Gran polémica la que se ha generado en la Media Maratón de Pekín por su controvertido final. El chino He Jie se hizo con el triunfo pero las imágenes de la llegada a la línea de meta, acompañado de otros tres atletas africanos, rápidamente se han hecho virales en las redes sociales y han dado la vuelta al mundo.
Cuatro corredores llegaron en grupo a los metros finales de la prueba para disputarse la victoria. Sin embargo, no hubo pelea como tal por el triunfo, ya que como se ve en las imágenes, da la sensación de que los tres atletas africanos dejan al chino entrar en la primera posición y por lo tanto hacerse con la victoria en su país.
Robert Keter y Willy Mnangat, de Kenia, y Dejene Hailu, de Etiopía, fueron los tres atletas africanos que llegaron junto a He Jie a la recta de meta. En las imágenes se puede ver como uno de ellos le hace gestos con la mano al asiático de que se aproxime a la parte izquierda de la calzada para seguir al grupo y entrar en el lugar correcto.
Unos metros más tarde, He Jie cruza la meta en primer lugar, con los tres africanos escoltándole y aguantando el ritmo, e incluso alguno alza los brazos. Posteriormente acuden a felicitarle.
La manera en la que se produjo este final levantó la indignación entre el público asiático, que consideraba indigna esta forma de repartirse el triunfo. Muchos dejaron constancia de su malestar a través de las redes sociales y eso hizo que la propia carrera se pusiera en alerta.
Los organizadores están estudiando lo sucedido, así como la Oficina de Deportes de Pekín. También en World Athletics se manifestaron en declaraciones a BBC Sport: "Somos conscientes de las imágenes y entendemos que las autoridades locales pertinentes están llevando a cabo una investigación".
Hacían de 'liebre'
Este curioso final con la victoria del atleta chino se debe, al parecer, a que los tres corredores africanos estaban haciendo de 'liebre' para el atleta asiático. De hecho, uno de ellos lo llegó a comentar abiertamente al finalizar la carrera viendo el revuelo que se había montado.
Mnangat aseveró que para él ni siquiera se trataba de una carrera competitiva: "No sé por qué pusieron mi nombre en mi dorsal en lugar de etiquetarme como 'liebre'", comentó sin tapujos.
De hecho, el atleta de origen keniano aseguró que cuatro atletas habían sido contratados para ayudar a He Jie a batir el récord de media maratón que estaba establecido en 1 hora, 2 minutos y 33 segundos.
Este récord, sin embargo, no se batió porque He Jie consiguió el triunfo con un tiempo final de 1 hora, 3 minutos y 44 segundos. La victoria sigue generando controversia en el mundo del atletismo.