Mercedes ha mostrado su W15, el coche que pilotarán Lewis Hamilton y George Russell en el Mundial de Fórmula 1 de 2024. Será la última vez que el heptacampeón se suba a una 'flecha plateada', color icónico -el plata- que recupera el nuevo monoplaza para mezclarlo con el negro de los últimos años.
Mercedes ha coincidido este miércoles con McLaren en la pista de Silverstone para realizar algunas pruebas iniciales con su nuevo coche durante todo el día. Será la única vez que pueda hacerlo antes de viajar a Baréin para los test de pretemporada la próxima semana.
El equipo con sede en Brackley espera dar un paso adelante en 2024 en la que será la última temporada de Hamilton con el equipo antes de su cambio a Ferrari en 2025. De nuevo tendrá de compañero a Russell, quien busca seguir dando pasos adelante para afianzarse como la siguiente cara principal del equipo.
Respecto a su predecesor, el W14, el nuevo monoplaza de Mercedes trae un nuevo chasis y una nueva carcasa de caja de cambios. Aerodinámicamente, el equipo explica que "la atención se ha centrado en la eficiencia, la búsqueda interminable de encontrar más carga aerodinámica con menos resistencia y entregarla al rumbo de una manera que complemente la función de la suspensión y los neumáticos".
También hay mejorar para acabar con "el impredecible" eje trasero del coche anterior: "El equipo ha trabajado duro para garantizar que ambos ejes, pero especialmente el eje trasero, mantengan un mejor control del neumático que en el W14. También se han realizado algunas tareas de limpieza en áreas en las que teníamos margen de mejora, incluido el efecto DRS y el rendimiento de las paradas en boxes.
Sin embargo, es en la parte inferior del coche donde residen los principales factores diferenciadores. El ingeniero James Allison explicó esto: "Con esta generación actual de automóviles, gran parte del rendimiento proviene de cómo interactúa el piso con la carretera. Que un automóvil sea efectivo o no depende de qué tan bien se le permita al piso comportarse aerodinámicamente".
En la dirección del equipo sigue Toto Wolff, quien dejó las primeras declaraciones sobre el W15 y lo que espera para la temporada 2024. A pesar de acabar Mercedes en segunda posición en el Mundial de constructores el pasado año, el directivo reconoce que hay una "montaña que escalar" en referencia a la distancia con Red Bull. La escudería austriaca, la única que falta por presentar su coche, acabó 451 puntos por debajo de los campeones.
[Todos miran a Red Bull: de Ferrari a Aston Martin, los nuevos F1 siguen los pasos de Adrian Newey]
"No hay milagros en este deporte", comentó Wolff. "Pero nuestra ambición y determinación son fuertes. Desde que trazamos este nuevo rumbo, el desarrollo ha progresado bien". "Teníamos varios elementos en nuestra lista de prioridades para este coche. Pronto veremos si hemos dado el paso que buscábamos".
Wolff añadió sobre las luchas que ha enfrentado el equipo durante las últimas dos temporadas: "Como dice el refrán: cuando duele, se pega. Creo que los dos años anteriores fueron necesarios para que nos reajustáramos, recalibráramos y reinventáramos en ciertas áreas.
"Ese enfoque de raíz y rama nunca es fácil. Pero hemos progresado y esperamos dar el siguiente paso con el W15. No será un camino lineal, pero cuando tropecemos, nos levantaremos y sigue escalando".