Cada vez queda menos para que la Fórmula 1 regrese con el Gran Premio de Azerbaiyán. Bakú espera. Y aunque solo hay tres semanas entre Australia y la cuarta carrera del Mundial, se está haciendo largo. Al menos, los protagonistas están dando de qué hablar en este pequeño 'parón'.
En Red Bull, todas las miradas están puestas en Max Verstappen. El neerlandés es el líder del Mundial de pilotos, ha ganado dos de las tres carreras que ya se han celebrado y se espera que siga sumando victorias para acabar conquistando su tercer campeonato del mundo de la F1.
Precisamente, la carrera que no ganó 'Mad Max' se la llevó su compañero de equipo: Sergio 'Checo' Pérez. A raíz de eso, comenzó a especularse con cómo es la verdadera relación entre ellos, señalándose también que la tensión subía por momentos en el garaje de Red Bull.
Sergio 'Checo' Pérez, en el Gran Premio de Australia de la F1 2023
Para alejar los rumores y dar tranquilidad para lo que resta de temporada, Pérez ha hablado sobre su relación con Verstappen. "Para ser honesto, nos respetamos mucho más de lo que la gente podría pensar", ha explicado el piloto mexicano en declaraciones para Racing News 365.
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"Hay un gran ambiente con el equipo, hay un nivel muy alto de respeto entre todos, tanto entre sus ingenieros como con los míos. Creo que ambos somos lo suficientemente maduros para saber qué está bien y qué está mal. Mientras siga siendo así, no espero que nada cambie", ha agregado 'Checo' Pérez.
Pequeños roces
En Arabia Saudí, 'Checo' Pérez logró la victoria por delante de Max Verstappen y Fernando Alonso. Después de la carrera, no se vio muy contento al neerlandés pese al segundo puesto. De hecho, arrebató la vuelta rápida a su compañero de equipo para seguir liderando el Mundial.
Esto hizo que se cruzasen varias declaraciones entre ambos y que se dijera que a Verstappen no le había sentado nada bien quedar segundo. Al igual que a Pérez no le gustó que Max le quitase la vuelta rápida y tampoco esa condición de segundo piloto del equipo con la que se le etiqueta.
Pese a los roces, el mexicano ha pretendido calmar las aguas al hablar de cómo se encuentra la atmósfera de Red Bull, así como también su relación con Verstappen. Eso sí, ha dejado un mensaje con una gran lectura: "Ambos somos lo suficientemente maduros para saber qué está bien y qué está mal".