Lo sucedido en la Fórmula 1 el pasado fin de semana en el circuito de Suzuka sigue dando mucho de qué hablar. La carrera, en la que se proclamó campeón del mundo Max Verstappen por segunda vez, se desarrolló en unas condiciones desfavorables de lluvia que propiciaron situaciones de verdadero peligro para los protagonistas, los pilotos que estaban sobre la pista.
Desde la celebración del Gran Premio de Japón han sido varios los conductores que han mostrado sus quejas con la manera de actuar por parte de la FIA a la hora de garantizar su seguridad, y el último de ellos ha sido Lando Norris, el piloto de McLaren, que también se ha quejado por lo vivido en el país asiático.
La gran polémica sigue siendo la entrada de un tractor para retirar el coche de Carlos Sainz después de su accidente. El español perdió el control de su monoplaza y una grúa entró para tratar de retirarlo, pero lo hizo cuando los pilotos estaban en pista rodando a gran velocidad. De hecho, la presencia de este vehículo pesado pasó desapercibida para la mayoría debido a la poca visibilidad, y muchos apuntan que se podría haber desencadenado una nueva tragedia como la de Bianchi en 2014, que perdió la vida en aquel año.
La escasa visibilidad
Norris apuntó a la falta de visibilidad más que a la propia lluvia como el principal foco de peligro, y vio con buenos ojos que se decidiera detener la carrera: "El gran problema no es que la pista esté demasiado mojada, sino que es muy difícil poder ver algo. Tienes que mirar a las dos cosas por separado", dijo sobre la dificultad que tienen los pilotos para poder ver en estas condiciones.
El piloto británico lamentó la falta de seguridad y que tengan que asumir tanto riesgo al salir a la pista así: "En unos entrenamientos, estas condiciones habrían estado bien y yo también conduciría. Pero cuando estás décimo en un Gran Premio y no puedes ver nada, todo es diferente. El riesgo que asumimos en tales condiciones es una locura", añadió.
El claro ejemplo de esta falta de visibilidad y también de seguridad que puso Norris fue el accidente de Carlos Sainz con su Ferrari, y la entrada en el asfalto del tractor que iba a retirar el monoplaza: "No puedes ver a cinco o diez metros, aunque el coche que tienes delante tenga una gran luz trasera. Tampoco puedes saber cuándo un monoplaza se detiene frente a ti. Yo no vi el accidente de Sainz, pero si hubiera girado un metro más a la izquierda, lo habría golpeado fuerte", alegó.
Esta situación fue precisamente algo de lo que ya se quejó de manera amarga otro piloto, Pierre Gasly, que a punto estuvo de toparse con esta grúa. "He estado a dos metros de morir hoy, es inaceptable", apuntó el piloto francés acerca de un momento tan peligroso para su integridad.
Para Norris, el problema principal con estas condiciones meteorológicas tan adversas no es la lluvia, sino la gran cantidad de agua que levantan los monoplazas, que dificultan la visión: "Tenemos que hacer algo para que estos coches produzcan menos spray. Es la única forma en la que podemos seguir conduciendo en condiciones desfavorables. Me encantaría, porque me encantan los desafíos de una pista mojada", finalizó el piloto británico de McLaren.