No está siendo un fin de semana sencillo para Fernando Alonso en Australia. Las mejoras de Aston Martin en el alerón delantero no están siendo suficientes y el piloto asturiano está muy lejos de luchar con las otras grandes escuderías. En la carrera de Melbourne saldrá desde la décima posición tras una tediosa sesión de clasificación.
Alonso se metió en la Q3 y en carrera tendrá detrás la sombra de un Lewis Hamilton que buscará remontar tras ser el fiasco de la clasificación. Fernando fue al límite en búsqueda de un buen tiempo, pero se salió de la pista y su coche quedó algo tocado de cara a la intentona final. No pudo hacer más.
"Entramos con los dos coches en Q3 y eso es una buena noticia, los puntos son posibles. Es más o menos lo que esperábamos, Hamilton sale justo por detrás, y será una batalla intensa", analizó Fernando Alonso en el corralito de prensa al finalizar la jornada de este sábado en el circuito de Albert Park.
No estaba contento Fernando Alonso, cuyo inicio de temporada está muy lejos de lo que fue el de 2023. El piloto asturiano venía de hacer un quinto puesto en Yeda y quería seguir, como mínimo, a esas alturas de la parrilla en este tercer Gran Premio del año. Lo tendrá muy difícil.
"Aquí hemos sido algo menos competitivos que en Yeda, ha sido todo más problemático en cuanto a ritmo. Hay que ir al límite, puedo ir un poco más despacio y quedarme fuera de la Q3. Por suerte había escapatoria y el muro no estaba cerca", dijo sobre la Q3 y su percance en dicha tanda.
Alonso hizo un análisis del rendimiento del AMR24 en Australia: "Hemos tenido un coche bastante crítico todo el fin de semana, no ha sido el Gran Premio más cómodo y la Q3 no ha sido ideal. Cometí un error en la curva y fui a la grava, y en el segundo intento con neumáticos nuevos me faltó confianza", dijo.
Su sensación es que el fondo plano del coche no sufrió apenas nada por su 'excursión' fuera de la pista: "No he notado nada raro en la última vuelta. Había quizás décimas de algún daño, pero hemos sufrido todo el fin de semana", reconoció.
Aún así, el bicampeón del mundo no pierde la fe en el domingo "porque hemos visto carreras locas en la F2 y la F3". "Intentaremos salvar el fin de semana con algún punto, los que corresponden al quinto coche, es noveno y décimo, y pasar a Tsunoda que se nos ha colado y es lo que nos toca. Hay preocupación con el graining, hemos tenido degradación muy alta en las dos primeras carreras y esperamos una carrera difícil", concluyó.