Maverick Viñales está, sin duda, en uno de los mejores momentos de su carrera. El piloto catalán consiguió en el Gran Premio de Las Américas su primer triunfo, sin contar carrera sprint, de la temporada. Lo hizo en una exhbición sobre el trazado de Austin y logró una marca para la historias.
Y es que Viñales se convirtió en el primer piloto de todos los tiempos en logran un triunfo en MotoGP con tres marcas distintas. El corredor inscribió su nombre en los libros de historia de la categoría reina tras lograr vencer con Suzuki, Yamaha y Ahora Aprilia.
Un récord que llega después de muchos años de dedicación en el que su carrera ha tenido momentos buenos y otros que no lo han sido tanto. Viñales debutó en MotoGP en 2015. Estaba llamado a hacer grandes cosas en el mundo del motociclismo. No ganó en su primer año, pero en su segunda temporada a los mandos de la Suzuki consiguió su primera victoria en MotoGP en el Gran Premio de Silverstone.
[Viñales reina en el festival español de Austin y se lleva la carrera sprint del GP de Las Américas]
En 2017 dio el salto a Yamaha donde consiguió ocho triunfos más. El primero de ellos llegó en Qatar y esa misma temporada le siguieron las victorias en Argentina y Francia. En 2018 venció en Australia, en 2020 en Holanda y Malasia y en los dos años siguientes se subió a lo más alto del podio en Italia y Qatar.
Fue ahí cuando llegó la crisis y el despido de Yamaha y el paso a Aprilia. Desde entonces, en dos años y medios, Viñales no daba con la tecla, pero este año lleva dos victorias al sprint en Portugal y Austin, donde este domingo logró su novena victoria en MotoGP y la primera con Aprilia, tercera fábrica con lo que lo consigue.
Remontada sobresaliente
Su triunfo en el circuito de Austin fue mucho más complicado de lo que podría parecer en un principio. Viñales defendía la pole, pero un fallo con el embrague en la salida le hizo perder posiciones cayendo hasta la undécima plaza.
Comenzó entonces una carrera contrarreloj en busca de escalar puestos e intentar salvar un fin de semana que hasta entonces había sido perfecto. Y lo logró. Rebasó a todos sus rivales y poco a poco fue escalando hasta los primeros puestos. Le vino bien la caída de Márquez y se metió de lleno en la lucha por el triunfo.
Se colocó detrás de Pedro Acosta y a las primeras de cambio le adelantó. Lo hizo sin miramientos, demostrando estar en el mejor momento de su carrera. Y a partir de ahí imprimió un ritmo que fue imposible de seguir por todos sus rivales. Él sólo se marchó directo hacia el triunfo. Una victoria histórica por el récord que acabó batiendo. Lo celebró con rabia tras cruzar la línea de meta y puso el broche de oro a un fin de semana excelso. Se llevó la pole, ganó la carrera sprint y se subió a lo más alto el domingo.
"Sentía el ánimo y el aliento de todos los fans en América, ha sido espectacular, hemos hecho historia y estoy soñando. Me habéis devuelto lo que necesitaba. He tenido un problema con el embrague en al salida y tenemos que ir con cuidado con eso, pero luego hemos tenido un ritmo increíble, he perdido la cuenta de los adelantamiento que he hecho para poder ganar la carrera y hacer historia", dijo tras la carrera.
Con este triunfo, Viñales es tercero en el Mundial. Tan solo le separan tres puntos con Bastianini, segundo en el campeonato, y logró recortado un puñado de puntos a Jorge Martín, líder indiscutible. Quien sabe qué le deparará en los próximos meses, pero el piloto catalán está más que preparado para la batalla.