La Fórmula 1 quiere ponerse dura con las protestas de contenido político que han llevado a cabo algunos pilotos en los últimos años. Una posición que ha estado liderada en la mayoría de ocasiones por la figura de Lewis Hamilton, quien ha sido muy reivindicativo a la hora de mostrar sus ideas en todos los escenarios.
Desde los podios hasta el pit lane pasando incluso por la ceremonia de los himnos. Cualquier momento era bueno para que pilotos como el británico mostraran proclamas contra el racismo o contra la violencia policial en camisetas, sudaderas e incluso las mascarillas. Algo que fue replicado también por pilotos como Sebastian Vettel, quien no dudó en sumarse este tipo de comportamientos públicos.
El alemán, que se ha retirado esta temporada tras dejar Aston Martin, fue por ejemplo el primero que se mostró contrario a correr en Rusia tras estallido de la guerra. Una decisión que después fue seguida por otros pilotos. Sin embargo, nadie ha ido tan lejos como los dos campeones del mundo. Por ello, la Fórmula 1 y la FIA han decidido tomar cartas en el asunto para intentar tener el control de la situación.
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Ahora, ha sido retocado el Código Deportivo del reglamento de la Federación Internacional de Automovilismo con una nueva reforma que prohíbe de manera expresa "declaraciones políticas, religiosas y personales". Durante las últimas temporadas ha sido habitual que muchos pilotos hayan sido protagonistas en este tipo de situaciones en los que se han convertido en altavoces reivindicaciones y de idearios políticos de todo tipo.
Reforma del Código Deportivo
Este tipo de reivindicaciones no solo ha estado relacionado con mensajes políticos, sino que, en muchas ocasiones, ha tratado también cuestiones medioambientales o ecológicas. Un ámbito que ha sido apoyado en muchas ocasiones por Sebastian Vettel, mientras que Hamilton se ha centrado históricamente en las reivindicaciones raciales.
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Ahora, se ha llevado a cabo una actualización del reglamento que apuesta por lo siguiente: "La realización y exhibición general de declaraciones o comentarios políticos, religiosos y personales, violan el principio general de neutralidad promovido por la FIA bajo sus estatutos, a menos que haya sido previamente aprobado por escrito por la FIA para competiciones internacionales, o por la ASN correspondiente para Competencias Nacionales dentro de su jurisdicción".
De esta manera, cualquier tipo de reivindicación que se lleve a cabo sin el permiso de la FIA y de la Fórmula 1, como se han realizado muchas de las llevadas a cabo por las estrellas del 'Gran Circo', serán merecedoras de una sanción tal y como se recoge en la nueva reforma del Código Deportivo.
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Sin embargo, lo que no se ha hecho público todavía es cuáles serán esas sanciones, aunque se espera que estas dependan de la gravedad de las infracciones cometidas. No obstante, el Código Deportivo ya recoge que por este tipo de incidencias, la FIA puede imponer sanciones de hasta 250.000 euros o incluso penalizaciones deportivas que podrían llegar a la prohibición de participar en una carrera. Así pues, la nueva 'ley anti Hamilton' cerca de entrar en marcha.