Poco a poco Rafa Nadal ha ido cogiendo el tono en su vuelta a las pistas. Le ha costado más de lo esperado y ha disputado menos partidos de lo que le hubiese gustado, pero ahí sigue. El tenista español no se rinde en su gira de despedida mientras continúa inscribiéndose en torneos.
Su próxima parada es el Masters 1000 de Roma. Un último test clave para Nadal ya que después llegará su particular Everest. La hoja de ruta de Rafa tiene dos objetivos principales y más allá del verano no se advierte un foco claro. Es decir, se puede decir que afronta sus momentos más decisivos en el circuito.
No es baladí que a Nadal le queda poco menos que un telediario al máximo nivel. Nada es descartable con él, pero los problemas físicos le han ido mermando poco a poco hasta convertirle en un jugador lleno de achaques. Un adiós marcado por las lesiones, pero donde él sigue resistiéndose a marchándose por la puerta de atrás.
Con la aparición de Roland Garros y los Juegos Olímpicos de París 2024 en el horizonte, Rafa Nadal sabe que necesita rodaje y en Roma aspira a encontrarlo. Tendrá un cuadro duro y exigente, pero él sabe que es crucial para llegar de la mejor de las maneras a la capital francesa, donde tendrán lugar ambos eventos.
Ha ganado diez veces allí, más que nadie, por lo que las expectativas siempre han sido altas para él. Ahora la realidad es completamente diferente, aunque siempre quedará el sueño de volverle a ver levantar los brazos en la tierra batida del Foro Itálico y Rafa tratará de aportar su granito de arena.
[Rafa Nadal ya conoce su cuadro en el Masters 1000 de Roma: evita a Novak Djokovic hasta la final]
Poniéndose a tono
Rafa Nadal ya ha comenzado a tomar contacto con la tierra batida del Foro Itálico. El balear se desplazó hasta la capital de Italia con varios días de antelación una vez finalizó su periplo en el Mutua Madrid Open. Al igual que ya ha hecho otras veces esta temporada, decidió aclimatarse para llegar con sensaciones al arranque.
Para ello decidió testearse con Stefanos Tsitsipas, un jugador de muchísimo nivel. El diez veces campeón del Masters 1000 de Roma estuvo entrenándose con el griego en la mañana de este martes mientras el tiempo lo permitió. Las lluvias hicieron estragos en el torneo y parte de la jornada fue suspendida.
Estuvo entrenando en la pista del Foro Itálico y trabajó especialmente desde el fondo de la línea. Además, también estuvo practicando su servicio. El saque ha sido uno de los golpes que más limitado se ha visto desde que volviese por lesión, por lo que ha tratado de mejorarlo poco a poco.
En las gradas de las pistas del Masters 1000 de Roma, la gente ha apoyado a Rafa Nadal antes de su debut. El tenista español es poco más que un ídolo allí, y al igual que ocurriese en Madrid, el fervor por verle entrenando con Stefanos Tsitsipas ha provocado que cientos de seguidores hayan podido disfrutar de su tenis.
Una rutina que ha establecido en sus últimos torneos. En el Conde de Godó causó una gran expectación y repitió lo mismo en el Mutua Madrid Open. Hasta el momento no le ha ido mal, por lo que en Roma ha querido repetir la experiencia.
[El camino de Rafa Nadal todavía no ha terminado: ahora Roma y sus dudas sobre Roland Garros]
Cuadro complicado
La organización ya ha dado a conocer que el debut de Rafa Nadal en el Masters 1000 de Roma se producirá este jueves. Se verá las caras contra Zizou Bergs, jugador procedente de la fase previa. El belga será su primer oponente y le servirá para ir cogiendo altura puesto que no es tenista de tantísimo nivel.
Esta será la primera ocasión en la que se mida en el circuito. Además, es el estreno de Bergs en el Foro Itálico. Como dato a destacar, consiguió ganarle un set en el Open de Australia a Stefanos Tsitsipas, que acabó evitando la sorpresa con una victoria en cuatro mangas. Zizou Bergs es el 108 del ranking ATP y nunca ha entrado en el Top 100. Pese a la enorme diferencia entre ambos en la clasificación, Rafa es el 207, todo hace indicar que Nadal es el gran favorito.
Ese será el primer paso del Everest que le espera a Nadal en Roma. Si consigue superar ese escollo inicial, le esperan jugadores con muchísima más identidad y nivel. Hubert Hurkacz, Andrey Rublev o Daniil Medvedev aspiran a avanzar rondas en el Foro Itálico.
Además, no tendrá el morbo de enfrentarse a Carlos Alcaraz o Novak Djokovic, que teóricamente será su oponente en una hipotética final. Tampoco forzará en exceso teniendo en cuenta que el tiempo se agota antes de Roland Garros y los Juegos Olímpicos aparecen en un futuro próximo.
No está clara su presencia en Roland Garros, pero sí que hace indicar que quiere disputar sí o sí el dobles en los Juegos Olímpicos de París con Carlos Alcaraz. Ahora la moneda está en su tejado, pero se van cumpliendo los pasos a dar.