La relación entre Fernando Alonso y Aston Martin está lejos de ser ahora como el cuento de rosas que fue hace un año. El rendimiento del AMR24 ha colocado al monoplaza en la zona media de la parrilla lejos del inalcanzable Red Bull, del poderoso Ferrari y, aunque más cerca, sin alcanzar el ritmo de McLaren y Mercedes, sobre todo en ritmo de carrera.
A falta de rendimiento, Fernando Alonso ha tirado de galones para ser una vez más el referente en puntos del equipo, al igual que pasara el año pasado, pero Aston Martin ya no está tan volcado en los intereses del asturiano, al menos eso parece por sus actos.
Tras el Gran Premio de Australia, el piloto español fue sancionado con 20 segundos de penalización al ser declarado culpable del accidente que tuvo George Russell en la penúltima vuelta. El británico perseguía el Aston Martin número 14 cuando perdió el control de su monoplaza y se estrelló contra el muro para quedar volcado en mitad de la pista.
Mercedes no tardó en responder y pidió a la FIA que abriera una investigación sobre lo sucedido. La escudería alemana acusaba a Alonso de haber realizado un 'brake-test', es decir, de haber frenado más de lo normal antes de la curva para frenar a Russell y ganar ventaja en la salida.
Tras la habitual toma de declaraciones a ambas parte, la FIA dictaminó que Alonso había infligido el reglamento y lo sancionó con 20 segundos. La decisión fue muy polémica e incluso en el propio escrito había algunas contradicciones.
Distanciamiento Alonso - Aston Martin
El piloto asturiano fue muy crítico con la resolución: "En la F1, con más de 20 años de trayectoria, con duelos épicos como Imola 2005/2006/ Brasil 2023, cambiar trazadas y sacrificar velocidad de entrada para tener buenas salidas de curva es parte del arte del automovilismo", aclaró un Alonso.
Aunque lo que más ha sorprendido fue la actitud y la decisión que tomó Aston Martin tras conocerse la sanción. La escudería británica decidió no recurrir el veredicto de los jueces y dar por buenos los 20 segundos de penalización.
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Sorprende la falta de iniciativa de Aston Martin con la sanción a Alonso sobre todo comparándola con el trabajo realizado en Arabia Saudí 2023 para lograr que la FIA retirara la sanción al asturiano durante un pit-lane.
Mike Krack, director del equipo, se limitó a asegurar que "tenemos que aceptar la decisión. Esto no distraerá la atención de un día positivo". Además, ensalzó el trabajo realizado por Lance Stroll que tras salir noveno y acabar octavo (séptimo tras la sanción a Alonso).
"Lance ha pilotado bien durante todo el fin de semana y mantuvo esa forma hasta la bandera a cuadros", aseguraba Krack que por el contrario quitaba mérito a la carrera del asturiano explicando que "se benefició del coche de seguridad virtual; fue sorprendente verlo caer a la octava posición con la penalización posterior a la carrera".
Futuros separados
Este tipo de tensiones no hacen sino más probables todos los rumores que ponen a Fernando Alonso lejos de Aston Martin para 2025. El asturiano acaba contrato al final de la temporada y desde la presentación del AMR24 ha asegurado que su continuidad la decidirá sólo él y que dependerá del rendimiento del coche.
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La baja de Lewis Hamilton en Mercedes y la guerra civil en Red Bull que puede acabar con la salida de Max Verstappen y/o Sergio 'Checo' Pérez ofrecen a Fernando Alonso un abanico de asientos mucho más atractivos deportivamente que el de Aston Martin.
La decisión sobre el futuro de Alonso, Carlos Sainz o Max Verstappen no debe estar lejana puesto que normalmente a partir de verano los equipos comienzan a confirmar y cerrar sus alineaciones para la temporada siguiente. Será por tanto cuestión de unos pocos meses resolver el rompecabezas de quien pilotará donde en 2025.