Esta vez la vencida no fue a la tercera, sino a la cuarta. Carlos Alcaraz consiguió romper en Indian Wells la extraña maldición que tenía contra Felix Auger-Aliassime, el pupilo de Toni Nadal. En los tres precedentes anteriores que habían tenido, el jugador español no había conseguido derribar el muro del canadiense. Pero ha tenido que ser en este 2023 tan extraño, marcado por las lesiones y las recuperaciones, cuando el aspirante a número uno del mundo ha dado el paso definitivo.
Con este triunfo en dos sets (6-4 / 6-4) 'Carlitos' consigue avanzar a las semifinales del Masters 1000 de Indian Wells y sigue manteniendo todas sus opciones de conseguir los dos objetivos que se marcó a su llegada a California. El primero, conseguir el título. Ya lo tiene a solo dos pasos. Y el segundo, si consigue el primero, colocarse de nuevo como el número uno del mundo, desbancando a Novak Djokovic.
Alcaraz realizó un partido muy completo desde el fondo de la pista y, sobre todo, al resto. Casi no tuvo fisuras en su actuación y derribó en unas dos horas de juego el muro del décimo jugador del ranking ATP. En una noche más fría de lo habitual en el complejo californiano, Carlos sacó su mejor versión. Esa que casi no se había visto en este principio de temporada. Una victoria a lo campeón.
Con la pista central abarrotada, los dos herederos del 'Big Three' se dieron cita para una gran batalla en la que 'Carlitos' tenía un reto: romper por primera vez el servicio de su rival. Tres partidos y 31 juegos al resto con 11 oportunidades perdidas. Hasta este viernes, cuando Alcaraz ha derribado por fin el muro. Sabía que tenía que estar muy bien en las recepciones de los saques de su rival y lo hizo. El plan salió a la perfección.
El tenista español comenzó el partido exhibiendo una gran fortaleza con su saque y poniendo en apuros a su rival. Auger-Aliassime, algo superado por el escenario y por el ímpetu del jugador de El Palmar, terminó concediendo esa ansiada rotura en el quinto juego del partido. Hasta ese momento, el partido había sido un combate a los puntos con golpes de todos los colores. Alcaraz marcaba el ritmo con su potencia desde el fondo de la pista y lo cortaba con sus impresionantes dejadas.
Tuvo uno de esos días de inspiración como en un eterno peloteo ganado con un globo inverosímil cuando todo parecía perdido. Como viene siendo habitual, dedo al oído para recoger la locura de un público entregado. Alcaraz, que solo tuvo que salvar una bola de break, terminó cerrando la primera manga con solvencia para quedarse a un solo paso de las semifinales. 6-4 y a pensar en la siguiente.
La fuerza mental de Alcaraz
Felix Auger-Aliassime quedó contra las cuerdas y en busca de una remontada que esta vez ni siquiera pudo imaginarse. No bajó la cabeza, pero no encontró nunca la manera de hacer daño a su rival. Concedió su primer servicio, pero rápidamente lo recuperó para seguir en la pelea. Fue un momento de inflexión en el partido, pero Alcaraz demostró la fortaleza mental que otra vez no ha demostrado en momentos de tensión.
No se dejó amedrentar por su oponente y continuó siguiendo al milímetro su plan de partido. Esperó su momento y lo encontró con 4-4 en el marcador, cuando encontró las dudas de un Auger-Aliassime que no halló el camino para hacer daño a su oponente por primera vez en su carrera deportiva. El español se puso 15-40 al resto. Felix, con dos cañonazos, salvó los dos primeros intentos de break, pero después no pudo resistir y terminó cediendo su saque y, posteriormente, el partido.
Victoria de campeón de un Carlos Alcaraz que repite las semifinales de Indian Wells conseguidas en 2022, donde perdió ante Rafa Nadal en un duelo en el que quedaron tocados físicamente los dos españoles. Ahora, se las tendrá que ver con otro joven talento como Jannik Sinner para pelear un puesto en la final. Por el otro lado del cuadro estarán Daniil Medvedev y Frances Tiafoe.