Es una realidad que los objetivos de Fernando Alonso se han ido difuminando poco a poco en la segunda parte de la temporada. La caída sin frenos de Aston Martin continúa, con dos abandonos seguidos del asturiano en el paso por Estados Unidos y México. Este domingo se retiró tras rodar último durante una cantidad considerable de vueltas.
Las cosas no iban bien para Aston Martin durante el fin de semana en el Autódromo Hermanos Rodríguez. Para colmo, como transmitía Alonso al acabar la carrera, su AMR23 se llevó alguna pieza del choque de 'Checo' Pérez -que salió por los aires en la primera curva-, y afectó a su aerodinámica: "Ya íbamos regulín y, encima, pasamos por encima de esas piezas", decía Fernando.
También Lance Stroll acabó KO antes de tiempo. Aston Martin no ha dado con la tecla con la introducción de las últimas piezas y se encuentra en una situación impredecible meses atrás. Como también lo era el invierno pasado sobre su arranque en 2023. Sigue siendo ese el consuelo de Alonso, que da "por bueno" el año y se centra en el que viene.
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Alonso había avisado de lo complicado que era manejar el coche con las mejoras. Stroll, que iba con la antigua configuración, la de Qatar, llegó a rodar un segundo más rápido que el piloto español. Dejó pasar al canadiense al comienzo de la prueba y, antes de la bandera roja -en la vuelta 33, por un duro accidente Magnussen-, ya dejaba ver su resignación en el día de ayer.
Esto decía por radio cuando desde el muro buscaban una nueva estrategia para lo que quedaba de carrera: "Compañero, no tengo frenos, ni neumáticos, estamos fuera de los puntos. Quiero decir, intentamos hacer lo que sea, pero me da lo mismo", dijo en declaraciones recogidas por La Sexta. En la vuelta 48 se acabó la pesadilla y Alonso se metió en boxes para no volver a salir.
"No queda otra que seguir", reconocía Alonso después ante los micrófonos de DAZN. "Creo que este año está más que finiquitado en el sentido de darlo por bueno. Nunca hubiésemos pensado tener esta cantidad de puntos y luchar con Ferrari o Mercedes, incluso estamos aún por delante de ellos en el campeonato de pilotos, que es una auténtica locura, teniendo (en Ferrari) un coche que ha hecho 6 o 7 poles ya. Así que bueno, esa es la parte positiva de este año", señaló.
El contador de podios se congeló en siete para él en el circuito de Zandvoort y no parece que se vaya a mover más: "Se puede revertir la situación. Quedan tres pistas que nos van a dar más datos. Dependerá de lo que entendamos si esperamos pelear por podios, que yo creo que no", aclaró Alonso. La cabeza está ya puesta en 2024.