las chuletas del colegio.
Respuesta.- Haciendo esto relaciono los Derechos Humanos con la idea del olvido. Están ocultos. Es un texto fundamental del ser humano, pero en todas partes se lo saltan. Junto a la obra se muestra en un vídeo cómo se hizo la pieza. Es muy importante el sonido al rascar los bolígrafos, resaltando su carácter desagradable.
Avelino Sala: Clandestina, 2013.
P.- Otra pieza destacada es una capa típica española que pende de una soga. ¿Qué simboliza?R.- Es una capa española con la inscripción latina larvatus prodeo, una frase de Descartes que significa "avanzo ocultándome". La pieza está relacionada con el ámbito político, con el proceso actual de pérdida de libertades en el que estamos inmersos de manera convulsa. El hecho de que esté suspendida en el aire con una cuerda tiene que ver con la idea de manipulación, como si fuera una marioneta.
P.- También presenta una colección de piedras recogidas en manifestaciones recientes de todo el mundo, un vínculo con las protestas callejeras que ya hemos visto en sus trabajos anteriores.
R.- En esta ocasión he contactado con colectivos de todo el mundo que me han enviado piedras que realmente se han lanzado en manifestaciones. Al exponerlas como si fueran piezas de museo realizo una "arqueología de la revuelta". Es la narración cronológica de lo que está pasando, pero utilizando símbolos distintos a los que aparecen en los medios. Es un proyecto que voy a continuar ampliando.
P.- Todo su trabajo está muy relacionado con la actualidad inmediata. ¿Es un deber de los artistas?
R.- Sí, los artistas tenemos que hablar de lo que pasa ahora. Concibo el arte como un medio de comunicación, pero desde una perspectiva distinta a la que estamos acostumbrados.
P.- ¿Qué puede hacer el arte frente al poder político?
R.- No podemos cambiar el mundo, pero funciona cuando la gente piensa a través de una obra. El arte puede generar microacciones, cambiar algunas cosas. Las manifestaciones artísticas de masas, como el cine, sí pueden provocar una reacción mucho más amplia.
P.- En otra pieza de la exposición cuelga unos palos de hockey que llevan escritos títulos de novelas distópicas. ¿Estamos cada vez más cerca del oscuro futuro que este tipo de obras imaginan?
R.- Totalmente. De hecho estamos inmersos ya en la distopía. Esta pieza parte de otra, Cacotopía, un vídeo que hice en colaboración con Daniel García Andújar.
P.- ¿Qué le parece la bajada del IVA para las obras de arte anunciada hace pocos días?
R.- La bajada del IVA es una buena noticia, pero tienen que aclarar si es para galerías, para artistas o para quién. Nunca tendría que haber subido, para empezar.