La vida de Juan Martín del Potro durante los últimos meses ha sido completamente intranquila. El gran jugador de tenis argentino ha atravesado por un auténtico calvario de lesiones y pasos por el quirófano. Sin embargo, la retirada no le ha traído la tranquilidad que esperaba. El gigante de Tandil dijo adiós al profesionalismo en el mes de febrero en un partido ante su compatriota y amigo Federico Delbonis.
Fue en el torneo ATP de Buenos Aires el pasado 9 de febrero. 'Delpo' se despedía de lo que había sido su vida de manera prematura, con solo 33 años, y después de una exitosa carrera. Había llegado hasta el puesto número 3 del ranking ATP y había conseguido levantar un grande. Fue el US Open del año 2009. Además, había llevado hasta sus vitrinas otros 21 torneos del circuito profesional.
Sin embargo, el terrible calvario de lesiones por el que ha tenido que pasar los últimos años le llevaron a tomar la decisión más dura de su carrera: la retirada. Con ella pretendía obtener la tranquilidad de la que no había podido disfrutar los últimos tiempos. Antes de medirse a Delbonis en Buenos Aires había permanecido durante 965 días sin estar en una pista de tenis como jugador profesional.
Ahora, Juan Martín del Potro, estaría sopesando su vuelta al circuito tal y como ha informado el Diario AS. Una decisión realmente sorprendente, pero que el argentino no ha escondido en sus últimas apariciones públicas. A pesar de que su mayor deseo es poder a vivir sin el terrible dolor que sufre en sus piernas, especialmente en sus rodillas, no cierra la puerta a volver en el 2023.
Juan Martín del Potro vuelve a jugar 956 días después
De hecho, en las últimas semanas ha ido dando pasos que le han hecho reforzarse en ese planteamiento. Después de las siete operaciones que ha sufrido, tres en la muñeca izquierda, una más en la derecha y otras tres en la rodilla derecha, De Potro quiere darse una nueva oportunidad. O al menos tener la despedida que un jugador de su calibre merece, peleando por grandes éxitos y no con un encuentro casi a modo de despedida como el organizado contra Delbonis en Buenos Aires.
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Una idea que gana fuerza
Durante la disputa del US Open que ganó Carlos Alcaraz, Del Potro fue testigo de la despedida de una gran leyenda como Serena Williams. Y en ese momento ya fue preguntado por la opción de volver debido a que todavía es una persona joven a pesar de que ha estado muy castigado por las lesiones. En una entrevista reciente confesó que muchas veces no podía conducir ni casi vivir sin dolor. Sin embargo, la idea de su regreso va ganando fuerza.
"Todavía me siento jugador, no me veo como extenista. Cuando los veo jugar digo que yo tengo que estar ahí. Vivo día a día, con altibajos emocionales. Siempre tuve el foco en volver hasta que tomé la decisión de cambiar el rumbo. No sé si con Delbonis fue mi último partido, el deseo lo tengo, pero ya no pienso en qué hacer para jugar. Cuando llegué al US Open, me contaron lo de Serena Williams: me dieron a entender que si me da la pierna para el año que viene… Eso me generó algo interno muy fuerte y la ventana para la posible vuelta la voy a dejar abierta".
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Del Potro solo pudo hacer cuatro juegos frente Delbonis después de su regreso tras casi tres años sin jugar. Aquello ya fue un triunfo para él ya que había pasado un auténtico calvario, incluido un proceso de pérdida de hasta 12 kilos de peso. Sin embargo, su amor por el universo de la raqueta le están haciendo replantearse seriamente su vuelta.