Serena Williams se despide de Roland Garros después de caer en una hora y 17 minutos ante Elena Rybanika por 6-3 y 7-5. Cayó así por sorpresa la estadounidense, quien vuelve a caer presa de la que ya va siendo conocida como la 'maldición Margaret Court'.
Desde que Serena Williams consiguió su 23º Grand Slam, no ha podido ganar uno de los cuatro grandes. Esta era la duodécima ocasión en la que la leyenda del tenis se enfrentaba a un nuevo major para empatar con Margaret Court en lo que a títulos se refiere.
La última vez que se coronó campeona en un Grand Slam fue en el Open de Australia del año 2017, cuando ganó ante su hermana Venus Williams en la final del abierto australiano. Desde entonces no ha vuelto a conquistar ningún grande y a sus 39 años -cumple 40 en septiembre- está ante las últimas oportunidades de empatar el récord absoluto de majors de Margaret Court.
Esta derrota ha sido un auténtico jarró de agua fría para una Serena Williams que cuando jugó por primera vez en Roland Garros, allá por el año 1998, todavía no había nacido la que este domingo la ha derrotado y es que Elena Rybanika, de nacionalidad kazaja, tiene tan solo 21 años.
Serena jugó su partido con un aparatoso vendaje en su muslo derecho y su rival aprovechó este punto débil para hacerla correr sobre la arcilla de París y también para firmar varias dejadas imposibles para la Williams, quien dejó muestras de problemas de movilidad.
Siguiente parada
Ahora, la estadounidense se centra en su siguiente parada: Wimbledon. "Me gusta cambiar de cambiar superficies, pero históricamente me ha ido bastante bien en hierba. También lo he hecho bastante bien en tierra batida. Solo que no esta temporada en particular. No sé. No creo que vaya a jugar ningún torneo antes. Me iré pronto a Londres por el tema de cuarentena", ha asegurado Williams.
Serena se queda así sin poder volver a ganar en Roland Garros, pero pasa página rápido para centrarse en Wimbledon. Hasta que dé comienzo el torneo más importante sobre hierba, no se volverá a ver a la Williams compitiendo. Se lo juega todo a la siguiente carta. Mientras tanto, algunas voces ya claman por su retirada, pero la tenista tiene decidido seguir hasta que su cuerpo le diga 'basta' y no pueda ser competitiva al más alto nivel.
[Más información - Durísimo ataque contra Serena Williams: "Si tuviera algo de decencia debería retirarse"]