Suceso muy desagradable con un jugador de la NFL. Henry Ruggs III estuvo involucrado en un accidente donde una persona falleció, tal y como ha informado el Departamento Metropolitano de Policía de Las Vegas. Jugaba para el equipo local, los Raiders, que ya han despedido al joven de 22 años. Conducía en estado de ebriedad y a una velocidad de 251 km/h, de acuerdo con los primeros reportes. La víctima fue Tina Tintor, una mujer de 23 años que regresaba a su hogar y fue embestida.
El jugador de la NFL estrelló su Chevrolet Corvette a alta velocidad contra la parte trasera de un Toyota Rav4 en una calle muy transitada en una zona residencial, al oeste de la zona turística de Las Vegas. La mujer que iba en el otro vehículo murió junto a su perro al estallar en llamas el automóvil. Ruggs fue arrestado y los Raiders anunciaron pocas horas después la resolución de su contrato.
Ruggs III está acusado de conducir bajo la influencia del alcohol con el resultado de una muerte y conducción temeraria. Podría ir a la cárcel hasta por 26 años, ya que el primer cargo está tipificado con pena de 2 a 20 años en prisión, además de 6 por el segundo cargo. La Fiscalía ha reducido el pago de la fianza de un millón a 150.000 dólares bajo estrictas condiciones como el confinamiento en su domicilio, monitoreo electrónico, prohibición de conducir y tener que entregar su pasaporte.
Así se le va la carrera a Ruggs en un equipo que confío en él desde el principio, pues fue parte de la selección de primera ronda en 2020 a petición del dueño Mark Davis. "Nuestros corazones están con la familia y los amigos de la víctima de esta horrible tragedia. Continuaremos recopilando hechos y monitoreando el asunto bajo nuestras políticas, pero nuestros pensamientos en este momento están con aquellos impactado por este devastador incidente", escribía en un comunicado la NFL.
De polémica en polémica
Las Vegas Raiders no cesa de vivir situaciones desagradables. "He renunciado como entrenador jefe. Amo a los Raiders y no quiero ser una distracción. Gracias a todos los jugadores, asistentes, personal, aficionados de la nación raider. Lo siento mucho, nunca quise herir a nadie", escribía Jon Gruden en la cuenta de Twitter del equipo de la NFL. El técnico ha sido acusado de racismo, homofobia y machismo por la filtración de unos correos electrónicos que desveló The Wall Street Journal y el New York Times.
Gruden también fue acusado de utilizar un insulto homófobo para describir al comisionado de la NFL, Roger Goodell, además de usar un comentario similar sobre Michael Sam, el primer jugador abiertamente gay reclutado por un equipo de la NFL en 2014. Es aún más curioso porque los Raiders emplean actualmente al único jugador activo de la liga norteamericana abiertamente gay, Carl Nassib. El técnico trabajaba como comentarista en ese momento antes de unirse a los Raiders firmando un contrato de 10 años y 100 millones de dólares en 2018.
[Más información: La NFL rompe sus 'normas raciales': los problemas mentales de jugadores negros serán reconocidos]