Rolando Urios vuelve al balonmano profesional a los 51 años: ficha por el Alarcos de Ciudad Real

Notición en el universo del balonmano. Rolando Urios, estrella de la selección española y de equipos como el Ciudad Real, ha decidido anunciar su vuelta al profesionalismo a sus 51 años. El pívot cubano nacido en Bayamo en 1971 ha decidido poner fin a su retiro para volver a sentirse jugador. 

La plaza elegida por el mítico Rolando Urios ha sido el Vestas Alarcos, un equipo precisamente de Ciudad Real que milita en la División de Honor Plata del balonmano nacional. La noticia ha hecho tambalearse los cimientos del balonmano nacional y es que el 'tanque' hispano-cubano estuvo considerado como uno de los mejores pívots de su generación en todo el mundo. 

Ahora, superadas ya las cinco décadas, ha decidido anunciar que vuelve al balonmano profesional después de estar retirado desde el año 2009, cuando tuvo que decir basta a causa de una grave lesión de rodilla. De hecho, en aquel momento tuvo que renunciar a vestir la camiseta de España en los Juegos Olímpicos de Pekín por aquella dolencia que unos meses más tarde le obligaría a decir adiós. 

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Trece años después, el que fuera máximo goleador del Mundial del año 1999, ha decidido volver a vestirse de corto y aceptar la oferta del Vestas Alarcos de Ciudad Real para seguir haciendo grande su leyenda. La Real Federación Española de Balonmano ya ha recibido todos los documentos necesarios para confirmar su inscripción y todo está listo para que sea presentado este mismo jueves. Incluso podría llegar a debutar este mismo fin de semana en su primer partido con su nueva camiseta. 

La carrera de Rolando Urios, especialmente en su etapa en el BM Ciudad Real, está a la altura de los más grandes. Llegó a levantar tres Copas de Europa y hasta cuatro Ligas Asobal como títulos más destacados. Con la Selección, con la que pudo jugar al conseguir la ciudadanía por ser descendiente de españoles, llegó a disputar un total de 53 encuentros. Formó parte del equipo que se coronó campeón del mundo en el año 2005 y que un año después se colgaría la medalla de plata en el Europeo. 

La emoción del regreso

Para Rolando no ha sido fácil tomar esta decisión, por lo que se ha mostrado muy emocionado de afrontar este nuevo reto aunque alejado de la élite en la que un día fue un auténtico coloso y uno de los pívots más importantes del planeta. 

"Ha sido el segundo entrenador del Alarcos, Julio Fis, con el que guardo una estrecha amistad, el que me propuso que fuera a entrenar, con el fin de ayudarles y de dar moral a los chicos, porque tenían muchas lesiones, y más específicamente en el pivote. Una vez que iba a entrenar algunos días, y como yo en Alemania me he cuidado mucho, yendo al gimnasio, con cada sesión me iba encontrando mejor, por lo que Julio Fis, me propuso jugar, a lo que le respondí que ya tenía 51 años, camino de 52, ya que nací el 27 de enero de 1971".

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"A mí todo esto también empezó a hacerme ilusión, además de que también me lo hace devolverle a Ciudad Real lo mucho que me ha dado desde que llegué aquí hace ahora 21 años, así como la ilusión que he notado en la gente con mi vuelta, de los amigos de siempre, de los aficionados... Por eso he decido volver, tras hablar conmigo tanto Fis como el presidente Juan Pablo Marciel",

A pesar de toda la emoción que ha despertado su regreso, el propio Rolando ha querido rebajar la euforia añadiendo que esto es algo temporal y pasajero: "A ellos les he dicho que esto será temporal, para uno o dos meses y jugando cada partido de 10 a 15 minutos, mientras recuperan efectivos, porque para más yo creo que no estoy". 

"Así, pues, veremos cómo respetan al 'abuelito' e iremos viendo en qué condiciones voy estando". Ahora, la siguiente parada del camino será ver en qué momento consigue hacer su debut. Podría ser este mismo fin de semana contra el Caserío Vigón.